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E-BOLETíN PSI. Vol.5, No.2, Mayo 2010

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DESDE EL ESCRITORIO DEL EDITOR…
Bienvenidos a una nueva edición de nuestro e-boletín Psi. En este número contamos con la cooperación de varios colaboradores que han enviado artículos de gran interés y actualidad. Carlos S. Alvarado escribe sobre el rol del médium como un inspirador de nuevos diseños de investigación para comprender la actividad mental de la mediumnidad, tanto en médiums de efectos físicos como mentales. Desde su perspectiva, el medium permitió explorar la naturaleza de la mente "inconsciente" en psicología, así como también formular teorías acerca de los fenómenos parapsicológicos, e incluso sobre la supervivencia después de la muerte.

Alejandro Parra revisa la experiencia de ver el aura como un fenómeno psicológico, pero también su naturaleza presuntamente paranormal, a través de un circuito histórico y cultural. A lo largo de la historia, ha habido fuertes discusiones acerca de su naturaleza física, y sus implicaciones en campos como medicina y psicología. En particular, Parra explora los estudios recientes para determinar si la experiencia de ver el aura es imaginal o alucinatoria y qué variables psicológicas influyen en su percepción.

Juan Gimeno adelanta su propia experiencia personal con el psíquico uruguayo Marcelo Acquistapace, y describe experiencias personales así como estudios piloto llevados a cabo para determinar el modo en que Acquistapace actúa. En su descripción, Gimeno advierte acerca de la importancia de investigar con sujetos especiales, la necesidad de seguir estos casos cercanamente, y la dificultad implícita de cooperar recíprocamente en futuros estudios, en especial los abordajes "ecológicos", que permitan diseñar experimentos confiables y rigurosos en el contexto natural en el que el psíquico opera, en lugar de someterlo a condiciones experimentales antinaturales, o que desentonan con su estilo de tarea y puede inducir a un artificio de sus condiciones y garantías de éxito psi.

Finalmente, presentamos en esta edición la controversia generada por dos autores que sostienen "haber encontrado la mayor evidencia contra la existencia de psi" en un experimento de percepción extrasensorial empleando neuroimágenes, publicado en un reciente número de una reconocida e influyente revista de neurociencia. Reproducimos al español a dos comentaristas, Kendrick Frazier, un escéptico de psi editor de la revista The Skeptical Inquirer y a un defensor de psi John Palmer, editor del Journal of Parapsychology quienes formulan un juicio crítico del estudio, y abren un debate sobre la urgencia de aplicar tecnologías convencionales para explorar funciones mentales de la complejidad del fenómeno psi.

Entre otras secciones, Revisiones de Libros y Noticias y un reporte de la visita de Parra a varias capitales europeas, cerramos esta edición del e-boletín. Espero que este material sea de interés. Hasta el próximo número.

Alejandro Parra
Editor

Alejandro Parra, Editor
Alejandro Parra, Editor
rapp@fibertel.com.ar
Mayo 2009

Historia
Carlos S. Alvarado
Carlos S. Alvarado
Csa3m@virginia.edu

NOTAS HISTORICAS SOBRE EL ROL DE LA MEDIUMNIDAD EN PARAPSICOLOGIA

Por Carlos S. Alvarado*

Desde el punto de vista histórico, el médium fue una figura importante para el desarrollo de la investigación psíquica por varias razones, lo cual incluye la producción de fenómenos, así como el contexto y la oportunidad para el avance metodológico y conceptual del fenómeno psi, tema que brevemente profundizaré en este artículo.


El Médium en el Espiritismo

Si bien la aparición del médium practicante en los Estados Unidos a mediados del siglo XIX precedió a muchas manifestaciones que pueden ser consideradas como mediúmnicas (Ogden, 2001; Paton, 1921), me concentraré aquí en la evolución de la mediumnidad a partir del siglo XIX en adelante. Los orígenes de la mediumnidad como profesión se ubican con los misteriosos raps (golpes) que tuvieron lugar en la casa de la familia Fox en Hydesville, New York, en 1848 (Capron, 1855, Cap. 2). Las manifestaciones centradas en torno a las hermanas Fox, Margaretta (circa 1833-1893) y Catherine (circa 1837-1892) (las fechas de nacimiento no son seguras), parecen implicar comunicaciones inteligentes por medio de golpes (para una biografía reciente de las hermanas Fox, ver Weisberg, 2004). Sus conocidas actuaciones y las controversias que generaron condujeron a lo que la médium e historiadora estadounidense del espiritismo americano Emma Hardinge (más tarde Britten, 1823-1899) describió en su libro Modern American Spiritualism (Espiritismo Americano Moderno) como "la formación de círculos en todas las casas de familia de la ciudad, y el rápido desarrollo de los médiums en cada familia" (Hardinge, 1870, p. 65).

Los comportamientos del médium contribuyeron a crear la opinión del público acerca del rol de médium, como las acusaciones de fraude de las hermanas Fox.
Los comportamientos del médium contribuyeron a crear la opinión del público acerca del rol de médium, como las acusaciones de fraude de las hermanas Fox.


Hubo un gran número de médiums profesionales. Cuatro años después del comienzo de la carrera de las hermanas Fox, el renombrado juez y espiritista norteamericano John W. Edmonds (1799-1874) escribió: "Por entonces se podía contar a los médiums por unidades, pero ahora por miles..." (Edmonds & Dexter, 1854, p. 78). Hacia 1853, se estimaba que había 30.000 médiums en los Estados Unidos (Howitt, 1863, Vol. 2, p. 196). Después del siglo XIX, los médiums incluyen Cora L.V. Hatch (1840-1923), conocida por su mediumnidad que giraba en torno a presentar discursos sobre problemas sociales, científicos y literarios, o a Daniel Dunglas Home (1833-1886), cuya mediumnidad física asombró a muchos.

Eusapia Palladino (1854-1918) fue una importante catalizadora para la investigación de los fenómenos médiumnicos. Varios científicos y expertos quedaron impresionados con ella.
Eusapia Palladino (1854-1918) fue una importante catalizadora para la investigación de los fenómenos médiumnicos. Varios científicos y expertos quedaron impresionados con ella.

No sólo el espiritismo se desarrolló en gran medida por los fenómenos de mediumnidad, sino que estos fenómenos, así como los comportamientos del médium, contribuyeron a crear la opinión del público acerca del rol de médium. algúnas de estos comportamientos fueron negativos, como puede verse en las frecuentes acusaciones de fraude que afectaron al desarrollo de la investigación psíquica. Esto comenzó en relación a los raps de las hermanas Fox (Flint, 1851), una situación complicada provocada por una controvertida confesión de fraude de una de las hermanas Fox (Done with the Big Toe ["Se hacía con el dedo gordo del pie"], 1888; ver también Weisberg, 2004, Cap. 17).

La historia del espiritismo y de la investigación psíquica está repleta de todo tipo de fraudes mediumnicos, la mayoría de éstos relacionados con fenómenos físicos. En la Tabla 1 se presentan algúnos de los fraudes. Aunque hay que ser cauto de no condenar a todos los médiums por igual, no hay duda de que muchos de estos fraudes perpetuaron la mala reputación de los médiums en la sociedad.


Tabla 1: EJEMPLOS DE FRAUDE EN MEDIUMNIDAD FíSICA

Incidente fraudulento Fuente
Materialización de "Marie" con la médium Corner (Florence Cook). Se analizó y se comprobó que era la médium. Sitwell & Von Buch (1880)
Una de las hermanas Bangs estaba disfrazada con una máscara que simulaba ser una materialización. Se encontraron pelucas, tela de muselina, y maquillaje inspeccionando en los alrededores de la sala de sesión. Bogus Spiritualists Exposed (1888)
Materialización de la Sra. Williams. Se comprobó que era la médium. Dariex (1894)
Se encontró al médium Charles Eldred usando una silla especial con un compartimiento secreto lleno de parafernalia para materializaciones falsas.
Exposure of Mr. Eldred (1906)
Se descubrió que Charles Bailey (1857-1947) había comprado dos aves que más tarde usaría como "aportes." Reichel (1910)
Ladislao Lasslo confesó que todas sus materializaciones se producían de manera fraudulenta. Un asistente resultó ser el cómplice del médium. Schrenck-Notzing (1924)
Se fotografió a la médium Stanislawa Popielska en la oscuridad agarrando un objeto que parecía haber sido desplazado telekinéticamente. Osty (1930)



El Médium en la Investigación Psíquica

La historia del fraude por parte de los médiums ha afectado negativamente a la investigación psíquica. Pero hay otras formas mediante las cuales los médiums han cooperado en las investigaciones. La mediumnidad ha sido fundamental para el desarrollo de la investigación psíquica. Debido a que los médiums presentaban la posibilidad de observar fenómenos en varias ocasiones, bajo condiciones de cierto control, éstos fueron un importante catalizador para el desarrollo de la investigación psíquica. Es decir, en lugar de depender exclusivamente de fenómenos espontáneos difíciles de observar, como las experiencias de percepción extrasensorial, poltergeists, y apariciones de los muertos, en la mediumnidad los investigadores psíquicos tenía una fuente recurrente de fenómenos observables que les permitió imponer condiciones semi-experimentales bajo las cuales se pudieron hacer observaciones de una manera bastante más sistemática.

Años más tarde, una buena parte de la investigación psíquica se llevó a cabo en gran parte debido a las repetidas actuaciones de un gran número de médiums que parecían ser capaces de producir fenómenos en forma repetida. Para explorar este punto, se puede contar el número de artículos sobre mediumnidad publicados en las revistas de investigación psíquica. Una de las revistas más importantes fue el Proceedings de la Society for Psychical Research de Londres. Tanto la mediumnidad mental como la física eran discutidas en los Proceedings. En el período 1882 a 1900, de los 204 artículos publicados en esta revista, el 23% se destinó a sesiones espiritistas, sin contar aquí los debates conceptuales y metodológicos de la mediumnidad, que también se publicaron en los Proceedings.

Como puede verse en Tabla 2, varias revistas importantes de investigación psíquica, en períodos posteriores, también publicaron numerosos trabajos acerca de fenómenos de mediumnidad.


Tabla 2: ARTíCULOS SOBRE MEDIUMNIDAD EN REVISTAS
DE INVESTIGACIóN PSíQUICA 1921-1930*

Revistas Lugar de Publicación Total de artículos %
Proceedings of the
Society for
Psychical Research
Inglaterra 67 57
Revue métapsychique Francia 284 25
Proceedings of the American Society for Psychical Research Estados Unidos 12 58
* Se eligió el año 1921 porque fue el primer año de la publicación de la Revue Métapsychique, aunque con un título diferente. Los Proceedings of the American Society for Psychical Research consultados aquí llegan hasta 1927 y luego reinició su publicación en 1933. No se cuentan aquí obituarios, notas breves de las organizaciones que publicaban las revistas y noticias varias de la sociedad.


Para Charles Richet (1850-1935) los médiums "cambian sus pensamientos involuntaria e inconscientemente, en los movimientos de la mano... Los movimientos demostraban que aparte del pensamiento… del medium, existe simultáneamente otro pensamiento casual que sigue sus propios ciclos."
Para Charles Richet (1850-1935) los médiums "cambian sus pensamientos involuntaria e inconscientemente, en los movimientos de la mano... Los movimientos demostraban que aparte del pensamiento… del medium, existe simultáneamente otro pensamiento casual que sigue sus propios ciclos."

Quizá no hubo ningún otro médium en el siglo XIX que fuera tan influyente para el estudio científico de la mediumnidad mental en América como la médium Leonora E. Piper (1857-1950) y la médium de efectos físicos italiana Eusapia Palladino (1854-1918). La Sra. Piper fue estudiada por William James (1842-1910) (James, 1890b). En representación de la SPR, Richard Hodgson (1855-1905) comenzó a estudiar la Sra. Piper en 1887, y terminó la publicación de un estudio años después en los Proceedings de la SPR en la que Hodgson aceptó el carácter verídico de algúnas de sus comunicaciones (Hodgson, 1892a).

La disposicion de la Sra. Piper para ser investigada nos provee por primera vez en la historia de la investigación psíquica, con una gran cantidad de estudios a largo plazo, sistemáticamente y en forma controlada, de un caso de mediumnidad mental. La Sra. Piper viajó a Inglaterra en 1889 para ser investigada por la SPR. Los informes de Hodgson mostraron que algúnas de sus comunicaciones no se podían explicar de manera normal, o producto de un fraude (Leaf, 1890; Lodge, 1890). Otros estudios a posteriori examinaron cuidadosamente a la Sra. Piper, contribuyendo a la presunta evidencia de elementos verídicos en el trance mediumnico (por ejemplo, Hodgson, 1898; Hyslop, 1901).

Palladino, por otra parte, como medium de telequinesia y materialización, fue una importante catalizadora para la investigación de los fenómenos mediúmnicos. Varios científicos quedaron impresionados con ella, incluyendo el filósofo alemán Carl du Prel (1839-1899), el psicólogo polaco Julián Ochorowicz (1850-1917), el diplomático y estudioso ruso Alexandre Aksakof (1832-1903), el físico británico Oliver Lodge (1851-1940), así como el mencionado fisiólogo francés Charles Richet y el psiquiatra y criminólogo italiano Cesare Lombroso (1835-1909).

Una investigación anterior realizada en Milán en 1892 marcó el principio del interés científico en general y produjo una gran controversia acerca de la mediumnidad (Aksakof et al., 1893; ver también La polémica degli Scienziati sullo Spiritismo, 1892). Después de estas sesiones, Palladino atrajo la atención de muchos investigadores en toda Europa, como puede verse en la literatura publicada de la época (por ejemplo, Courtier, 1908; Morselli, 1908).

Ningun médium antes de Piper y Palladino, ni siquiera las hermanas Fox ni D.D. Home, habian sido investigados por tantos científicos y académicos bajo condiciones controladas. Aunque Piper y Palladino estimularon el desarrollo de la investigación psíquica con los médiums, otros médiums indirectamente también estimularon un tipo diferente de investigación. Las actuaciones de la controvertida medium estadounidense Margery (Mina) Stinson Crandon (1888-1941; Tietze, 1973); y los estudios con mediums mentales de John F. Thomas (1874-1940; Thomas, 1937) influyeron el desarrollo inicial de los experimentos de percepción extrasensorial (PES) llevados a cabo por Joseph Banks Rhine (1895-1980).

Las actuaciones de la controvertida medium estadounidense "Mina" Crandon y los estudios con John F. Thomas influyeron en el curso de los experimentos de percepción extrasensorial llevados a cabo por Joseph Banks Rhine (1895-1980) y su esposa Louisa.
Las actuaciones de la controvertida medium estadounidense "Mina" Crandon y los estudios con John F. Thomas influyeron en el curso de los experimentos de percepción extrasensorial llevados a cabo por Joseph Banks Rhine (1895-1980) y su esposa Louisa.

Rhine junto a su esposa y colega Louisa E. Rhine (1891-1983), habían tenido una sesión de espiritismo con Margery que les convenció que la médium era fraudulenta (Rhine y Rhine, 1927). Aunque en su trabajo sobre mediumnidad mental con Thomas, los Rhine obtuvieron comunicaciones verídicas, finalmente permanecieron dudosas, y hubo algo que las sesiones con la médium no pudieron resolver. La pregunta era la siguiente: ¿Las impresiones verídicas de los médiums sólo pueden ser explicadas mediante la influencia de un espíritu, u otra mejor explicación podía ser que había algúna forma de PES entre el médium y los asistentes? Cuando J.B. Rhine publicó su ya clásico libro Extra-sensory Perception en 1934, ya había decidido centrar su programa de investigación en el estudio de las habilidades psíquicas de los vivos, lo que implica que estas habilidades necesitaban ser comprendidas en sus propios términos y en relación con otros fenómenos antes de que el problema de la influencia de un agente desencarnado pudiera ser investigado científicamente (Rhine, 1934a, p. 147).

En un artículo publicado ese mismo año, Rhine (1934b) escribió que "mientras los poderes naturales del sensitivo sean desconocidos e inmensurables, solo pueden haber conjeturas o creencias inciertas sobre la hipótesis de la supervivencia" (p. 92). Finalmente, el matrimonio Rhine volvió a los estudios experimentales de la PES (y más tarde a la psicokinesis), que hizo famosa a la Universidad de Duke y cambió el curso de la investigación psíquica (particularmente en los países anglosajones). Lo que fue en gran medida el estudio de los médiums en las sesiones, ahora se había convertido en un laboratorio que estudiaba a participantes voluntarios, tales como estudiantes universitarios.

A medida que creció el paradigma experimental impulsado por el matrimonio Rhine, el estudio de la mediumnidad comenzó a disminuir, pero los estudios con los mediums continuaron a partir de la década del 30, por ejemplo, con Gladys Osborne Leonard.
A medida que creció el paradigma experimental impulsado por el matrimonio Rhine, el estudio de la mediumnidad comenzó a disminuir, pero los estudios con los mediums continuaron a partir de la década del 30, por ejemplo, con Gladys Osborne Leonard.

El estudio de la mediumnidad luego comenzó a disminuir a medida que creció el paradigma experimental promovido por el matrimonio Rhine. Sin embargo, esto no significa que no se hayan realizado estudios con los médiums a partir de la década del 30, por ejemplo, los casos de mediumnidad con Gladys Osborne Leonard (Irving, 1943), Eileen J. Garrett (Birge y Rhine, 1942), Caroline Chapman (Schmeidler, 1958), y con Hafted Björnsson (Haraldsson & Stevenson, 1974). En cuanto a los efectos físicos, la lista de las investigaciones incluye el trabajo con el médium Rudi Schneider (Osty & Osty, 1931-1932) u otros (por ejemplo, Hamilton, 1934). Durante la década de 1930, Margery produjo fenómenos psíquicos y físicos que fueron lo suficientemente interesantes como para mantener interes en su mediumnidad en algúnos círculos de investigación psíquica (por ejemplo, Thorogood, 1933).

Han habido unas pocas investigaciones sobre médiums mentales en los últimos años (por ejemplo, Beischel & Schwartz, 2007; Roy & Robertson, 2001). Pero no hay duda de que los parapsicólogos contemporáneos en general ignoran la mediumnidad como un tema de investigación. Hay muy poca investigación sobre el tema presentado en congresos y publicado en revistas. Sin embargo, la antigua investigación ha tenido gran influencia en el campo, especialmente en términos de problemas metodológicos y conceptuales, como se verá en las siguientes secciones.






ASPECTOS METODOLóGICOS EN EL ESTUDIO DE LA MEDIUMNIDAD


Control de los médiums

Las críticas y acusaciones de fraude de los médiums, principalmente de tipo físico, aumentó la sensibilidad de muchos a causa de los problemas de fraude, y lo más importante, de errores de observación, como se ve en el intento de S.J. Davey de demostrar la debilidad de algúnos testimonios en favor de la mediumnidad física bajo determinadas condiciones (Davey, 1887; Hodgson, 1887, 1892b). Davey mostró que los testigos de un simulacro de sesión de espiritismo no eran capaces de recordar los procedimientos de seguridad con precisión. Este tema fue también examinado en trabajos posteriores (Besterman, 1932). No estoy diciendo que los resultados de estos estudios se puedan generalizar a todos los contextos de sesiones espiritistas, pero no hay duda de que estas cuestiones no sólo contribuyeron a mejorar los estándares de evidencia de la mediumnidad física, sino también a aumentar de manera simultánea el escepticismo acerca de la mediumnidad física.

Los informes de Hodgson mostraron que algúnas de sus comunicaciones no se podían explicar de manera normal, o ser producto de un fraude.
Los informes de Hodgson mostraron que algúnas de sus comunicaciones no se podían explicar de manera normal, o ser producto de un fraude.

Con el tiempo, algúnos médiums, entre ellos Eusapia Palladino, que fuera capturada en varias ocasiones haciendo fraudes (por ejemplo, Flammarion, 1907, pp. 110, 203), dió la oportunidad para desarrollar mejores controles científicos. Un informe de Oliver Lodge (1894), criticado por Richard Hodgson (1895), se refirió a los posibles indicios de fraude y subrayó la importancia de una vigilancia continua cuando los investigadores trabajaban con médiums como Palladino, conocida por haber hecho trampas. Este hábito en ella condujo a los investigadores al desarrollo de técnicas para el control de tales acciones en investigaciones subsiguientes (por ejemplo, en Feilding al., 1909).

Palladino también ofreció el contexto para desarrollar investigaciones usando instrumentos de grabación y experimentación de fenómenos físicos, una tendencia que había comenzado con otros médiums a principios del siglo XIX (ver Crookes, 1874). Por ejemplo, el fisiólogo italiano Filippo Bottazzi (1867-1941; Bottazzi, 1907) obtuvo registros de acción telekinética en sesiones espíritas mediante diversos tipos de instrumentos, como lo hicieron los investigadores de las sesiones llevadas a cabo en el Institut Général Psychologique en París (Courtier, 1908). En este último estudio, se empleó una mesa de cuatro patas especialmente diseñada de manera que si el médium levitaba cualquiera de sus patas, un circuito cerrado activaba una aguja, permitiendo registrar cada elevación.

Aunque el estudio llevado a cabo con la Sra. Piper ciertamente no era perfecto, no obstante planteó ciertas normas metodológicas. Se realizaba bajo condiciones controladas destinadas a prevenir el fraude, lo cual incluia la intervención de extraños como participantes (Lodge, 1890). Además, Lodge decía haber examinado la correspondencia de la Sra. Piper para controlar las fuentes normales de información.

Antes de los estudios con la Sra. Piper, la mayoría de las sesiones se escribían de memoria y no se registraban textualmente en el momento (para una excepción ver a Simon, 1923). Los registros recopilados de memoria estaban abiertos a críticas por omisión o exageración. Al inicio de la carrera de la Sra. Piper, William James (1886) defendió la importancia de tener un taquígrafo para tomar notas literales que luego podrían convertirse en registros permanentes de las sesiones. James usó ese método para grabar algúnas de sus sesiones con la médium. En sus estudios iniciales, Hodgson (1892) también utilizó registros taquigráficos, ampliándolos con notas hechas después de las sesiones. Hay también ejemplos de notas durante las sesiones (Hyslop, 1901; Lodge, 1890). La grabación de las sesiones se convirtió en un procedimiento estándar en investigaciones posteriores (Tanner, 1910; J.F. Thomas, 1937) y mejoró considerablemente la fiabilidad de los registros.


Análisis Cuantitativo y Cualitativo de la Mediumnidad

El estudio de las declaraciones de los médiums mentales ha beneficiado metodológicamente a la investigación psíquica porque ha dado un impulso al desarrollo de herramientas para analizar el material verbal. Las características de las lecturas de los médiums hizo a los investigadores darse cuenta desde el principio lo difícil que era evaluar el azar como una posible explicación para la veridicabilidad de las declaraciones del médium. Varios estudios iniciales -desde los trabajos de Hyslop (1919) a los de Prince (1923), Sidgwick (1921), Saltmarsh (1929), Saltmarsh y Soal (1930), Pratt (1936) y J.F. Thomas (1937)- son ejemplos de posibles explicaciones acerca del papel del azar en las declaraciones de los médiums. Por ejemplo, el investigador inglés Herbert Francis Saltmarsh (1881-1943) ideó un sistema de puntuación para evaluar la información presentada por la médium mental Warren Elliott (Saltmarsh, 1929). Saltmarsh asignó una puntuación de uno a declaraciones de carácter general, o sea, que pudieran aplicarse a muchas personas, una puntuación de cinco a declaraciones más específicas que eran menos importantes para un gran número de personas, y una puntuación de 20 a declaraciones que eran particularmente específicas.

Después de Hyslop (1919), Saltmarsh intentó excluir la posibilidad de coincidencia comparando las puntuaciones de las comunicaciones de los asistentes con las puntuaciones obtenidas de otras personas "control", es decir, que no habían estado con el médium y no guardaban relación con el estudio.

Independientemente de la validez de estas técnicas, debemos considerarlas una parte importante de la historia del análisis cuantitativo en parapsicología. Luego, basados en estos esfuerzos, los investigadores desarrollaron técnicas estadísticas que permitieran el estudio de la PES en personas que no son médiums. Pratt y Birge (1948) adoptaron esta perspectiva cuando presentaron una breve revisión de la literatura en su influyente artículo sobre la evaluación del material verbal libre en parapsicología.

Théodore Flournoy (1854-1920) examinó a la médium Hélène Smith, la historia de vida de la medium, sus experiencias disociativas y alucinatorias en su vida cotidiana, el control de su funcionamiento sensorial y motor, y escribió una detallada descripción de sus declaraciones médiumnicas.
Théodore Flournoy (1854-1920) examinó a la médium Hélène Smith, la historia de vida de la medium, sus experiencias disociativas y alucinatorias en su vida cotidiana, el control de su funcionamiento sensorial y motor, y escribió una detallada descripción de sus declaraciones médiumnicas.

A pesar de estos intentos de evaluación cuantitativa, la mayoría de los estudios con los médiums del pasado es cualitativa. Muchos de estos estudios iniciales no se han repetido ni con el mismo detalle o profundidad ni agudeza hasta el presente. Un ejemplo es el estudio del psicólogo suizo Théodore Flournoy (1854-1920) de la ya mencionada medium Hélène Smith (Flournoy, 1900). Flournoy analizó la historia de vida de la médium, experiencias disociativas y alucinatorias en su vida cotidiana, del control de su funcionamiento sensorial y motor, y de los diferentes automatismos que caracterizaban su mediumnidad, así como una detallada descripción y análisis de sus declaraciones médiumnicas. Los análisis psicológicos detallados de la génesis, manifestación y desarrollo de los fenómenos de Smith aparecen mencionados en la monografía de Flournoy, que hoy en día es uno de los ejemplos más influyentes de la psicología de la mediumnidad de caso único. Otros estudios importantes son aquellos que analizaron las representaciones mentales del médium, y las declaraciones verídicas. algúnos eran análisis de sus producciones literarias (Prince, 1927), pinturas (Deonna, 1932), e impresiones, o sus imágenes mentales (Balfour, 1935).

Muchos estudios de mediumnidad física eran muy ricos, no sólo en la descripción de los fenómenos, sino también en el uso de diferentes tipos de instrumentación. Un ejemplo muy conocido de estos estudios fueron los realizados por William Crookes (1874) con D.D. Home, quien tuvo la habilidad de aplicar una variedad de dispositivos para explorar las propiedades de la "fuerza psíquica" que creía que Home proyectaba de su cuerpo durante estos eventos. Hay una descripción de todas las pruebas destinadas a determinar cuánta fuerza podía producir Home, y si esta fuerza podía operar a través del agua.

Se llevaron a cabo varios estudios instrumentales con balanzas con Kathleen Goligher para pesar las mesas y al médium en los estudios de levitación de mesas.
Se llevaron a cabo varios estudios instrumentales con balanzas con Kathleen Goligher para pesar las mesas y al médium en los estudios de levitación de mesas.

Otro ejemplo de estudios instrumentales era la utilización de balanzas para pesar las mesas y al médium en los estudios de levitación de mesas llevados a cabo por William J. Crawford (1881-1920) con Kathleen Goligher y su familia (Crawford, 1916/1918). Se utilizaron una variedad de ingeniosos aparatos para estudiar la telekinesis (por ejemplo, Grunewald, 1920; Osty & Osty, 1933-1932); otros hicieron hincapié en el uso de la fotografía con diferentes propósitos. algúnos investigadores emplearon fotografias para obtener un registro instrumental de varios fenómenos físicos, como se hizo con la médium Eva C. (Schrenck-Notzing, 1920). Otros usaron placas fotográficas como objetivos, como Ochorowicz (1912) en el caso de la fotografía del pensamiento de la médium Stanislawa Tomczyk.

Otros estudios consistieron de análisis de los materiales publicados. En un estudio interesante, la señora E. Sidgwick (1915) examinó un gran número de observaciones publicadas con la Sra. Piper. Sidgwick describió y analizó a los espíritus control y comunicadores específicos, los diferentes estados de conciencia de la medium, el efecto de los asistentes de las sesiones sobre los fenómenos observados, los comunicadores ficticios, la relación de los espíritus control con la Sra. Piper, y si el médium recordaba o no los acontecimientos pasando de un estado de conciencia a otro.


Se fotografió a la médium Stanislawa Popielska en la oscuridad agarrando un objeto que parecía haber sido desplazado telekinéticamente.
Se fotografió a la médium Stanislawa Popielska en la oscuridad agarrando un objeto que parecía haber sido desplazado telekinéticamente.




ASPECTOS CONCEPTUALES DE LA MEDIUMNIDAD


Supervivencia después de la muerte

Una parte de la motivación por el estudio de los médiums entre los investigadores psíquicos estaba relacionada con el interés en la supervivencia después de la muerte. Los primeros estudios de la SPR con la Sra. Piper, por ejemplo, eran un ejemplo de ello.
Una parte de la motivación por el estudio de los médiums entre los investigadores psíquicos estaba relacionada con el interés en la supervivencia después de la muerte. Los primeros estudios de la SPR con la Sra. Piper, por ejemplo, eran un ejemplo de ello.

Una buena parte de la motivación en el interés por el estudio de los médiums entre los investigadores psíquicos estaba relacionada con el interés en la supervivencia después de la muerte. Los primeros estudios de la SPR con la Sra. Piper, por ejemplo, eran un ejemplo de ello. Otro ejemplo fue el estudio de las famosas correspondencias cruzadas: las comunicaciones de diferentes médiums que utilizan las frases de la literatura clásica pero sólo comprensibles cuando se ponen juntos. En opinión de algúnos investigadores, la correspondencias cruzadas indican la acción de la organización de una conciencia desencarnada (para más información ver Saltmarsh, 1938).

Las opiniones estaban divididas entre si el agente desencarnado o la PES, eran la mejor explicación. Respecto a la señora Piper, Walter Leaf (1852-1927), un estudioso británico de la literatura clásica y banquero estaba a favor de la telepatía; mientras que el filósofo e investigador psíquico James H. Hyslop (1854-1920), defendía la teoría de la intervención de espíritus desencarnados (Hyslop, 1901; Leaf, 1890). Se pueden encontrar diferencias de opinión en muchos otros autores, pero estas dos posiciones han quedado virtualmente empatadas ya que todavía no se ha resuelto siquiera dentro de la comunidad parapsicológica hasta el día de hoy.


El subconsciente mediúmnico

Los fenómenos de la mediumnidad, en particular sus manifestaciones mentales, contribuyeron al desarrollo de ideas acerca de la mente subconsciente. Me centraré aquí solamente en algúnas de estas ideas. Charles Richet (1886) afirmaba que los médiums "cambian sus pensamientos involuntaria e inconscientemente, en los movimientos de la mano... " (p. 86). Los movimientos, dice Richet, demostraban que "fuera del pensamiento consciente normal y regular del medium, existe simultáneamente otro pensamiento casual que sigue sus propios ciclos..." (p. 87).

Para Myers, los espíritus desencarnados pueden utilizar la mente subconsciente del medium para comunicarse, aunque también reconoció la posibilidad de que un espíritu desencarnado tome posesión directa del medium y se refirió a la Sra. Piper como un ejemplo de ello.
Para Myers, los espíritus desencarnados pueden utilizar la mente subconsciente del medium para comunicarse, aunque también reconoció la posibilidad de que un espíritu desencarnado tome posesión directa del medium y se refirió a la Sra. Piper como un ejemplo de ello.

Frederic W.H. Myers (1843-1901), un estudioso británico de la literatura clásica e investigador psíquico inglés creía en la existencia de un subconsciente, o mente subliminal, en relación a la mediumnidad y a otros fenómenos. Myers creía que "algúnos de los efectos que los espiritistas atribuyen a los espíritus pueden ser también atribuibles a la acción inconsciente de la propia mente del medium escribiente" (Myers, 1884, p. 237). Thalbourne llegó a creer que una comprensión de estos fenómenos requería postular la existencia de un ser secundario. El ser secundario, escribió Myers (1885), tenía el dominio de la información telepática. Ampliando su análisis psicológico, Myers sostenía que los automatismos sensoriales y motores podían ser portadores de los mensajes del subconsciente a la mente supraliminal (consciente). En su conocido libro Human Personality and Its Survival of Bodily Death (Personalidad humana y su supervivencia de la muerte corporal) se refirió a la Sra. Piper como un ejemplo en el que los espíritus desencarnados utilizan la mente subconsciente del médium para comunicarse (Myers, 1903, vol. 2, p. 250) aunque reconoció la posibilidad de que un espíritu desencarnado tome posesión directa del médium.

Otros autores que relacionaban el subconsciente con la mediumnidad asumieron que las comunicaciones eran creaciones psicológicas de diferente tipo procedentes de la mente subconsciente del médium. El psiquiatra francés Pierre Janet (1859-1947) declaró que, al igual que la histeria y el sonambulismo hipnótico, la mediumnidad mostraba la "disgregación de la percepción personal y... la formación de varias personalidades que se desarrollan en forma sucesiva y simultánea" (Janet, 1889, p. 389).

El trabajo de Théodore Flournoy con las comunicaciones mediúmnicas de Hélène Smith fue particularmente importante a este respecto (Flournoy, 1900). Desde la perspectiva de Flournoy estos fenómenos eran creaciones subconscientes que no mostraban evidencia algúna de influencia espiritual. Respecto al espíritu control de la médium "Leopold", Flournoy señaló que era un personaje secundario, que actuaba como un "espíritu-guía, dando buenos consejos con respecto a la manera de actuar hacia el médium; de un intérprete complaciente dispuesto a eliminar explicaciones de todo lo que es oscuro; del censor de la moral;... de médicos comprensivos... " (p. 12). El subconsciente del médium, creía Flournoy, era muy maleable y Leopoldo no era "sino una forma favorita de cristalización temporal..." (Flournoy, 1901, p. 121).

Además de la creencia de que sólo la personificación podía explicar algúnas de las comunicaciones mediúmnicas, otros investigadores argumentaron que la personificación podía combinarse con declaraciones verídicas, en particular, actuaciones del médium (ver por ejemplo, Leaf, 1890; Sudre, 1926).


Conclusiones

No cabe duda que los médiums han influenciado en el desarrollo de la investigación psíquica de diversas maneras. Si bien la cuestión del fraude ha obstaculizado los intentos por llevar a cabo una investigación sobre la naturaleza de la mediumnidad honesta, también ha habido una evolución positiva. Los médiums han proporcionado un considerable número de fenómenos mentales y físicos, y por lo tanto han aportado mucho para el estudio de los investigadores. Pero los médiums han sido importantes más allá de su papel de productores de fenómenos. Sus actuaciones e interacciones con los investigadores han dado el contexto para una variedad de metodologías, como las técnicas de control y mediciones instrumentales.

Estas contribuciones pueden extenderse a los desarrollos teóricos como la idea de la supervivencia después la muerte, y el papel de la mente subconsciente en la mediumnidad. La literatura acerca de estos temas apoya la idea de que los médiums han sido agentes importantes en la historia de la investigación psíquica.


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* El autor es Director de Programas Domésticos e Internacionales de la Parapsychology Foundation y Profesor Asistente de Investigación en la División de Estudios Perceptuales de la Universidad de Virginia. Es Editor de la serie Parapsychological Monographs publicada por la Parapsychology Foundation y el Editor Asociado del International Journal of Parapsychology. Su trabajo ha enfatizado estudios con cuestionarios sobre la psicología de las personas que tienen experiencias fuera del cuerpo y las características de estas experiencias, asi como revisiones de la literatura histórica de la parapsicología.



Modelos teóricos
Alejandro Parra
Alejandro Parra*
rapp@fibertel.com.ar

CAPULLOS DE LUZ: LA EXPERIENCIA DE VER EL AURA

Por Alejandro Parra*

Tradicionalmente, la experiencia de ver el aura ha estado relacionada con la percepción de cuerpo etéreo sutil, y como una forma de evaluar el estado de salud de una persona. De acuerdo con las sabidurías esotéricas occidentales, se cree que cada color del aura tiene un significado que indicaría un estado emocional específico. Otros identifican al aura, con un campo electromagnético que rodea a todos los seres vivos y a otros objetos inanimados. Si bien el fenómeno del aura está presente en campos tales como la religión, el ocultismo, y la parapsicología, todavía es controvertido saber si lo humanos podemos ver o no estos campos, quizá como colores, o a simple vista.

Iconografías chinas del aura de sabios confucianos, y otras expresiones en Nepal e India.
Iconografías chinas del aura de sabios confucianos, y otras expresiones en Nepal e India.

Su existencia ha sido reconocida universalmente desde la antigüedad, siendo designada con los más diversos nombres. Así, por ejemplo, los hindúes la llaman prana; los polinesios y hawaianos, mana; los chinos, qi; y los japoneses, ki. Hipócrates la llamaba vis medicatrix naturae, y Galeno, pneuma, y Hermes Trismegisto telesma. El alquimista Robert Fludd se refería a ella como el spiritus, en tanto que los kabbalistas la reconocen como luz astral. Franz Anton Mesmer la llamaba fluído magnético y el psiquiatra Wilhelm Reich, energía orgónica, o más recientemente, como bioenergía. Independientemente de como se la llame, las características que designan todos esos nombres son comunes. En casi todas estas tradiciones, el aura, o una parte de ésta, puede ser controlada y manejada para mejorar la salud y curar a las personas, alcanzar la longevidad y ejercer influencia a distancia.

Caja orgónica creada por W. Reich.
Caja orgónica creada por W. Reich.

Se pueden encontrar antecedentes de la experiencia de ver el aura en una variedad de contextos, tanto en el campo de la hipnosis, en donde el sujeto hipnotizado a veces dice ver un "fluído luminoso en los ojos y rodeando los dedos, la nariz, y las orejas del magnetizador y de las personas que lo rodean" hasta los relatos anecdóticos de varios efectos luminosos en torno a místicos y santos, o la descripción del aura en individuos dotados o psíquicos. Otros autores han relacionado el aura con la cognición paranormal (clarividencia) y los estados emocionales como "emanaciones".

Otras observaciones anecdóticas sugieren que la "lectura del aura" puede ser de importancia para el diagnóstico no convencional, quizá como un vehículo imaginario para la expresión de información adquirida por vía paranormal o información adquirida a través de los sentidos normales. La experiencia de ver el aura también parece estar asociada al desarrollo de la sensibilidad parapsíquica después de una experiencia cercana a la muerte, así como también estar relacionadas con otros eventos paranormales, como percibir apariciones o tener experiencias fuera del cuerpo.

Desde la época de Mesmer, numerosos investigadores han intentado demostrar la existencia de este fluido etéreo o psíquico. Entre 1845 y 1868, el químico alemán Karl von Reichenbach, quien descubrió varias sustancias químicas, como la parafina en 1830 y la creosota en 1833, publicó varios estudios que pretendían demostrar la existencia, en toda la materia y en todos los organismos, de una energía natural al que llamó "fuerza ódica" (del dios Odín), de la cual provendrían la electricidad, el magnetismo y el calor. Como prueba, propuso el testimonio de varios "sensitivos" que, mantenidos en un lugar totalmente a oscuras durante una hora o más, veían destellos flamígeros emanados por los polos de un imán, por cristales y en algúnos casos por los dedos de una mano humana. Asimismo, esas luces iban acompañadas de sensaciones de calor y frío.

El Coronel Albert de Rochas y el doctor Luys iniciaron una serie de experimentos en París, ampliando los trabajos de Reichenbach y utilizando la hipnosis.
El Coronel Albert de Rochas y el doctor Luys iniciaron una serie de experimentos en París, ampliando los trabajos de Reichenbach y utilizando la hipnosis.

En 1891, el Coronel Albert de Rochas y el doctor Luys iniciaron una serie de experimentos en París, ampliando los trabajos de Reichenbach y utilizando la hipnosis. En 1912 el médico inglés Walter Kilner, del St. Thomas Hospital de Londres, publicó los resultados de diversos experimentos. Observando una serie de cuerpos a través de lentes coloreadas descubrió, alrededor de la mayoría de ellas, un borde o aura radiante de unos quince centímetros de ancho. Este aura visible se presentaba en tres capas perfectamente diferenciadas, variando sus características de acuerdo con la edad, el sexo, la aptitud mental y la salud del sujeto. Kilner estimó que este procedimiento resultaría útil para la formulación de diagnósticos.

Kilner podía ver el aura mediante el uso de una pantalla especial que contiene una solución de dicyanin, cuándo ve a través de la pantalla, a la luz del día, por 30 segundos. Ahora se pueden comprar las gafas especiales para ver el aura (aura-gafas) y los filtros de color basados en la idea de Kilner de aumentar la sensibilidad ocular a partes del espectro de luz (www.auragoggles.com). En 1962, el físico Arthur Ellison midió los caracteres de transmisión lumínica de las gafas de Kilner, y descubrió que las gafas sólo cortan casi completamente la luz en medio del espectro visible que normalmente vemos.

En 1921 un investigador francés, Du Bourg de Bozas, presentó pruebas fotográficas demostrativas de que las manos de ciertos sujetos psíquicos emitían un "tubo de fuerza fluídica", capaz de traspasar una lámina de plomo de cinco centímetro de espesor. Otro filósofo francés, Emile Boirac, anestesiaba zonas seleccionadas del cuerpo humano, simplemente señalándolas con una mano. El sujeto, con los ojos vendados, podía describir sensaciones táctiles en cualquier parte de su anatomía, excepto en la señalada por la mano del investigador.

Para C. Leadbeater la verdadera forma de la materia mental y astral que rodea nuestro cuerpo es ovoide.
Para C. Leadbeater la verdadera forma de la materia mental y astral que rodea nuestro cuerpo es ovoide.

Para el clérigo inglés Charles W. Leadbeater, una figura destacada de la Sociedad Teosófica y amigo íntimo de su fundadora, Helena Petrovna Blavatsky (1831-1891), el mundo era un lugar maravillosamente complejo, provisto de muchas más cosas de las que podían apreciarse a simple vista. Alentado por sus propias experiencias psíquicas, Leadbeater creia en el posible acceso de todo el género humano a una realidad coherente, y la amplitud de esta realidad se demostraba por el aura que rodeaba a cualquier persona.

Leadbeater afirmaba que esa aura, emanación del cuerpo astral e indicativa del grado de perfeccionamiento espiritual del individuo, podía ser percibida por cualquier clarividente. El hombre salvaje o tosco poseía un aura débil y de coloración pálida; pero la del hombre y la mujer evolucionados -los buscadores de la suprema verdad- mostraba un color nítido y bello. Estas personas disponían de la aptitud necesaria para canalizar las fuerzas supremas. Poseían una corona de chispas refulgentes, que surgía de la parte superior del cuerpo y les confería gran dignidad. Aquella corona de chispas en ningún momento se separaba de sus personas.


Ver el aura, ¿una forma de canal psi?

algúnos individuos que han demostrado sus habilidades psíquicas en los contextos experimentales también dicen poder ver el aura como parte de su patrón de experiencias psíquicas. También hay casos en la literatura en donde se ha visto colectivamente un "brillo" anómalo alrededor del cuerpo de místicos y gurúes en India y Nepal. La visión del aura también se ha relacionado con la investigación de presuntas radiaciones humanas en la historia de la investigación psíquica, como el estudio de un "fluido mesmérico" y la "fueza ódica", entre otros conceptos de hipótetica fuerza, como un posible agente causal para los fenómenos extrasensoriales y la psicokinesis.

Wilhelm Reich
Wilhelm Reich

Sin embargo, la experiencia de ver el aura no parece estar limitada a médiums, santos o psíquicos, sino que parece ser común en muchas personas de forma espontánea. Un caso interesante de una mujer asociado a una experiencia premonitoria, es el siguiente, del archivo de experiencias paranormales del Instituto de Psicología Paranormal: "Mi vecino me había ayudado mucho en el pos-operatorio de mi mano. Era un hombre muy noble y servicial. Una mañana, nos encontramos y me saludó. En ese momento, ví espontáneamente una luz blanca y fosforescente, una neblina muy suave, como una nube de vapor por delante de él, a la altura de la cabeza. Su cabeza no se veía nítidamente por la leve espesura de la neblina. Tuve una sensación de tristeza infinita. Sentí un profundo pesar, una sensación en el pecho. Ese mismo día, por la tarde, mi vecino tuvo un accidente doméstico fatal. Había muerto por electrocución mientras caminaba descalzo por su casa."

Otra modalidad de aparición ocurre mediante la percepción del aura o una "energía" que rodea el cuerpo de la persona que está por morir, o diferentes tipos de "emanaciones", como luces, niebla, y cuerpos sutiles emerger de los cuerpos de las personas moribundas, como el siguiente relato de un médico: "Me aproximaba a la guardia del hospital cuando el niño dejó de respirar. Entonces vi una bruma por encima de su pequeño cuerpo. Tomó la forma de su cuerpo, que estaba en la cama, y estaba unido a un cordón plateado. Estaba a casi tres pies del cuerpo, en la cama. Surgió gradualmente a cinco pies por encima del cuerpo, entonces la bruma se elevó sobre si misma en posición vertical, y luego desapareció"

En 1895 Hippolyte Baraduc (1850-1909) presentó a la Academia de Medicina una memoria sobre fotografía de pensamientos llamada "imnografía" donde descubrió que, cuando una persona muere, se puede capturar una masa nebulosa y amorfa en la fotografía, que podria ser el espíritu de la persona que desprende del cuerpo físico. En el lecho de muerte de su hijo André, nuevamente afirmó sentir una fuerte descarga observando el mismo efecto, viendo una extraña bruma que lo rodeaba. Posteriormente, tras esta experiencia, consiguió las famosas fotografías en las que se puede ver a su esposa muerta y una neblina a su alrededor.

Reich junto a un grupo de estudiantes.
Reich junto a un grupo de estudiantes.


El aura, ¿Evento paranormal o mera fantasía?

Sin embargo, las ilusiones perceptuales, los efectos de pos-imagen, los efectos de contraste, o los fenómenos entópicos (la percepción de los spot o "emisiones" en la línea de visión para la cual el individuo no tiene una explicación física) también se han presentado como una forma de explicar el efecto del aura.

Las fotografías de Du Bourg de Bozas donde las manos de ciertos sujetos psíquicos emitían un "tubo de fuerza fluídica".
Las fotografías de Du Bourg de Bozas donde las manos de ciertos sujetos psíquicos emitían un "tubo de fuerza fluídica".

Por ejemplo, Ellison argumentaba que el aura que se veía a través de las aura-gafas de Kilner parece ser una pseudo-aura, y sugería que cualquier visión que se produzca no era sino una "dramatización subconciente", de modo que algúna forma de ESP se manifiesta a la mente consciente mediante el uso de las gafas. El psicólogo transpersonal e ingeniero americano Charles Tart sugirió varios tipos posibles de aura. Uno podría referirse al concepto psicológico de "espacio personal" o a un campo de energía que rodean a una persona. Por lo tanto, el aura psíquica podría existir en el espacio que rodea a una persona susceptible de ser percibida por la capacidad extrasensorial. En consecuencia, un aura psíquica puede existir sólo en la mente del observador que la proyecta. En un nivel no consciente, estos "inputs" se transforman en una imagen mental consciente bajo la forma de aura. Las características válidas del aura proyectada dependen de la calidad del "input" de información así como la capacidad del observador para hacer una evaluación objetiva.

Karl von Reichenbach descubrió una energía natural a la que llamó "fuerza ódica".
Karl von Reichenbach descubrió una energía natural a la que llamó "fuerza ódica".

Se han publicado muy pocos estudios serios sobre la experiencia de ver el aura asociada a variables psicológicas. La mayoría de los estudios tratan sobre la fenomenología (forma, tamaño, color) del aura. Por ejemplo, algúnas encuestas de fenómenos psíquicos mostraron la incidencia de esta experiencia en diferentes muestras. Individuos que dicen ver el aura/energía en forma espontánea tienden a tener un nivel elevado de propensidad a la fantasía. Esta hipótesis es coherente con la perspectiva del psicólogo y experto en hipnosis Theodor X. Barber, o incluso más escéptica de la psicologa británica Susan Blackmore, según la cual estas percepciones ocurren en el contexto de una fantasía alucinatoria, que puede ser más lábilmente producida por individuos fantaseadores, particularmente en individuos creyentes en lo paranormal. Durante estos episodios, estos individuos están completamente absortos en la experiencia. Parece haber, de hecho, una asociación entre los rasgos de suceptibilidad hipnótica y la apertura a la experiencia, a causa de que los individuos involucrados en sus propios procesos mentales pueden estar más abiertos a ver aura y tener otras experiencias psíquicas.

Los psicólogos Carlos S. Alvarado y Nancy Zingrone compararon un grupo de 19 individuos en Puerto Rico que tenían experiencias de ver del aura con igual número de los sujetos "control", que no tenían la experiencia, y encontraron que la visión del aura estaba relacionada con la intensidad de tener imágenes visuales vívidas (medido con el Cuestionario Visual de Vividez de Imágenes). El grupo "aura" era más imaginativo y fantasioso, lo cual parece sugerir que la visión del aura podría estar relacionada con la propensidad a la fantasía y los procesos cognitivos que implican imágenes y fantasía visuales.

Aplicaciones de la energía Qi.
Aplicaciones de la energía Qi.

En otro estudio, Parra analicé otra muestra aun mayor de 678 estudiantes de ambos sexos de Buenos Aires mediante una batería de instrumentos psicológicos. Si la experiencia de ver el aura está relativamente distribuida en la población normal (no solamente en personas que tal habilidad), formulé la pregunta de la siguiente manera: "¿Ha tenido la experiencia de ver campos de energía o luces alrededor del cuerpo de una persona? Ochenta y tres estudiantes (12%) respondieron afirmativamente. Según su estudio, estas personas tienen posiblemente mucha más intensa vida imaginativa, pero no necesariamente tan elevada como para constituir una alucinación psicopatológica; quienes ven el aura simplemente podrían ser sensibles a ciertas experiencias perceptuales anómalas. Incluso cuando se compara a estos individuos con quienes no la experimentan, quienes ven el aura tienen mayor capacidad de absorción psicológica, y experimentan también diversas formas parasomáticas, alucinosis táctiles, y sensaciones de energías sutiles. En este estudio, concluí que la propensidad a la fantasía parece ser un factor discriminante entre quienes ven el aura y quienes no.

Los psicólogos americanos Marks y McKellar sugieren que la percepción del aura podría estar asociada a algúna forma de imaginería eidética. De hecho, la psicoterapeuta pakistaní Aktiter Ahsen define esta forma de imaginería como "una imagen visual normal que es experienciada con pronunciada viveza, aunque no necesariamente evocada en el tiempo de la experiencia por una situación actual. La imaginería eidética es vista en el interior de la mente o fuera en el sentido literal de la palabra, acompañada de ciertos eventos somáticos, como también de un sentimiento de significado: la experiencia total en todas sus dimensiones excluye la posibilidad de que sea patológica." El método de imaginería eidética de Ahsen se muestra eficaz para una gran variedad de trastornos, pero destaca su efectividad terapéutica respecto a los problemas psicosomáticos. También considera probable que la imagen eidética es el único suceso psíquico "que es fundamentalmente psicosomático y une mente y cuerpo en un todo singular indiferenciado", lo cual es coherente con el efecto de ver el aura como una experiencia más saludable que disfuncional.

La "imnografía" de Baraduc. Cuando una persona muere, según Baraduc, se puede capturar una masa nebulosa y amorfa en la fotografía.
La "imnografía" de Baraduc. Cuando una persona muere, según Baraduc, se puede capturar una masa nebulosa y amorfa en la fotografía.



Placas fotográficas del efecto corona obtenido mediante el efecto electrofotográfico Kirlian, a menudo son confundidas con fotografías del "aura" humana.
Placas fotográficas del efecto corona obtenido mediante el efecto electrofotográfico Kirlian, a menudo son confundidas con fotografías del "aura" humana.





 
* Doctor en psicología graduado en UCES. Es profesor en psicólogia en la Universidad Abierta Interamericana (UAI) y psicoterapeuta en la práctica privada. Fue editor de la Revista Argentina de Psicología Paranormal. Actualmente es presidente de la Instituto de Psicología Paranormal, Asoc. Civil y coordinador de la Agencia Latinoamericana de Informacion Psi en internet (www.alipsi.com.ar). Es delegado en Argentina de la revista española Más Allá y colaborador de Sexto Sentido. Es autor de Fenómenos paranormales: Una introducción a los eventos sorprendentes (Kier, 2003), Sueños: Como interpretar sus mensajes (Kier, 2006), y El Mundo de los Sueños (Kier, 2009). Ha ganado becas para participar en simposios y congresos de parapsicología en los Estados Unidos y varios países de Europa.



Ensayos
Juan Gimeno
Juan Gimeno
jgimeno54@yahoo.com.ar

MARCELO ACQUISTAPACE: UN DETECTIVE PSíQUICO EN LAS PUERTAS DEL LABORATORIO

Por Juan Gimeno*

Un momento cumbre para la parapsicología latinoamericana se produjo cuando la Revista Argentina de Psicología Paranormal (RAPP) editó un número monográfico dedicado a discutir la propuesta de Carlos Alvarado (1996) de enfocar mayores esfuerzos hacia la investigación, ya fuera con estudios de laboratorio o de casos, en detrimento de las frecuentes tareas históricas, didácticas o conceptuales. En su artículo acentuaba que "lo que define a la ciencia es la investigación que observa al fenómeno empíricamente para aprender algo de éste y para poner a prueba nuestras hipótesis" (p. 224); para más adelante alentarnos: "Muchos de nosotros podemos cambiar el aspecto de la parapsicología si nos convencemos de que podemos llevar a cabo investigaciones. A pesar de limitaciones económicas y de otra índole es posible hacer trabajos. No siempre es necesario tener miles de dólares, pesos o reales para poder hacer investigación. Lo que es necesario es tener ideas, ser críticos y saber cómo implementar la investigación."

Aunque con matices, hubo un saludable consenso de parte de los doce parapsicólogos llamados a opinar sobre el artículo. Alfonso Martínez Taboas remarcó (p. 235): "Esta aseveración de Alvarado me parece cierta y, a la vez, nefasta. Empleo la palabra nefasta, porque una disciplina como la parapsicología, la cual en esencia necesita demostrar la credibilidad de los fenómenos bajo estudio y auscultar el modus operandi de los mismos, no podrá impactar a la comunidad científica con un discurso que no está complementado por la investigación rigurosa de sus parámetros" (Martínez Taboas, 1996). Y José María Feola, con su habitual lenguaje desacartonado, propuso un camino directo: "Lo que necesitamos es un sujeto de efectos físicos, capaz de producir los efectos con regularidad, o un telépata o un clarividente extraordinario, capaz de leerle la mente al Presidente o al Ministro de Defensa y recitarle lo que dijo en una reunión secreta. Entonces, la etapa preliminar es buscar estos sujetos, quienes no tengo dudas existen, aunque en muy baja proporción" (Feola, 1996, p. 242).

El objetivo de este artículo es informar de las actividades llevadas a cabo en concordancia con el espíritu de los textos subrayados. Mi proyecto consistió en profundizar en las vidas de numerosos psíquicos argentinos, que sólo eran citados brevemente en los textos especializados. El propósito manifiesto era publicar sus biografías; pero existía un objetivo latente más importante: llegar hasta los que estuvieran vivos y convencerlos de la importancia de retomar la investigación; y en caso contrario, encontrar algún hilo conductor que me acercara a discípulos o amigos con capacidades parecidas a las suyas. Después de varios años de trabajo, los resultados fueron paradójicos. Pude al menos preparar informes provisorios sobre la vida de una docena de ellos, plasmados en varios artículos (Gimeno, 2007a; Gimeno, 2007b; Gimeno, 2008), un libro de edición privada (Gimeno, 2006) y otro aun inédito (Gimeno, 2009). Sin embargo no fue posible acercarme a ningún psíquico en actividad dispuesto a trabajar; por lo que en lo esencial, este largo recorrido me devolvía al punto de partida, aunque con muchas anécdotas para narrar.


El Taller sobre Psíquicos

La evaluación de todo aquel esfuerzo me hizo volver a colocar la mira en el presente. A principios de 2009 ideé un "Taller sobre Psíquicos Argentinos" (Noticias, 2009), que tendría una modalidad semi presencial, con encuentros espaciados en Buenos Aires y el resto de la tarea para desarrollar a través del correo electrónico o el messenger. La idea era, por un lado preparar herramientas para optimizar las posibilidades de experimentación con psíquicos, y por otro idear estrategias originales que permitieran acercarse a ellos. El taller aún no termina de organizarse por falta de integrantes. Muchos envían una primera consulta entusiasmados, pero el interés se eclipsa pronto; mi experiencia me indica que existen muchos interesados en la parapsicología, pero sólo dispuestos a realizar cursos convencionales; al enterarse que la propuesta prioriza actividades más participativas, como las tareas de campo o la experimentación, la motivación desaparece. En cambio pude al menos establecer algúnos contactos enriquecedores; y también fui sorprendido con el ofrecimiento de colaboración de varias personas que se consideraban psíquicos. Uno de ellos, llamado Marcelo Acquistapace, me permitió iniciar una labor más extensa y prometedora, todavía sin logros formales ni conclusiones definitivas pero que me animó a presentarlo a la comunidad parapsicológica, más aparte de otros informes en revistas de divulgación general (Parra, 2008); de algúna manera como si un modesto músico de pueblo descubriera un instrumento que considera prodigioso, y lo ofreciera a los talentosos para que intentaran arrancarle los mejores sonidos.


El detective psíquico

Acquistapace es uruguayo, vive en Montevideo y actualmente tiene 43 años. Es casado, tiene tres hijos pequeños y ejerce su profesión de publicista en forma independiente; también es artista plástico. Desde los 17 años, después de participar en un espectáculo de hipnotismo teatral como voluntario, comenzó a experimentar situaciones de percepción extrasensorial. Sus primeros éxitos los consiguió al anticipar las preguntas que le harían en los exámenes, tal vez la tarea de mayor motivación para un adolescente. Con el tiempo se especializó en la búsqueda de personas desaparecidas o en la resolución de crímenes, convocado tanto por la policía como por los propios familiares de los damnificados. Incluso trabajó de manera semi oficial en la Comisión de Personas Ausentes del Ministerio de Interior del Uruguay, a cargo del Comisario psicólogo Roberto Parrado. Su método de trabajo combina las clásicas videncias obtenidas a partir de objetos o datos personales del buscado, con la información recibida luego de despertar compulsivamente en medio de la noche, al estilo de la escritura automática de los espiritistas, aunque no pertenezca a esa doctrina.

A partir de 1991 comenzó a ser popular en su país, al revelar el paradero del niño Jonathan Viera, de la ciudad de Salinas, que llevaba tres semanas desaparecido. Al ser consultado por la policía, describió con gran cantidad de detalles la última actividad conocida del niño, aunque no su destino final. Pero a los pocos días despertó percibiendo la imagen de dos grandes tanques de agua de la empresa estatal OSE junto a una laguna, con la particularidad de que la imagen le llegaba invertida respecto del eje vertical; además sintió una congoja particular, que le indicaba que el niño estaba muerto. La policía relacionó sus dichos con la Laguna del Cisne, un lugar cercano a la desaparición; y a pesar de haber dragado con anterioridad sin resultados, volvió al lugar y encontró el cadáver semienterrado cabeza abajo en una de las márgenes, como si la visión nocturna hubiese coincidido con la perspectiva final del fallecido (ver http://acquistapace.blogspot.com/2009/10/mi-primer-caso-oficial-jonathan.html).

Una primera diferencia entre Acquistapace y los demás psíquicos que he investigado, es que su profesión le permitió organizar un blog en donde pueden encontrarse páginas de diarios, esquemas, videos, fotografías y todo tipo de material, que sirve de evidencia en cada caso que intervino. En cualquier investigación que remita a más de dos décadas, uno puede festejar la aparición de un recorte de diario que haya guardado accidentalmente el familiar de un psíquico; en cambio hoy el desafío es inverso: la información está delante nuestro, abrumadora y contradictoria, y la tarea será poder separar la relevante de la intrascendente o equívoca.

A la izquierda, dibujo realizado por Marcelo Acquistapace con la figura de un canguro; según él relacionado con la aparición de María Victoria Williams. A la derecha, foto del transeúnte que encontró su cadáver, con un dibujo casi idéntico en su gorro.
Figura 1: A la izquierda, dibujo realizado por Marcelo Acquistapace con la figura de un canguro; según él relacionado con la aparición de María Victoria Williams. A la derecha, foto del transeúnte que encontró su cadáver, con un dibujo casi idéntico en su gorro.

Por supuesto que Acquistapace conserva en sus archivos gran cantidad de casos sin resolver, ya sea porque la información obtenida es inconducente, o porque obligaría a diligencias y peritajes que la policía no está dispuesta a realizar. El caso paradigmático para poder observar su manera de actuar es el de María Victoria Williams, una joven que desapareció una mañana de febrero de 1993 mientras recorría el breve trayecto entre su casa, en la ciudad de Carrasco, y la parada del ómnibus que debía llevarla hasta su trabajo. Dos días después, Acquistapace recorrió ese mismo camino y luego subió a su auto para concentrarse: "Comencé dibujando una cara de una persona de unos cincuenta años, con una frente prominente, ojos pequeños, medio calva. Inmediatamente me vino la imagen de un canguro, no era un animal en sí, sino una silueta como si fuera un símbolo o un dibujo del mismo. Casi en forma simultánea una sensación de angustia y soledad invadió mi cuerpo (es la imagen y olor de la muerte), y una frondosa acacia y un entorno boscoso con una alfombra de hojas amarillas ilustraban estática esa extraña sensación. Intenté posicionarme desde la altura para descifrar la ubicación de esa imagen y percibí una zona, cercana al Arroyo Carrasco, pero del lado de Canelones bastante cercana a la costa del Río de la Plata.

Luego de ubicar junto con la policía la zona, que ya había sido rastrillada sin novedad, se acostó en un lugar y dijo sobre la desaparecida:- "La veo tirada así de esta manera y bajo esta acacia" (ver http://acquiestapac.blogspot.com). Dos días después María apareció asesinada en ese lugar, encontrada accidentalmente por un transeúnte, con la particularidad de que apareció su foto en los diarios mientras hacía declaraciones, con una gorra de visera con la publicidad de Kangaroos, una empresa de calzado británica que incluye en su logo la silueta de un canguro, idéntica a la realizada por Acquistapace (ver figura 1). Por último, la policía se sorprendió al descubrir en el cesto de residuos de la víctima el dibujo de una cara muy similar a la trazada por Acquistapace, aunque no se pudo relacionar con ninguna circunstancia ligada al crimen.

La manera de operar de Acquistapace coincide con el de muchos otros psíquicos considerados auténticos, que aúnan aciertos extraordinarios que no siempre son relevantes para la resolución del caso, con errores considerados decepcionantes por quien no está habituado a la forma de manifestación de la percepción extrasensorial. Si bien no pretendo realizar una tarea comparativa, surge inevitable el recuerdo de Gérard Croiset, por ejemplo en el caso de un niño desaparecido en febrero de 1951: "Veo claramente al niño -dijo al ser consultado por la policía-. Veo un cuartel y un campo de tiro. Hay hierba alrededor. En la hierba hay una pequeña colina. Veo también agua en ese lugar. El niño cayó al agua y se ahogó. Allí se encuentra actualmente. Su cuerpo será hallado por un hombre en un barco pequeño. Ese hombre lleva una gorra con una cinta de color. Yendo de Enschede a Utrecht, está a la izquierda de la carretera" (Pollack, 1980, pp. 93-94). Diez días después el cuerpo fue encontrado donde decía, por un encargado de la limpieza del canal de agua, que llevaba una gorra con una cinta de color.


El caso Luna y la visión remota

Consultando a Acquistapace sobre casos que no hubiesen sido cubiertos por los medios de comunicación, tuve acceso a uno elegante de visión remota. El 13 de agosto de 2008 Acquistapace estaba chateando con su amigo Leo, que vive en la ciudad de Rivera, 500 Km. al norte de Montevideo, a donde había realizado una corta visita dos años antes. En la conversación textual a través del programa messenger que me envió puede leerse que, luego de algúnos saludos y bromas informales, Leo le cuenta que la noche anterior le habían robado su perra Luna, lo que constituía un pequeño drama familiar. A los pocos segundos, sin que se lo pidiera expresamente, Acquistapace comenzó a describir el lugar donde visualizaba al animal: "Está en una parte más alta que tu casa, como al final de la calle, tierra colorada, si mirás al sur desde la puerta de tu casa como a la derecha, como si terminara la calle ahí pero más abajo sigue. La perra la tiene atada, cerca hay una antena de comunicaciones. Está cerca de tu casa, a unos seiscientos metros" (Comunicación personal via Messenger, Agosto 13, 2008).

Mapa aéreo obtenido mediante Google Earth, donde pueden confirmarse los datos aportados para llegar hasta el lugar donde se encontraba Luna.
Figura 2: Mapa aéreo obtenido mediante Google Earth, donde pueden confirmarse los datos aportados para llegar hasta el lugar donde se encontraba Luna.

Marcelo me cedió gentilmente el correo electrónico de su amigo, quien confirmó la comunicación. Agregó que con esos datos, al día siguiente pudo volver con Luna a su casa, para alegría de todos. Me confirmó que la perra la encontró atada, y que todos los datos topográficos entregados por su amigo eran ciertos. La distancia entre su casa y el lugar donde estaba Luna pudo medirla mediante el programa Google Earth, y era de 555 m. Me confirmó que la casa estaba en un sitio elevado, y en la misma manzana donde acababan de levantar una torre de telefonía celular; el resto de los detalles pueden compararse con el mapa aéreo adjunto (ver figura 2).

Acquistapace también pudo visualizar otros datos complementarios sobre el lugar ("hay un almacén cerca [...] de noche se escuchan tambores [...] en el frente hay elementos como que fueran una bañera antigua y barriles o cosas color azul") y sobre la identidad del ladrón ("de unos treinta años, morochón, poco pelo, trabaja en una panadería, pasa muy temprano frente a tu casa, pasa en una bicicleta verde con un bolso colgado atravesado, [...] nombre corto de origen portugués, [...] tiene un nene chiquito y su mujer trabaja de ayudante en una panadería o similar"). A pesar de mi insistencia Leo no me pudo certificar esos datos ni mostró voluntad de colaborar para conseguirlos. Sólo me dijo: "Me limité a tomar la información que para mí era de más relevancia, si bien la persona que trataba de ocultar mi perra podía encajar con la descripción en cuanto a los rasgos físicos". Era evidente que el principal objetivo era el de encontrar la perra sana y salva, y ya estaba cumplido. Fue inútil explicarle que con muy poco esfuerzo podría certificar una serie de datos de gran valor. Su respuesta final fue invitarme a visitar su ciudad cuando quisiera. Así que debí suspender la investigación, con la desventaja de que los indicios se irían diluyendo con el correr del tiempo.

Figura 3: Uno de los elementos utilizados durante la experiencia de visión remota, mientras el psíquico declaraba: "Agarra una hoja; es un roble. Hay más hojas amarillas, no tienen mucho olor o tenés mal olfato."
Figura 3: Uno de los elementos utilizados durante la experiencia de visión remota, mientras el psíquico declaraba: "Agarra una hoja; es un roble. Hay más hojas amarillas, no tienen mucho olor o tenés mal olfato."

El caso Luna me instó a proponerle un ensayo controlado de visión remota. Mis dudas basadas en la resistencia clásica de los psíquicos a participar de este tipo de experiencias desaparecieron de inmediato, ya que mi invitación fue aceptada con entusiasmo. Pronto acordamos realizar una prueba piloto. A los pocos días, estuve durante media hora en un lugar de la ciudad, sacando fotos y grabando en audio todo lo que ocurría, mientras Marcelo en su casa anotaba sus videncias y se filmaba. Por la noche estaba recibiendo un correo con el resultado, y debo confesar que a pesar de la precariedad del ensayo, quedé sorprendido.

La idea general del lugar parecía ser correcta. Mi ubicación había sido sobre un viejo puente que cruzaba un río, de manera que delante veía el agua y la vegetación de la orilla, mientras que detrás quedaban todas las construcciones y el ruido de la ciudad. El texto de Marcelo decía al respecto: "Está entre el verde pasto y material gris. Se aproxima a un espejo de agua. Un espacio bien grande con avenidas donde conjugan áreas verdes y movimiento vehicular". Pero lo más interesante fueron los detalles. Habíamos decidido trabajar con la mayor cantidad de percepciones posibles, así que antes de llegar compré unos caramelos de menta para degustar durante la experiencia. Al llegar me acodé sobre la baranda de cemento áspera y estuve buena parte del tiempo tocándola con la yema de mis dedos. Me quedé allí todo el tiempo, ya que no podía cruzar al otro lado porque el puente estaba en reparación y se interponía una gigantesca chapa a modo de pared. Me quedé observando y fotografiando las aves y algúnos objetos que arrojaban los operarios, que producían las clásicas ondas concéntricas al tocar el agua. A todo esto Marcelo escribía: "Tocás el granito, es frío y rugoso. Hay menta en tu boca. Mira el cielo; ve un ave pasar. Está cerrado y hay una chapa con un nombre y una esfinge".

Mezclada con esta información había otras incorrectas, o que no mencioné en mi desgrabación y después relacioné tardíamente al leer sus declaraciones. Quiero mencionar un último detalle que me parece de una gran riqueza a la hora de analizar el valor didáctico de los errores en percepción extrasensorial. Al ir hacia mi objetivo, levanté del suelo una hoja de publicidad, entre las muchas iguales que había tiradas, que me pareció interesante y rara. Se trataba del dibujo de una mano amarilla muy estilizada, que guardé en el bolsillo para observar y fotografiar al llegar. Poco después, Marcelo decía: "Agarra una hoja; es un roble. Hay más hojas amarillas, no tienen mucho olor o tenés mal olfato" (ver figura 3).

A pesar de no contar con jueces para la evaluación, consideré el resultado auspicioso, y me animé a organizar un verdadero experimento de visión remota. Para ello coordiné un equipo de trabajo, con encargados de elegir y administrar los objetivos, recibir las declaraciones de sujeto y agente y completar la evaluación, siempre garantizando la ausencia de filtración sensorial y la condición de doble ciego. Se visitaron ocho lugares de la Ciudad de Buenos Aires, una vez por semana, los días martes entre las 15 y las 15:15hs. Tres jueces debieron confrontar los datos de los lugares visitados contra cada una de las declaraciones de Marcelo, utilizando rangos de 1 (uno) para el más parecido, hasta 8 (ocho) para el menos parecido. La evaluación estadística se hizo de acuerdo a la fórmula conocida como Pratt-Birge (Pratt & Birge, 1948). Los resultados aún no fueron publicados, pero puedo adelantar que la probabilidad de acierto estuvo dentro de lo esperable por azar. De todas maneras, hubo un detalle interesante: si bien siete de las declaraciones hechas por Marcelo abundaban en detalles difíciles de asociar con el objetivo, en un caso, que fue el objetivo visitado en tercer término, los niveles de acierto fueron similares a los obtenidos conmigo en la prueba preliminar, tanto que los tres jueces puntuaron ese objetivo en el primer lugar, entre los ocho a elegir.


Los ensayos de clarividencia y telepatía

El viaje a Uruguay de un amigo común, el psicólogo Carlos Scardulla, me tentó para organizar otra experiencia, con las limitaciones del caso. Visité a Scardulla unos días antes de su viaje y lo entusiasmé para que administrara una prueba de clarividencia. Le entregué cuatro sobres que contenían cada uno una fotografía de un cuadro, tabicada con dos cartulinas negras para evitar la transparencia. Antes de elegir los objetivos había convencido a Marcelo de intentar la prueba y lo había instruido de cómo comportarse. A su regreso, Scardulla me devolvió los sobres utilizados y una filmación de todo el ensayo, que se había realizado luego de una cena en la que participaron otros amigos y familiares. Allí se puede ver claramente cómo trabaja Marcelo, tomando el sobre, palpándolo suavemente con la yema de sus dedos y luego cerrando los ojos y frotándolo contra su pecho, antes de comenzar a verbalizar y dibujar lo que le parecía que contenía cada sobre (ver http://acquistapace.blogspot.com/2009/12/experiencias-con-reproducciones-de-arte.html).


Figura 4: A la izquierda, cuadro utilizado como objetivo en la experiencia de clarividencia. A la derecha, dibujo realizado por el psíquico.

Yo ya había recibido un informe preliminar por correo electrónico y estaba muy contento con el resultado. Sin embargo, al vernos con Scardulla me recibió preocupado y me dijo: "Mirá Juan, yo creo que hubo aciertos, pero a mí me parece que hay algo que no entiendo. No sé si vos lo podrás explicar". Marcelo empleó no más de diez minutos para completar el trabajo con los cuatro objetivos. Inmediatamente después se abrieron los sobres y se realizó una evaluación informal en la que participaron todos los presentes. Puede verse en la filmación la incertidumbre general, ya que si bien cada objetivo podía aparearse cómodamente con una de las respuestas, el orden resultaba equivocado. Lo que había ocurrido era que la percepción extrasensorial posiblemente hubiese funcionado, aunque a costa de una travesura desconcertante para los neófitos: las respuestas se habían ido adelantando a los objetivos, de manera que la respuesta 1 coincidía con el objetivo 2, la respuesta 2 con el objetivo 3 y así sucesivamente. Técnicamente se había producido un efecto de desplazamiento (-1), tal vez similar al que lo había llevado hasta el lugar donde creía que se encontraba el cadáver de María Victoria William, el que apareció dos días después.

Para confirmar estas presunciones que surgían a primera vista, realicé una evaluación cuantitativa. Cinco jueces debieron puntuar la semejanza de cada respuesta, teniendo delante el objetivo mezclado con otros cuatro señuelos. En la primera parte, en la se respetó la correspondencia original de respuestas y objetivos, el resultado estuvo de acuerdo a lo esperado por azar. En cambio, cuando se adelantaron las respuestas respecto de los objetivos, el valor de probabilidad obtenido por otros cinco jueces fue de p = 0,036. Estos últimos valores se justifican al observar sobre todo la respuesta de Marcelo para el objetivo 3, donde dibujó el esquema de una mujer con los mismos detalles que la que contenía el sobre (ver figura 4); y la respuesta final, que fue más asombrosa aún: luego de tomar el sobre en sus manos, comenzó diciendo: "¿Cómo se escribe Van Gogh?", para luego dibujar un esquema muy similar al cuadro Trigal con Cuervos del pintor holandés Vincent Van Gogh, que era precisamente el objetivo, y escribir las palabras aclaratorias: "Cuervos-color-maizal-árboles" (ver figura 5).


Trigal con Cuervos, pintura del pintor holandés Vincent Van Gogh, junto al dibujo que realizó el psíquico, mientras preguntaba: ¿Cómo se escribe Van Gogh?
Figura 5: Trigal con Cuervos, pintura del pintor holandés Vincent Van Gogh, junto al dibujo que realizó el psíquico, mientras preguntaba: ¿Cómo se escribe Van Gogh?



Del otro lado del río

El resultado de la experiencia con los cuatro cuadros aceleró mi visita a Montevideo. Cuando llegué a casa de Marcelo nos abrazamos como viejos amigos, a pesar de que era la primera vez que estábamos frente a frente. Vive a media hora del centro de la ciudad, en un barrio de clase media tranquilo. Su casa es amplia y luminosa aunque no está terminada todavía. La crisis económica del año 2001 lo obligó a cerrar una pequeña empresa de publicidad y hacerse cargo de los juicios laborales de sus empleados. A esto se suma su modalidad irrestricta de no cobrar por sus servicios de detective psíquico, que le quitan tiempo para otras actividades lucrativas. Al visitar su atelier, en el primer piso, pude ver yuxtapuestos sus cuadros a medio terminar con infinidad de elementos (ropas, algúnas ensangrentadas, mechones de cabellos, fotografías) utilizadas para sus búsquedas. Lo más llamativo era la cantidad de carpetas con recortes de diarios, anotaciones, dibujos y fragmentos de programas de radio y televisión en los que se habían difundido sus casos.

Sin embargo, los casos que más me llamaron la atención fueron dos ocurridos en la intimidad, sin cámaras ni periodistas, aunque con testigos. El primero se desarrolló durante una reunión en su casa, con motivo del regreso de sus padres de un viaje de placer por Europa. Durante toda la noche varios hermanos y sobrinos habían intentado abrir un candado de combinación de cuatro dígitos, que su padre había encontrado en la Plaza San Marcos de Venecia, y que durante el resto del viaje había intentado en vano revelar la combinación. Cuando todos se habían rendido, Marcelo pidió que le dieran una oportunidad: "Tomé el candado entre mis manos, cerré los ojos e intenté dejar la mente en blanco (...). De pronto visualizo un hombre cercano a los cincuenta y pocos años, me da la sensación que es un francés, pelado, con bigotes, lentes gruesos y una boina cuadriculada; un turista más, pero esa imagen me venía relacionada a su edad o año de nacimiento. Así que inmediatamente calculé, estando en el 2005, su fecha aproximada de nacimiento sería de 1950 en adelante; así que probé delante de todos, que me miraban con cierto recelo (...) Mil novecientos cincuenta... nada. Mil novecientos cincuenta y uno... nada. Mil novecientos cincuenta y dos... nada. Mil novecientos cincuenta y tres... clic!!! Había logrado abrirlo en tres intentos, no estaba nada mal" (ver http://acquistapace.blogspot.com/2009/12/el-candado-de-combinacionsimple-y.html).

El segundo caso no estaba ni siquiera escrito, y era imposible de aceptar a priori. En marzo de 2003 el matrimonio Acquistapace había decidido pasar un día de playa junto con sus hijos, hermanos y varios sobrinos adolescentes. Al llegar al mar, Marcelo se acostó en la arena a dormir, mientras el resto se internaba en el agua revuelta por un oleaje intenso. Al rato lo despiertan unos gritos, y al incorporarse observa a su esposa Adriana llorando porque había perdido un diente postizo, mientras los demás, con el agua hasta la cintura y sin posibilidades de ver el fondo, se zambullían tratando de rescatarlo. Parecía una tarea imposible; sin embargo Marcelo se atrevió a intentarlo: "Entré al agua, me calmé, cerré los ojos y me dejé guiar por mis instintos. De pronto visualizo una pequeña luz roja, como latiendo, y sin abrir los ojos me sumerjo hacia la luz e intento agarrarla con la mano. Atrapo un montón de arena y salgo a la superficie. Comienzo lentamente a abrir los dedos descartando lo inservible, hasta que comencé a sonreír: ¡tenía el diente en la palma de la mano!".

La segunda tarde que nos vimos era para mí la fundamental. Habíamos acordado destinarla a las experiencias prácticas, ya que no estaban los niños en la casa. Llevé dos carpetas con cuatro sobres en cada una, similares a los administrados por Carlos Scardulla. La idea era repetir aquella experiencia; primero de manera idéntica, tratando de que percibiera el contenido por clarividencia; y después actuando un emisor, en ese caso mi esposa, observando las láminas desde otra habitación. Al llegar encontré a Marcelo desmejorado. Me dijo que se sentía engripado y que aún no había probado el almuerzo. Le ofrecí postergar los ensayos pero no aceptó. Así que comenzamos a trabajar, pero la expectativa de semanas se diluyó en pocos minutos. Las dos experiencias resultaron negativas. A tal punto que se negó a completar las evaluaciones al observar que ninguna de las cuatro imágenes presentadas, el objetivo y sus tres señuelos, tenía ningún parecido ostensible con lo que él había dibujado (después en Buenos Aires, otros tres jueces confirmaron la ausencia de cualquier resultado anómalo).

La última tarde debía acompañarlo hasta el escenario de un crimen. La familia de una mujer asesinada le había pedido que visitara el lugar de la tragedia para ver si podía encontrar indicios que dinamizaran la causa. Pero cuando estábamos a mitad de camino, recibió una llamada en la que le decían que el juez no había autorizado su visita, por lo que tuvimos que regresar con una nueva decepción. Quise cambiar el clima y bromeé, al recordar el artículo de Carlos Alvarado ya citado, con que se trataba de una conjura de las fuerzas de la historia en contra de cualquier forma de experimentación, que sólo nos permitía recordar sucesos vetustos. Pero la ocurrencia no surtió el efecto esperado, ya que para Marcelo aquella era la jornada fundamental: quería que lo viera actuar como detective psíquico, en el rol que más seguro se sentía.

Terminamos todos en su casa, donde finalmente conocí a Adriana. Esa noche, cuando los niños se fueron a dormir, los dos matrimonios pudimos conversar a gusto y recordar viejas anécdotas. Durante la mañana previa le había pedido a mi esposa que intentara mencionar delante de Adriana la anécdota del diente perdido en el mar. Así lo hizo, y dio lugar a que la beneficiada directa contara su versión con todo tipo de detalles, que no difirió en absoluto de la escuchada el día anterior.

La conversación iba y venía sin un orden, hasta que en un momento se estableció un tema que me pareció destacable. Aquellos primeros aciertos de Marcelo durante su adolescencia, que le habían permitido conocer anticipadamente las preguntas de un examen escolar, los repetía cada tanto con otros miembros de su círculo, que lo consultaban reiteradamente. Creo haber escuchado cinco o seis casos de este tipo bastante interesantes, todos con alumnos de la carrera de medicina. El que decido contar aquí no es el más ampuloso, pero sí el de mejores posibilidades de ser documentado. El 24 de julio de 2009 Mariángel debía rendir un examen parcial de Anatomía Patológica, y unos días antes solicitó los "servicios" de su tío preferido. Luego de aprobar el examen lo llamó para agradecerle, y Marcelo le pidió que le enviara un mail relatando lo sucedido para guardarlo como evidencia, que es el que ahora tengo delante de mí. La prueba consistía en elegir al azar un microscopio de los que estaban en el aula, observar el preparado y decir de qué se trataba. Mariángel detalla en el mail: "Tus palabras fueron "glándulas" y "benigno" cuando te pregunté qué tema podía tocarme. Cuando me senté enfrente al microscopio no lo podía creer, había un adenoma folicular de tiroides, esto es un tumor benigno de esta glándula, o sea que se cumplió tal cual lo que me dijiste!! Me dio hasta miedo responder que era eso".

Marcelo Acquistapace, por detrás, una de sus obras

Reflexiones Finales

En la actualidad estoy participando de un experimento para replicar otro realizado en 1951 por el médico argentino Orlando Canavesio, quien logró identificar un trazado particular en los electroencefalogramas de psíquicos en actividad, titulándolo "estado metapsíquico" (Canavesio, 1951). En nuestro caso se está registrando la actividad cerebral de Marcelo mientras desarrolla prácticas de psicometría. El experimento se está realizando en una clínica de Buenos Aires, cedida gentilmente por sus dueños, y aún se está en la etapa inicial, de modo que no puedo informar más al respecto. Además estoy a la espera del "caso perfecto". Con esto me refiero a estar preparado para aprovechar la oportunidad de poder acompañar a Marcelo en una de sus incursiones como detective psíquico, para recolectar las evidencias necesarias en el campo, que sean suficientes como para tener un grado alto de certeza sobre sus habilidades.

Este informe no pretende la exposición de grandes conclusiones. Sólo mostrar un estado general de la situación, aprovechando para destacar las limitaciones y las posibilidades del trabajo con psíquicos. En buena medida confirmé las previsiones de Carlos Alvarado, en el sentido de que es posible investigar aún sin dinero, cuando el entusiasmo es lo que abunda. Fue posible completar un experimento de visión remota aún inédito, también realizar otros ensayos exploratorios con suerte diversa, y acercarme a los casos de búsqueda de personas; quedando para más adelante completar muchos de ellos con visitas a los lugares, entrevistas a los testigos y participantes, y la realización de peritajes particulares.

Una de las novedades metodológicas más auspiciosas, aunque para muchos jóvenes parezca una obviedad, es el impulso que recibe cualquier investigación con el uso de Internet y de los sistemas de digitalización de archivos. El experimento de visión remota se realizó prácticamente en tiempo real, con el envío no sólo de textos sino también de imágenes, filmaciones y archivos de audio, a pesar de la distancia que separaba a los participantes. Recuerdo las peripecias que me relatara uno de los organizadores de otro experimento a distancia, realizado en el país hace menos de cuatro décadas, entre las ciudades de Buenos Aires y Córdoba, separadas por setecientos kilómetros. Se trataba de un experimento de telepatía con cartas Zener como objetivos (Di Liscia, 1974), enviándose los resultados de cada jornada por correo terrestre que demoraba varios días en llegar, si es que llegaba... También la Web se convierte en una aliada inestimable a la hora de ubicar y entrevistar testigos, y hasta de reconocer lugares, como quedó evidenciado en el caso Luna; aunque creo que en parapsicología, donde se trata con denuncias tan aberrantes, es necesario completar cualquier indagación a distancia con visitas personales que alejen hasta las más improbables suspicacias. Otra ventaja es la de poder ver en acción a los psíquicos, observar sus movimientos y sus pequeños rituales; datos estos que quedarán registrados para siempre, y tal vez en el futuro algún investigador pueda terminar de desentrañar sus misterios apelando a esas filmaciones. Cuánto daríamos por ver, aunque fuera unos pocos segundos, a Eusapia Paladino o a Daniel Home en acción, como ahora podemos hacerlo durante horas con Marcelo tratando de adivinar el contenido de sobres o trabajando en el experimento de visión remota.

Las consecuencias más interesantes de este año cerca de Marcelo fueron confirmar a través de la experiencia personal, los problemas y posibilidades que se presentan en la investigación con psíquicos, ya conocidas a través de los textos clásicos. Una de las principales dificultades consiste en lo que podría denominarse "la construcción del caso". El primer relato al que se accede pertenece al mismo protagonista, generalmente complementado por algúno de los testigos. La clave radica en abreviar, ya que es imposible reducir a cero, la distancia existente entre el discurso y lo realmente ocurrido. Esa distancia comienza a ampliarse con la negación de pequeños detalles, la magnificación de otros no tan importantes, y por último con el relleno arbitrario de las zonas oscuras. De manera que, muchas veces de una manera inconsciente, un caso que podría explicarse por una combinación de factores habituales, se transforma en un gran caso sólo explicable a través de psi. Aquí es donde debe hacerse presente la sagacidad del investigador, para ejercitar su pensamiento crítico hasta las últimas consecuencias. De todas maneras, hasta donde me fue posible llegar, no pude observar esta distancia excesiva en los casos en los que intervino Marcelo. Sólo podría reclamársele que en su blog incluya también otros casos en los que no pudo conseguir resultados, pero todos conocemos la máxima judicial que asegura que nadie está obligado a declarar en su contra; esa tarea debe quedar en manos de la parapsicología, que ya aprendió a no dejar sin publicar ningún experimento más allá de los resultados obtenidos.

Otra de las inquietudes surgidas, también muy poco original, es preguntarse cómo conseguir mejorar la eficiencia de un psíquico. Trazando una línea continua entre un fenómeno espontáneo y otro deliberado, el psíquico será aquel que esté más cerca de este último, pero nunca en ese extremo de manera permanente. Siempre se trata de relámpagos en mitad de la noche, más o menos extensos, más o menos demorados, interrumpidos la mayoría de las veces por causas desconocidas. El problema se incrementa cuando se decide introducir al psíquico en el laboratorio. Creo que la solución debe buscarse, no tanto "educando" al psíquico para que pueda trabajar en un ambiente impoluto, sino que, por el contrario, abriendo las puertas del laboratorio, cargando con métodos e instrumentos a cuestas y encontrando el modo de trabajar junto a él sin incomodarlo; de algúna manera como esos ornitólogos, que en lugar de enjaular al ave se trepan a los árboles con sus cámaras y esperan camuflados a que aparezca. Me alienta recomendar esta estrategia por los excelentes resultados obtenidos en un experimento con objetivo humano reciente, realizado con mediums espiritistas, en el mismo recinto de su sociedad y durante el transcurso de sus sesiones mediúmnicas ordinarias (Gimeno, Corbetta, & Savall, 2009).

Por último, pude confirmar a medias las previsiones de Feola, en el sentido de que existen, aunque en muy baja proporción, y pueden encontrarse, sujetos con capacidades extraordinarias. Quién conozca la historia de la parapsicología podrá esperanzarse con que Acquistapace puede estar en ese camino, siempre y cuando sea posible optimizar sus recursos y acotar sus limitaciones. Como sucede con aquellos buscadores de diamantes, que expresan su alegría al descubrir una piedra que ningún improvisado festejaría, porque sólo ellos saben cómo llegará a brillar a poco de eliminar la escoria y pulir su superficie. Será cuestión de utilizar, o de diseñar si fuera necesario, las herramientas apropiadas.


Referencias

Alvarado, C. (1996). Hacia una parapsicología científica en América Latina. Revista Argentina de Psicología Paranormal, 7, 223-233.

Canavesio, O. (1951). Electroencefalografía en los estados metapsíquicos. Tesis de doctorado. Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Córdoba. [Biblioteca UCN # 9052].

Di Liscia, J.C. (1974). El efecto de retroalimentación en experimentos de ESP. Cuadernos de Parapsicología, 7, 10-15.

Feola, J.M. (1996). La parapsicología en América Latina. Revista Argentina de Psicología Paranormal, 7.

Gimeno, J. (2006) Augusto Frin, pionero de Domínico. Edición del Autor: Buenos Aires.

Gimeno, J. (2007a). Enrique Marchesini: Un clarividente diplomado. E-Boletín Psi, 2(2).

Gimeno, J. (2007b). Valentín Armando King, Radiestesista del Estado. E-Boletin Psi, 2(3).

Gimeno, J. (2008). Mischa Cotlar, un hombre desmesurado. Comunicaciones de Parapsicología, 18, 5-27.

Gimeno, J. (2009). Vidas Asombrosas. Inédito.

Gimeno, J. Corbetta, J. y Savall, F. (2009). Transferencia anómala de información: Evaluación de un grupo de mediums espíritas. E-Boletín Psi, 4(3).

Martínez Taboas, A. (1996). La Parapsicología en América Latina. Revista Argentina de Psicología Paranormal, 7.

Noticias (2009). Taller sobre Psíquicos Argentinos. E-Boletín Psi, 4(1), Enero 2009.

Parra, A. (2010). Las experiencias psíquicas del vidente Marcelo Acquistapace. Más Allá, 21(251), 90-93.

Pollack, J.H. (1980). La clarividencia probada. Bilbao: Mensajero.

Pratt, J.G. & Birge, W.R. (1948). Appraising verbal test material in parapsychology. Journal of Parapsychology, 12, 236-256.


 
* Investigador en parapsicología y miembro del Instituto de Psicología Paranormal. Actualmente es parte del equipo de investigación "El Espiritismo en la Voz de los Espiritistas" coordinado por el Museo Roca -Instituto de Investigaciones Históricas y el IPP. También se ocupa del Área de Investigación Histórica del IPP. Ha escrito numerosos artículos en la Revista Argentina de Psicología Paranormal y Cuadernos de Parapsicología. Sus áreas de interés son la historia de la parapsicología, investigación de la supervivencia, y los efectos físicos de la mediumnidad. Actualmente está llevando a cabo un estudio biográfico de psíquicos y médiums argentinos, entre ellos Osvaldo Fidanza, Augusto Frin, Enrique Marchesini, y Benjamín Solari Parravicini. Recientemente publicó Augusto Frin: Pionero de Domínico.

Debate

¿PODEMOS TOMAR UNA FOTOGRAFIA AL "GATO NEGRO"?: EN BUSCA DE PSI MEDIANTE NEUROIMAGENES

En un reciente numero del Journal of Cognitive Neuroscience (20:1, 2008), una de las revistas científicas más influyentes para los lectores en el campo creciente de las neurociencias, dos autores de la prestigiosa Universidad de Harvard, Samuel T. Moulton y Stephen M. Kosslyn, publicaron un artículo cuyas conclusiones señalaban la ausencia de un efecto como una evidencia de su no existencia. Específicamente, el experimento intentaba observar algún cambio en las imágenes de un cerebro vivo empleando tecnología de alta complejidad, en este caso, la resonancia magnetica nuclear, con el objeto de obtener una evidencia "fisica" del fenómeno psi. Los objetivos de los autores no se cumplieron, en otras palabras, no hubo una diferencia significativa entre los cerebros de individuos "emisores" en comparación con un grupo "control". Sus resultados produjeron no solo un debate interno en la comunidad parapsicológica, sino también ganó una repercusión en publicaciones de divulgación científica y en muchos científicos neófitos en parapsicología (yo mismo fui entrevistado en Argentina en un par de ocasiones sobre este asunto) a causa del impacto que produjo, no solo sus resultados negativos, sino específicamente la conclusión de sus autores.

La metáfora del "gato negro" surge de una expresión común entre muchos parapsicólogos experimentalistas quienes comparan la dificultad de medir y detectar a psi con "cazar a un gato negro en una habitación oscura". Esta irónica aunque real expresión tiene su equivalente en este experimento: los dos autores intentaron fotografiar, en lugar de cazar al gato negro, pero en esta ocasión… no disparó el flash!

A consecuencia de este experimento, no sólo se abrió el debate en torno a la eficacia en el uso de neuroimágenes para capturar psi (un equivalente funcional en psicoanalisis, por ejemplo, sería el intento de obtener la neuroimagen de una "pulsión" o fotografiar el "inconsciente"). Pero parece que el fenómeno psi, en contraste, es una propiedad de la mente mucho más controvertida y subversiva que cualesquiera otras hipótesis que se pueden plantear en otras epistemologias acerca del funcionamiento psíquico.



Finalmente, en medio de toda la controversia publicada, encontré dos artículos en los extremos del debate que me parecieron equilibrados y que decidí reproducir en este número del e-boletin. El primero es de Kendrick Frazier, editor de la revista escéptica a lo paranormal The Skeptical Inquirer, que podría haberse servido de estos resultados para poner en evidencia una vez más la inexistencia de psi. Sin embargo, con sorpresa encontré dos opiniones críticas sobre el experimento sumamente sugestivas. El segundo comentario fue publicado en el Editorial del Journal of Parapsychology escrito por John Palmer (su editor), quien proporciona detalles acerca del estudio y uno de los autores que merece la pena tener presente; en particular, coincido con Palmer de que es un error considerar que este artículo cierra el debate concluyendo que los resultados demuestran finalmente la no-existencia de psi. Amigos, el debate está abierto…

-El Editor1

  1 Agradezo a Jorge Villanueva la traducción al español de ambos artículos.





EXPERIMENTOS EN NEUROIMAGEN CEREBRAL REVELAN "EVIDENCIAS CONTRA LA EXISTENCIA DE LA PERCEPCION EXTRASENSORIAL..." ¿O NO?

Kendrick Frazier
Kendrick Frazier
kendrickfrazier@comcast.net
Por Kendrick Frazier*

¿Pueden las neuroimágenes ayudar a resolver el debate sobre si existe o no la percepción extrasensorial (PES)? Dos investigadores de la Universidad de Harvard creen que pueden, y de hecho ahora han publicado los resultados donde dicen que la neuroimagen "es la evidencia más fuerte obtenida hasta ahora contra la existencia de los fenómenos paranormales".

Los investigadores señalan que a pesar de la creencia generalizada del público en fenómenos paranormales, como la telepatía o la transmisión del pensamiento, también conocido como psi, no hay pruebas convincentes de que psi exista."

En la comunidad académica, los psicólogos especialmente tienden a ser más escépticos a la PES, en particular al tipo anecdótico que impresiona a la gente que no está consciente de todos los sesgos psicológicos que permiten tan fácilmente malinterpretar esta experiencia: ilusión de agrupación, propensidad al error, sesgo de confirmación, ilusión de control, y muchos otros.

Pero, si los procesos psi existen, ¿son éstos una actividad mental? ¿Hay algúna manera de detectar la actividad en el cerebro mediante técnicas de neuroimágen? Samuel T. Moulton y Stephen M. Kosslyn del Departamento de Psicología de Harvard creen firmemente que con estas sofisticadas técnicas, la psicología está en condiciones de avanzar en el debate psi, que "ha generado más oscuridad que luz." Ambos investigadores diseñaron experimentos mediante resonancia magnética nuclear funcional (RMNf) del cerebro para tratar de registrar la existencia de psi.

También buscaban determinar si el cerebro puede responder de forma selectiva a supuestos estímulos psi. Por "estímulos psi" quisieron decir estímulos presentados no a través de los sentidos habituales, sino por medio de telepatía, clarividencia, y precognición. Diseñaron el experimento para producir resultados positivos como si tales fenómenos existieran. Hicieron presunciones mínimas acerca de psi y piensan que tienen la prueba más contundente acerca de la hipótesis psi.

Los investigadores utilizaron dieciseis pares de voluntarios (pagados), treinta y dos personas en total. algúnos eran parejas, otros compañeros de cuarto o amigos, pero todos de algúna manera relacionados emocionalmente. Había una díada madre-hijo, dos hermanas, y dos pares de gemelos idénticos. Catorce eran hombres, dieciocho mujeres.

Para cada par se designó a uno como "emisor" y al otro como "receptor". Los estímulos del test consistieron en 240 pares de fotografías que cubrían una gama de contenidos, desde imágenes emocionalmente negativas (una serpiente, el cuerpo de alguien muerto, una escena violenta) a imágenes neutras o positivas (una caja de pañuelos, una boda, una situación erótica en pareja). Se asignó aleatoriamente una categoría a cada imagen de estímulo (psi y no psi) y se aseguraron que todos los participantes tuvieran esa misma categoría un igual número de veces.

Se colocó la cabeza del receptor en un escáner de resonancia magnética, y se inició una serie de cuarenta y ocho ensayos para cada par de voluntarios. Se le indicaba al receptor de cada pareja, en una sala aparte, ver imágenes en una secuencia de diez a veintidós segundos y después de tratar de "influir sobre el receptor" mediante un estímulo psi ("enviar" una imagen). Se les pidió que adopten una actitud "juguetona" para mantener el interés en los estímulos, y usar cualquier táctica de "emisión" que considere efectiva. (En este punto se siguió el consejo de los investigadores en parapsicología, que creen ciertas actitudes pueden estimular a psi).

Se le presentó al receptor un par de fotos y luego se le dijo que presione un botón para seleccionar cuál siente como estímulo psi. El receptor entonces veía el estímulo psi por segunda vez para tener la posibilidad de percibirla precognitivamente.

Los resultados mostraron que los participantes obtenían resultados casi exactamente a lo esperado por mero azar. De 3687 respuestas, los receptores adivinaron correctamente el estímulo psi 1842 veces (o sea, el 50 por ciento).

Pero los resultados clave fueron la comparación de la activación del cerebro a los estímulos psi versus los estímulos "no psi". Los investigadores estaban buscando localizaciones anatómicas en el cerebro que respondan de diferente manera a estos estímulos para todo el grupo y para cada percipiente en particular. El análisis de los datos puso de manifiesto que no hay "ninguna evidencia de psi."

Los estímulos psi y los no psi eran indistinguibles de las respuestas neuronales. "Los resultados apoyan la hipótesis de que psi no existe" -dicen Moulton y Kosslyn en el Journal of Cognitive Neuroscience (20:1, 2008). "Los cerebros de nuestros participantes -como grupo e individualmente- reaccionaron a los estímulos psi y no psi de manera estadísticamente indistinguible." Los resultados no pueden ser explicados por falta de poder estadístico, dicen. "Incluso si el efecto psi fuera débil, como muchos eventos mentales, debería haber dejado una huella que podría ser detectada por el RMNf."

Los investigadores dicen que incorporaron variables (participantes relacionados biológicamente, los estímulos evocativos), ampliamente empleados por los parapsicólogos para facilitar psi.

Como tales, "los resultados nulos no sólo fallan en demostrar la hipótesis de la PES: ofrecen una fuerte evidencia en su contra."

Su objetivo general era desarrollar y poner a prueba una nueva manera de abordar empíricamente la hipótesis psi utilizando las tecnologías de la neurociencia cognitiva moderna. Creen que el método tiene mucho que ofrecer a los investigadores que deseen investigar más a fondo las posibles circunstancias en las que la psi puede o no existir.

La revista The Skeptical Inquirer pidió una opinión acerca del estudio planteado por Moulton/Kosslyn, a dos notables psicólogos, críticos a la investigación psi, que piensan que sus defensores argumentarán fácilmente en torno a su significado:
"Creo que es un planteamiento interesante, pero resulta difícil pensar que esto representa la mayor evidencia hasta ahora obtenida en contra de la existencia de los fenómenos paranormales", dice Richard Wiseman de la Universidad de Hertfordshire, en Inglaterra. "El procedimiento empleado en el estudio -una persona que mira una foto y la envia a otro- en realidad no mapea ningun tipo de experimento de telepatía como el que sus defensores argumentan como una evidencia confiable de la existencia de la PES. Por ejemplo, en los estudios de visión remota, los receptores suelen ser cuidadosamente seleccionados en base a resultados previos, y en los estudios ganzfeld los receptores también se encuentran en un leve estado alterado de conciencia. Sin embargo, es un trabajo innovador, y será interesante examinar si las neuroimágenes empleando la resonancia magnética permiten comprobar las afirmaciones de los parapsicólogos."
James Alcock de la Universidad de York, en Toronto, no es tan optimista:
"Dada la forma en que se ha definido tradicionalmente a psi, es decir, como un fenómeno que no está sujeto a las normas del mundo materialista, este estudio no produce nada nuevo en términos de aportar pruebas en contra de su existencia, lo único que demuestra es que no encuentra pruebas para apoyar su existencia. No es diferente, en principio, que un físico con equipos de alta tecnología que detecta un campo de energía durante un experimento psi. Aunque el físico pueda encontrar una falla al detectar algúna energía como una fuerte evidencia contra psi, no poder en detectar el campo no sería sorprendente para los parapsicólogos; para ello simplemente serviría demostrar que, si psi existe, no involucra campos de energía conocida...

"No es posible considerar un concepto como psi, en donde se afirma que éste existe independientemente del mundo físico -por ejemplo, la precognición- y entonces argumentar que se ha encontrado evidencia en su contra simplemente porque no se ajusta a nuestra comprensión de cómo funciona el cerebro físico!"
  * Publicado originalmente en The Skeptical Inquirer, Vol. 32, No. 3, pp. 5-6. El autor es editor de The Skeptical Inquirer, la revista oficial del Committee for Skeptical Inquiry, y miembro de la American Association for the Advancement of Science. También es editor de varias antologías, entre ellas, Science Under Siege: Defending Science, Exposing Pseudoscience.




GANARSE A LA COMUNIDAD CIENTíFICA

John Palmer
John Palmer
john@rhine.org
Por John Palmer*

Uno de los objetivos más importantes de la parapsicología en los últimos años ha sido convencer a la comunidad científica de la realidad de la percepción extrasensorial (PES), al menos como una anomalía comunicacional. Me parece que es útil reflexionar de tanto en tanto sobre los progresos que hemos hecho en el cumplimiento de este objetivo. Mi respuesta es: no mucho.

Antes, intentábamos hacer caso a los "experimentos cruciales" a prueba de tontos (y también a prueba de magos). Esto nunca tuvo éxito, aunque a veces las explicaciones alternativas que los críticos proponían eran incluso tan inverosímiles como psi en si mismo (Hansel, 1989). La lógica por detrás de todo este planteamiento era errónea, como reconocen algúnos críticos (por ejemplo, Hyman, 1981). Hoy en día, la replicabilidad de los experimentos de buena calidad, si no perfecta, se ha tomado como criterio de éxito. En la literatura de investigación, la batalla se centra en los resultados de los grupos meta-analíticos de experimentos psi; el éxito (y replicabilidad) se confirma si el resultado colectivo de estos experimentos es estadísticamente significativo y los efectos de magnitud de los estudios en forma individual no correlacionan con el index de calidad metodológica (Radin, 1997). Probablemente el más importante de todos estos estudios es la técnica ganzfeld, porque ésta ha sido objeto de debate por los críticos escépticos en una revista muy importante en psicología, el Psychological Bulletin (por ejemplo, Bem y Honorton, 1994; Hyman, 1994).

En un comentario que escribí sobre el debate ganzfeld, llegué a la conclusión de que la literatura sobre este tema cumplía bien con el criterio meta-analítico de replicabilidad (Palmer, 2003). Sin embargo, también encontré que la gran heterogeneidad (variabilidad) de los resultados mostraba que la replicabilidad no es de manera algúna universal, y que lo que es replicabilidad está limitada a quienes están a favor de la hipótesis psi. Este último punto es particularmente pertinente a la cuestión de la aceptación general de psi. Desde mi punto de vista, incluso los científicos abiertos (me refiero especialmente a los psicólogos) no darán un paso al frente hasta que una masa crítica de científicos ortodoxos, nunca antes identificados con la parapsicología, obtenga resultados positivos en los experimentos que realicen. El más prestigioso de estas autoridades académicas tienen en sus propios campos, al mejor. No creo que necesiten ser escépticos; la neutralidad benevolente es suficiente. No me pidan que estime un número a esta masa crítica, pero claramente estamos muy lejos de ello al menos por ahora.

El más reciente y mejor ejemplo de un científico ortodoxo que simpatiza con nuestra literatura de investigación es el eminente psicólogo social Daryl Bem de Cornell, que ha tenido éxito en introducir psi en el contexto del asi llamado "efecto de la mera exposición." Como ha señalado el mismo Bem, su estudio debería tener un peso adicional para los científicos ortodoxos porque el paradigma metodológico que utiliza en su propio campo es fácil de implementar (Técnicamente hablando, Bem debería considerarse más como un parapsicólogo que como un outsider porque llevó a cabo estos experimentos después que él ya había tomado una posición pro-psi en su estudio sobre el ganzfeld, y porque su investigación parapsicológica todavía no había sido publicada en ninguna revista de psicología. Sin embargo, está bastante cercano al campo de la parapsicología, y su tarea de investigación y divulgación en general tiene cierto peso en la comunidad parapsicológica en general).

Sin embargo, la investigación psi hecha por outsiders es una peligrosa arma de doble filo, ya que puede ser explotada por científicos que no simpatizan con psi y dañar la credibilidad de nuestro campo de manera aún más eficaz que cualquier otra autoridad académica. Un ejemplo es el artículo publicado recientemente en una prestigiosa revista de psicología, The Journal of Cognitive Neuroscience (Moulton & Kosslyn, 2008). Voy a analizar este experimento con cierto detalle, en parte porque quiero que mis críticas se publiquen, pero lo más importante, porque ilustra una táctica de gran alcance que los críticos pueden utilizar para dañar a la parapsicología. El estudio es de particular interés para mí, porque el primer autor fue un estudiante del Curso de Parapsicología en el Rhine Center (Summer Study Program, SSP). Su credibilidad se ve reforzada por la fuerza del segundo autor, Steven Kosslyn, mentor de Moulton en Harvard, y un conocido y respetado neurocientífico cognitivo. También es miembro del Consejo Científico de la Fundación Bial, actualmente la principal fuente de financiación de la investigación psi. El impacto potencial del estudio realmente me shokeó cuando lo encontré mencionado como una autoridad en el periódico de mi ciudad.

El estudio comparó las reacciones del cerebro, medidas por un RMNf , a estímulos psi vs. no psi en participantes voluntarios. Los autores plantearon la hipótesis de que psi, si existe, debería detectar diferencias en las respuestas del cerebro entre los estímulos psi vs. no psi; pero no encontraron tales diferencias, lo que lleva a los autores a jactarse de haber logrado "la mejor evidencia hasta ahora" en contra de la existencia de psi.

Aunque tengo algúnas objeciones al experimento en sí mismo, los principales problemas son la evaluación crítica y la interpretación que hacen los autores de sus conclusiones. En primer lugar, el estudio de Moulton y Kosslyn es increíblemente deficiente en su revisión de investigaciones anteriores. El problema más grave fue no citar experimentos psi con RMNf que eran bastante similares a los suyos (Achterberg et al., 2005; Richards, Kozak, Johnson, y Standish, 2005). Ambos estudios mostraron una evidencia significativa de una relación entre la RMNf y psi. Se publicaron en una revista con referato poco más de dos años antes de la publicación del estudio de Moulton y Kosslyn, así que había suficiente tiempo para citar a estos autores antes de elaborar su informe, y probablemente suficiente tiempo también para usarlos como guías en el diseño de su propio estudio. Una cosa que los autores podrían haber tenido en cuenta es que estos dos estudios emplearon participantes seleccionados por sus presuntas capacidades psi -sanadores como emisores psi, como en el estudio de Achterberg (2005)- o participantes exitosos en un estudio piloto como en el estudio de Richards (2005) en lugar de voluntarios ordinarios como los que emplearon Moulton y Kosslyn. Sin embargo, lo más importante de todo es que la ausencia de estos dos estudios hace más notable el énfasis de los autores en negar la existencia de psi, e ignorarlos hace que el argumento de sus conclusiones parezca más fuerte de lo que es.

El segundo y uno de los principales problemas, se refiere a la línea de razonamiento de los autores de exigir pruebas positivas de psi partiendo de resultados negativos (no significativos). Dicen lo siguiente: "Aunque nunca se puede afirmar la hipótesis nula, no todos los resultados son epistemológicamente iguales. Puesto que este paradigma sólo minimiza los supuestos acerca de la fuente de conocimiento, el tipo de procesamiento, o la naturaleza del contenido mental responsable de psi, cualquier resultado nulo subsiguiente será cualitativamente más informativo que los de los métodos conductistas. Por otra parte, podemos comparar los resultados nulos con los resultados positivos que reflejan otros aspectos de los mismos estímulos, de modo que, conceptualmente, los resultados pueden considerarse parte de una interacción, donde una variable tiene efectos pero la otra no" (Moulton y Kosslyn, 2008, p. 183)

Incluso si otorgáramos crédito a los razonamientos metafísicos materialistas de los autores, este argumento es absurdo. El hecho de que los autores no pudieran encontrar ninguna evidencia fisiológica o comportamental de psi simplemente significa que el proceso psi no se activó por su procedimiento o que su manifestación era tan débil como para verse empañada por la varianza del error. En cualquier caso, la condición fundamental para probar la hipótesis de la relación RMNf y psi sencillamente no se cumplió. Esto significa que su estudio tiene el mismo impacto sobre la controversia psi que cualquiera de los muchos otros experimentos que no fueron significativos. Ni más ni menos. La existencia de un número tan grande de resultados negativos es precisamente la razón por la cual varios parapsicólogos han apelado a un meta-análisis: para sacar conclusiones en base a la literatura como un todo. Que el editor y los revisores de una revista prestigiosa como ésta acepte este razonamiento es -cuanto menos- inquietante.

No sólo un argumento de este tipo es fundamentalmente defectuoso, sino que los razonamientos de los autores se hacen de una manera tan vaga y abstracta que no son fácilmente digeribles. Ni siquiera se intenta explicar cómo las virtudes metodológicas y conceptuales que ambos investigadores atribuyen a su estudio responde a esta pregunta. En cambio, parece que por detrás de ese montón de jerga que suena sofisticada se esconde otra cosa. El lector científico promedio de este párrafo probablemente no pase mucho tiempo intentando descifrar este argumento y se limite a creer que es válido debido a que sencillamente lo hizo y en dónde se publicó.

Cuando Moulton regresó a Harvard después de terminar (con honores) el Programa de Estudios de Verano en Durham, obtuvo resultados positivos en un experimento psi que parecía ser metodológicamente sólido. En la preparación de este análisis, consulté al PsycINFO, uno de los principales motores de búsqueda de la investigación psicológica a nivel internacional, y no pude encontrar ese experimento con su nombre. Así pues, parece que nunca lo publicó. Si no podía publicarlo en una revista de psicología (una posibilidad, dado los resultados) sin duda podría haberlo publicado en una revista parapsicológica. Suena irónico porque a veces los críticos acusan a los parapsicólogos (injustamente) de publicar sólo los resultados que defienden la existencia de psi y no los que no dieron resultados significativos. Parece que Moulton ha adoptado este procedimiento, pero a la inversa.

¿La conducta de Moulton y Kosslyn puede explicarse por una combinación de descuido y errores de juicio y lógica, posiblemente causadas por su escepticismo acerca de psi, o por algúna otra explicación relativamente inocente que no se me ocurre? ¿O es que esta conducta representa un intento deliberado de engañar a la comunidad científica y al público en general sobre la evidencia de psi? No lo sé y no soy telépata. En cualquier caso, el efecto de este comportamiento fue tergiversar la evidencia de psi. Todo esto podría ser citado por sociólogos de la ciencia como un ejemplo de la cínica tesis del filósofo Paul Feyerabend (1993), de que la ciencia consecuente no es tanto una búsqueda de la verdad objetiva sino más bien un estrategia política que se juega en el interés por promover los prejuicios y el prestigio de los científicos y sus instituciones.

Esta gran desviación es un ejemplo de aquello a que nos enfrentamos al tratar de convencer a la comunidad científica acerca de la realidad de psi. La condición de estudiante de Moulton debe ayudar a disipar esa ilusión que tienen algúnos de que las cosas mejoran cuando la vieja generación de científicos se extingue y una nueva generación surge. Como señalé anteriormente, creo que el problema fundamental es la falta de confiabilidad, o lo que Hyman (1989) correctamente llama el "evasivo" efecto psi. La inmensa mayoría de los científicos -al menos los científicos de la talla de los que tienen mayor interés en el teórico statu quo- simplemente no aceptarán la replicabilidad estadística como prueba de la existencia de psi, por más injustificadas que puedan ser las conclusiones.

Una cosa que debe quedar claro es que incluso los mejores investigadores de psi están muy lejos de lo que plantea este desafío. Si así fuera, podríamos financiar la parapsicología por las próximas décadas, ir a Las Vegas y que se pierdan en los casinos. El hecho de que encontremos ocasionalmente fuertes efectos psi como los que leemos en los periódicos sencillamente subraya su irrealidad. Los sanadores psíquicos están muy lejos de sustituir, incluso de manera mínimamente significativa, la asistencia de los médicos en el diagnóstico o el tratamiento de enfermedades, por poner sólo uno de los numerosos ejemplos de lo lejos que estamos para hacer que psi sea aplicable en algún sentido significativo.

Bien, entonces ¿cómo podemos lograrlo? No podemos esperar que algúnos super-talentos nos saquen del apuro; que no ha pasado nada en los últimos 100 años de historia de nuestro campo, si es que algúna vez sucedió algo. Por lo tanto, tenemos que "crecer nosotros mismos", y esto significa entrenarnos para descubrir a psi. Nuestra literatura registra varios intentos de entrenar a psi utilizando métodos de retroalimentación, pero los resultados no han sido espectaculares (Palmer, 1978). Sin embargo, el entrenamiento en estos estudios era tan pequeño que sería increible ver algún resultado significativo. Los jugadores de baloncesto a veces se pasan cientos de horas practicando, y nada más tienen que poner una pelota en el aro a unos metros de distancia.

¿Cuánto más complicado y delicado es el proceso de desarrollar una habilidad como psi, especialmente dado el alto número de aciertos que hay que distinguir entre el azar y un psi real? Un mejor ejemplo de lo que se necesita podría ser la cantidad de años de rigurosa disciplina que soportan los monjes de los monasterios. Ahí entonces me doy cuenta de que hay razones para ser pesimistas al pensar que un programa de entrenamiento a largo plazo nos llevará al "santo grial" de un psi confiable, incluso si tuviéramos participantes prometedores para entrenar. La respuesta a este desafío es simple: si queremos convencer a la comunidad científica de la realidad de psi, el entrenamiento psi seria lo único que deberíamo intentar repetir de manera insistente.

Sigo creyendo que el proceso orientado hacia la investigación psi tiene un papel que desempeñar en parapsicología, ayudándonos a lograr una comprensión teórica de psi. Sin embargo, si pudiéramos encontrar una manera de hacer que los efectos psi sean más fiables, la investigación orientada al proceso sería más eficiente y productiva, de modo que no habría que hacer un meta-análisis cada vez que tengamos que llegar a una conclusión acerca de esa relación. algúnos de nuestros estudios sobre la investigación dirigida al proceso también podrían servir de guía en la forma en que deberíamos llevar a cabo un entrenamiento psi. No veo ninguna conexión hasta ahora, pero tal vez podamos llegar a algo si nos ponemos a pensar lo que podemos hacer.

Por último, cabe señalar que un programa de entrenamiento, sobre todo si es exitoso, plantea serios problemas éticos. El desarrollo de un psi más confiable, probablemente creará un psi más fuerte o más poderoso como subproducto. De modo que la pregunta crucial aquí seria si queremos vivir en un mundo en el que algúnos de nosotros, o incluso todos, tuvieran habilidades psi. Es una pregunta complicada, pero, por decirlo metafóricamente, antes de embarcarse sería buena idea decidir si realmente queremos llegar a destino.


Referencias

Achterberg, J. E., Gooke, K, Richards, T., Standish, L. J., Kozak, L., & Lake, J. (2005). Evidence for correlations between distant intentionality, and brain function in recipients: A functional magnetic resonant imaging analysis. Journal of Complementary and Alternative Medicine, 11, 965-971.

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Feyerabend, P. K. (1993). Against method, Tercera edición. New York, NY: Verso.

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Radin, D. (1997). The conscious universe: The scientific truth of psychic phenomena. New York: HarperCollins.

Richards, T. L., Kozak, L., Johnson, L. G, & Standish, L. J. (2005). Replicable functional magnetic resonance imaging evidence of correlated brain signals between physically and sensory isolated subjects. Journal of Complementary and Alternative Medicine, 11, 955-963.

 
* John A. Palmer es psicólogo graduado en la Duke University y obtuvo su doctorado en la Universidad de Texas en Austin. Ha sido dos veces Presidente de la Parapsychological Association y actualmente es Director de Investigaciones en el Rhine Research Center en Durham, Carolina del Norte, donde edita el Journal of Parapsychology hasta el presente. Palmer ha publicado numerosos artículos científicos y capítulos de libros, y es co-autor de Foundations of Parapsychology: Exploring the Boundaries of Human Capability.
Breves
Alejandro Parra
Alejandro Parra
rapp@fibertel.com.ar


PARAPSICOLOGIA CLINICA Y SUEñOS: CONFERENCIAS EN CIUDADES EUROPEAS

Por Alejandro Parra*

Tuve la fortuna de recibir la invitación de varios centros de investigación e institutos interesados en conocer nuestro servicio de orientación en experiencias paranormales, y permanecer, desde el 25 de Marzo al 10 de Abril, en cinco grandes capitales del viejo continente. De modo que, con la bella ciudad de Praga (República Checa) en el inicio del circuito hasta Oporto, al final, experimenté un enorme placer desplazándome por varias capitales del lado Este de Europa que jamás había visitado y conocer estos fuertes contrastes culturales.

La primer conferencia tuvo lugar en la Österreichische Gesellschaft für Parapsychologie de Viena (Austria) presentado por el Dr. Peter Mulacz, psicólogo y miembro de la Parapsychological Association, acompañado de los principales miembros de la asociación, en el salón de conferencias de la Universidad de Viena, y cuyo tema fue la experiencia de orientación clínica en parapsicología en el IPP.

Alejandro Parra en las ruinas del Oráculo de Delfos, en las afueras de Atenas, en Grecia.
Alejandro Parra en las ruinas del Oráculo de Delfos, en las afueras de Atenas, en Grecia.

La segunda presentación tuvo lugar en la Facultatea de Comunicare si Relatii Publice de Bucarest (Rumania) presentado por la Dra. Mihalea Milanescu, psicoterapeuta de orientación junguiana, y autora de numerosos libros de texto en psicología clínica y psicopatología en la Universidad de Bucarest y fundadora de la Asociatiei Române de Psihologie Analitic?. Del mismo modo, tuve la ocasión de ofrecer una conferencia sobre orientación en parapsicología clínica frente a un gran número de estudiantes de grado en psicología y varios terapeutas rumanos interesados en la temática.

Próximo a Bucarest, la ciudad de Estambul (Turquía) también fue el espacio para una conferencia y un taller sobre interpretación de sueños organizada por la Fundación Bilyay creada por Ergun Arikdal, un conocido medium y experto en temas paranormales que editó, en los años setenta, la revista Ruh ve Madde (Espíritu y Materia) algunos de cuyos ejemplares poseemos en la biblioteca del IPP, y en la cual se publicó un breve artículo sobre sueños paranormales. En esta ocasión, Parra fue presentado por Tulin Etyemez, editora actual de la revista, frente a un numeroso e interesado auditorio en la sede misma de la Fundación. Es necesario indicar que el contraste cultural no opacó de modo alguno las coincidencias observadas entre nuestra cultura occidental y la cultura islámica dominante del pueblo turco, particularmente en términos de las imágenes y los símbolos típicos de los sueños. De modo que la interacción con el público turco, interesados en estas temáticas, resultó altamente productivo y educativo.

Yannis Moutsos periodista especializado en temas paranormales después de la entrevista para el programa "En las Puertas del Misterio", que emite el Canal Alter TV en Atenas.
Yannis Moutsos periodista especializado en temas paranormales después de la entrevista para el programa "En las Puertas del Misterio", que emite el Canal Alter TV en Atenas.

Finalmente, el circuito culminó en la ciudad de Atenas (Grecia). A pesar de algunas desinteligencias con algunos de los representantes locales de la parapsicología (la Iglesia Ortodoxa en Grecia celebra la Semana Santa incluso días después, y mucha de su gente se desplaza hacia otras ciudades), de todos modos, tuve ocasión de visitar algunos sitios emblemáticos de la cultura, tales como la Acrópolis y algunos de sus principales islas, pero especialmente el famoso Oráculo de Delfos que fue uno de los sitios más visitados en la antigüedad para recibir consejos y orientación de las Pitonisas. en Atenas fui invitado por el programa de TV "Las Puertas de lo Desconocido" un popular programa de temas paranormales que emite semanalmente Alter TV, uno de los principales canales de aire de la ciudad, entrevistado por Yannis Moutsos, un periodista local experto en temas paranormales, acerca de los últimos hallazgos en parapsicologia. En la ciudad de Oporto (Portugal), tuve ocasión de atender el Octavo Simposio de la Fundación BIAL, focalizado en la temática "Intuición" y que contó con la presencia de neurocientíficos y psicólogos de prestigio mundial, tales como Seymour Epstein y David Myers, asi como también investigadores psi tales como Dick Bierman, Marilyn Schlitz, Richard Broughton, entre otros.

Alejandro Parra durante su presentación en el Simposio de la Fundación BIAL "Aquem e Alem do Cerebro" en Oporto.
Alejandro Parra durante su presentación en el Simposio de la Fundación BIAL "Aquem e Alem do Cerebro" en Oporto.

La experiencia de tan exquisito y educativo circuito por varios paises, resultó sumamente productiva: En el centro de Rumania, a apenas una hora de la ciudad de Brasov se puede visitar el famoso castillo de Bran, que sirvió de fuente de inspiración al novelista irlandés Bran Stoker para escribir su inmortal personaje "Dracula"; el Museo Sigmund Freud en Viena, donde el padre del psicoanálisis analizó a sus más famosos casos y que conserva las primeras ediciones en alemán de sus obras antes del surgimiento del nazismo que lo obligó a exiliarse a Londres; en el sur de Estambul tuve ocasión de visitar Esmirna (Izmir) donde se halló la casa donde vivió sus últimos años la Virgen María, convertido en un santuario mariano de enorme importancia para el mundo cristiano, asi como las ruinas de la ciudad de Efeso, donde convivieron varias culturas antiguas.

Todos los encuentros con los coordinadores de mis eventos en estas capitales europeas mostraron un vivo interés en conocer nuestros estudios en Argentina, un pais casi tan remoto como desde nuestra perspectiva vemos a ellos, pero empleando un lenguaje común (además del inglés) basado en temáticas y preocupaciones comunes, pero sobretodo, calidez y amabilidad demostrada en almuerzos y cenas compartiendo ideas, diferencias culturales y buen humor que permitió experimentar una sensación de familiaridad a pesar de la enorme distancia en la que me encontraba.

Cena de cierre de la conferencia en la Universidad de Viena, junto a Dr. Peter Mulacz (izq.), Alejandro Parra y varios miembros de la asociación vienesa.
Cena de cierre de la conferencia en la Universidad de Viena, junto a Dr. Peter Mulacz (izq.), Alejandro Parra y varios miembros de la asociación vienesa.

Presentación de la conferencia de Parra en la Facultad de Comunicación y Relaciones Públicas de la Universidad de Bucarest, en Rumania. A la izquierda, la Dra. Mihalea Milanescu.
Presentación de la conferencia de Parra en la Facultad de Comunicación y Relaciones Públicas de la Universidad de Bucarest, en Rumania. A la izquierda, la Dra. Mihalea Milanescu.

Miembros de la Fundación Bilyay en Estambul junto a Alejandro Parra al término de la conferencia. A la izquierda, Tulin Etyemez, presentadora y anfitriona de la visita de Parra.
Miembros de la Fundación Bilyay en Estambul junto a Alejandro Parra al término de la conferencia. A la izquierda, Tulin Etyemez, presentadora y anfitriona de la visita de Parra.



Revista de libros
KAPLAN, Louis (2008). The strange case of William Mumler, Spirit Photographer. Minnesota, MI: University of Minnesota Press. Pp 288. ISBN: 978-0816651573.

En la década de 1860, William Mumler fotografiaba fantasmas -o eso decía. Imágenes sutiles de seres fallecidos escondidos como extras detrás de las personas vivas (como su foto más famosa: la de Mary Todd y el asesinado Presidente Abraham Lincoln, su esposo). La práctica llegó a ser conocida como fotografía espírita, y algunos creían Mumler era un canalizador de los muertos. Los escépticos, sin embargo, lo calificaron como un embaucador de personas crédulas, y que se aprovechaba del duelo en un momento de pérdida y sufrimiento.

En el libro The Strange Case of William Mumler, Spirit Photographer [El extraño caso de William Mumler, Fotógrafo de Espíritus], Louis Kaplan reúne por primera vez, las imágenes fantasmales de Mumler y sus memorias, incluyendo artículos de la prensa. Kaplan también escribe dos ensayos que ofrecen una perspectiva histórica de los fenómenos Mumler y profundiza en cuestiones socio-culturales y problemas teóricos en torno a estas historias de fantasmas. El caso de Mumler fue uno de los primeros ejemplos de periodismo de investigación que se cruza con un juicio penal que, en esencia, plantea el debate entre la ciencia y la religión.

Mumler se inició en el arte de la fotografía espiritista por accidente en 1861, y trabajaba de joyero en Boston. En su autobiografía, Mumler, que era también aficionado a la fotografía, explica que un día, mientras trabajaba en un auto-retrato, descubrió la misteriosa forma de una chica joven en el negativo. Mumler tuvo la curiosidad y se la enseñó a sus amistades, diciéndoles que era muy parecida a una prima suya muerta. De carácter jovial, decidió bromear a un amigo espiritista y fingir que la fotografía era una impresión real del más allá. El amigo se tragó el anzuelo, y la noticia rápidamente empezó a correr por la ciudad.

La técnica que usaba Mumler para hacer sus fotografías era objeto de gran especulación. En 1863 en un ensayo para el Atlantic Monthly, Oliver Wendell, otro ávido fotógrafo, no sólo explicaba paso a paso las instrucciones para obtener una doble exposición, sino que además hacía referencia a la popularidad de las fotos de Mumler: "con un fondo apropiado, fotografías así son un refugio para las mentes débiles". Para Wendell, una madre que acababa de perder a un hijo, y quería tener una foto de su espíritu, poco le bastaba para verlo. Una mancha con apariencia de ropa de niño en la foto, y una confusa forma redondeada le bastaría para convertirla en su cara.

Louis Kaplan es profesor adjunto de Historia y Teoría de la Fotografía en el Departamento de Posgrado de Arte de la Universidad de Toronto, y director del Instituto de Comunicación y Cultura en la Universidad de Toronto, en Mississauga. Sus libros incluyen American Exposures: Photography and Community in the Twentieth Century (2005) y The Damned Universe of Charles Fort (1993), así como numerosos ensayos sobre saberes marginales en los estudios culturales modernos y contemporáneos. También forma parte del consejo asesor internacional de la revista Photography and Culture.



MONROE, John Warne (2008). Laboratories of Faith: Mesmerism, spiritism, and occultism in modern France. Ithaca, NY: Cornell University Press. Pp. 293. ISBN: 978-0801445620.

En una época fascinante de la historia intelectual de la Francia del siglo XIX, el interés en ocultismo no era equivalente a rechazar el pensamiento científico; los participantes de las sesiones espiritistas y rituales de magia buscaban tanto evidencia experimental como asi también revelaciones espirituales. Un joven estudiante de astronomía escribió: "No estoy en presencia o bajo la influencia de ningùn espíritu maligno: Yo estudio Espiritismo como estudio matemáticas." Claramente, no se consideraba a sí mismo como un visionario, o un delirante, sino como un observador racional.

En el contexto de prácticas religiosas alternativas en Francia, en la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX, la obra de Monroe relata historias interconectadas de tres movimientos culturales: el mesmerismo, el espiritismo y el ocultismo. Los seguidores de estos grupos, revela Monroe, trataron de "modernizar" la fe mediante el apoyo empírico de conceptos metafísicos. En lugar de confiar en la especulación teológica de la naturaleza del alma, estos creyentes intentaron reunir evidencias tangibles a través de experimentos mesméricos, sesiones espiritistas y magia ceremonial.

Si bien había pocos franceses magnetizadores, espiritistas, ocultistas activos, grandes segmentos de la población culta estaban familiarizados con estos movimientos y, a menudo los consideraba expresiones fascinantes de la "modernidad", en contraste con el catolicismo y el materialismo secular de la cultura dominante. Con fotografías de espíritus difusos, divertidas litografías de Daumier, y un autógrafo póstumo de Voltaire, así como numerosos documentos, Laboratories of Faith ofrece a sus lectores una idea de lo que es una sesión espiritista, o el ritual de una sociedad secreta. Aunque nunca lograron la transformación de la conciencia humana, estos pensadores y creyentes, sin embargo, fueron pioneros en una manera del "ser religioso" que se ha convertido en parte de la cultura occidental.

John Warne Monroe escribe en un sentido muy humano, y nos lleva al mundo de los mediums, sonámbulos, científicos y buscadores serios, y delincuentes flagrantes, sin dejo alguno de burla o condescendencia. En efecto, escribe en forma que nos hacen verlos como absolutamente familiares y completamente humanos. Es un excelente libro, cuidadosamente concebido, ricamente documentado, y escrito con elegancia, basado en una tradición existente de estudios de revisión sobre la historia religiosa de la Francia moderna, con una nueva profundidad e imaginación. John Warne Monroe, profesor asociado de historia cultural europea e intelectual en la Iowa State University, ofrece un relato original y sugerente del siglo XIX y principios del siglo XX y las raíces de la Nueva Era.



TYMN, Michael E. (2008). The Articulate Dead: They brought the spirit world alive. Lakeville, MI: Galde Press. Pp. 276. ISBN: 978-1931942485.

Durante finales del siglo 19 y principios del 20, hubo una gran dinamismo para la obtención de pruebas de comunicación con los espíritus. Un número de científicos e investigadores estudiaron algunos de los mejores mediums y se llegó a la conclusión de que eran genuinos. Por desgracia, también había muchos charlatanes y era difícil para el público en general distinguir entre los mediums reales y los fraudes.

En The Articulate Dead, su autor, Michael E. Tymn, examina varios de los mejores mediums de la época y la investigación científica en torno a ellos, y desarrolla una serie de historias muy interesantes, por ejemplo, la de un espíritu guiando a un arqueólogo en el descubrimiento de las ruinas de la Abadía de Glastonbury, o guiando a un autor fallecido a terminar sus libros a través de un medium, o a una víctima del Titanic regresando para hablar acerca de su nuevo mundo espiritual, o a un investigador de la supervivencia después de la muerte continuar su trabajo después de morir, por nombrar sólo algunos.

Tymn hace una interesante investigación y presenta un estilo periodístico ameno y confiable de lectura. Como señala en su prefacio, su meta es "resucitar algunas de las personalidades más interesantes y dignas de crédito y los casos en los anales de la investigación psíquica desde 1850 a 1940, lo que podría llamarse el apogeo de la mediumnidad, y la comunicaciòn con los espíritus. El autor, vice-presidente de the Academy of Spirituality and Paranormal Studies, y editor de su revista oficial The Searchlight, ha sido periodista independiente desde hace más de 50 años, y sus artículos sobre temas paranormales han aparecido en revistas como Fate, Mysteries, Nexus, Atlantis Rising, Christian Parapsychologist, Vital Signs, Venture Inward, Two Worlds, Dark Lore, Alternatives, and The Honolulu Advertiser



JONES, Zachary; DUNNE, Brenda; JAHN, Robert; & HOEGER, Elissa (2009). Filters and Reflections: Perspectives on reality. Princeton, NJ: ICRL Press. Pp. 310. ISBN 978-1936033010.

Cuando nos enfrentamos a lo inexplicable, es interesante considerarlo desde diferentes puntos de vista. En un ensayo publicado en 2004, titulada Sensors, Filters, and the Source of Reality [Sensores, filtros y la fuente de realidad], Robert Jahn y Brenda Dunne del laboratorio PEAR de la Universidad de Princeton proponen que la conciencia construye su realidad ordenando la información que proviene del mundo exterior a través de una serie de filtros fisiológicos, psicológicos y culturales. Esta tesis ahora es considerada por diecinueve distinguidos académicos que presentan sus comentarios desde un amplio espectro de perspectivas profesionales y personales. Con antecedentes tan diversos como el arte, el budismo, la biología evolutiva, lo fantástico, las experiencias fuera del cuerpo, la filosofía, la física, la psicología, la semiótica, y la ingeniería en sistemas, entre otros, estas contribuciones ofrecen una variedad de visiones únicas y fascinantes de cómo nuestras experiencias y sus estilos de representación se reflejan a través de estos filtros de la conciencia.

Robert Jahn es Decano Emérito de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas en la Universidad de Princeton, y en 1961 fundó el primer laboratorio americano dedicado al estudio de la propulsión eléctrica para naves espaciales y satélites, propulsión eléctrica y de plasma en el Laboratorio de Dinámica de la Universidad de Princeton, y ha sido miembro de la NASA. Es vicepresidente de la Society for Scienticic Exploration y Presidente del Laboratorio Internacional para la Investigación de la Conciencia. Junto a Brenda Dunne, fundaron el Princeton Engineering Anomalies Research Lab (PEAR Lab) en 1979, para estudiar los efectos psicokinéticos de bajo nivel sobre generadores electrónicos de eventos aleatorios. En los últimos 25 años, Jahn y Dunne han obtenido una gran cantidad de resultados estadísticamente significativos -aunque en pequeña escala- que sugieren una relación causal directa entre la intencionalidad y la aleatoriedad.



SHARP, Lynn L. (2009). The ESP Enigma: The scientific case for psychic phenomena. New York, NY: Walker Publishing. Pp. 288 ISBN: 978-0802716064.

El poder psíquico ha tenido problemas para ganar respetabilidad científica, pero Powell se esfuerza en proponer en seria consideración su existencia. Su autora, que es médica, aborda seriamente este tema, y resume la investigación de la percepción extrasensorial en cuatro áreas: telepatía, telequinesis, clarividencia, y precognición. Powell ofrece varios relatos sorprendentes sobre premoniciones y sueños que parecen hacerse realidad y reconoce el predominio de la evidencia anecdótica en la investigación de la percepción extrasensorial (PES). Los investigadores han intentado en consecuencia para poner las cosas en igualdad de condiciones por medio de experimentos controlados. Powell opina sobre estos experimentos, tomando nota del abordaje estadístico de habilidades psíquicas producidas en algunos ensayos o ambigüedades en los resultados, según el caso, como los obtenidos por los investigadores de la CIA en "visión remota". Powell se adhiere a la posibilidad de que la conciencia humana pueda afectar a la materia a nivel cuántico mecánico. La incorporación de conocimientos de neurociencia en este trabajo apela a los que están abiertos a la idea de que existe la percepción extrasensorial.

La autora sostiene que muchas personas tienen experiencias precognitivas, particularmente a través de sueños, de hecho, los estudios en que basa su libro revelan que algunos soñadores parecen haber salvado su propia vida gracias a tener esta información ya existente en el futuro. Según Powell, la experiencia del "ahora" del cerebro humano es como ver el fotograma de película a la vez aunque exista toda la película. El ejercicio constante, fotograma-a-fotograma, puede influir en un futuro que ya existe, pero dentro de ciertos límites. Esta psiquiatra, que estudió en el Instituto de Psiquiatría de Londres y trabajó en la Escuela Médica de Harvard, termina diciendo que: "Hacer la vista gorda frente a los fenómenos psíquicos no es más que una opción para aquellos que se nieguen a creer, como si uno negase que el Apolo XI aterrizó en la luna, simplemente porque no podemos explicar la física que hizo posible tal hazaña."



DA SILVA, Fabio E. & BRELAZ DE CASTRO, Jalmir (2009). Quinto Encontro Psi: A variedade das experiencias humanas. Recife, PE: Instituto Pernambucano de Pesquisas Psicobiofísicas. Pp. 177.

Esta obra presenta los trabajos presentados durante el Quinto Encontro Psi organizado por el Instituto Pernambucano de Pesquisas Psicobiofísicas en la ciudad de Recife, en Pernambuco, Brasil. Después de un prefacio de sus editores, Fábio Eduardo da Silva y Jalmir F Brelaz de Castro, la obra incluye una diversidad de estudios de parapsicólogos brasileros e hispano-parlantes, que incluyen temas tales como magia, ilusionismo, y parapsicología (Sergio Schilling), psicocinesia y espiritualidad (Fátima Machado), psicología de la mediumnidad (Wellington Zangari), mediumnidad e identidad psicosocial (Everton de Oliveira Maraldi), aconsejamiento en parapsicología (Tarcísio Pailú), el concepto de entropía y psi (Carlos Alberto Tinoco), desarrollo y entrenamiento psi (Fábio Eduardo da Silva), voces paranormales (Ronaldo Dantas Lins), parapsicología y filosofía de la ciencia (Jalmir Brelaz de Castro), experiencias parapsicológicas y despersonalización (Carlos S Alvarado, Nancy L Zingrone y Natasha Agree), absorción y disociación en el espiritismo brasilero (Stanley Krippner), y psicología anòmala en Brasil (Wellington Zangari). El libro incluye también los resumenes de las discusiones en mesas redondas, tales como "Parapsicologia y Psicopatología" (S. Krippner, W. Zangari y Valter da Rosa Borges) e "Investigación Psi y Neurociencia" (F. Machado, J. Brelaz de Castro y S. Krippner). También se presenta un estudio de caso de "psicometría ambiental" de Silvino Alves da Silva Neto y un ensayo sobre "Parapsicologia y Derecho" de Valter da Rosa Borges. Los interesados en adquirir esta obra, pueden contactar con su editor Fabio de Silva a su email: facbioz@yahoo.com.br



ROE, Chris; KRAMER, Wim & COLY, Lissette (2008). Utrecht II: Charting the future of parapsychology. New York, NY: Parapsychology Foundation. Pp. 590. ISBN: 978-1931747288.

Desde los inicios de la década del cincuenta, la Parapsychology Foundation organiza regularmente una serie de "Conferences" que se han convertido a lo largo de las décadas en las reuniones profesionales más educativas en el campo de la parapsicología por varias razones, una de ellas es la posibilidad de atomizar el encuentro en una discusión común (lo cual difiere de la diversidad y -a menudo incongruencia- de las convenciones de la Parapsychological Association, reuniendo a los expositores màs relevantes de todo el mundo, y acompañados por un nutrido y selecto número de "Observers", tambièn invitados libremente a participar del encuentro, con el objeto de sumar e incorporar otras perspectivas en torno a la parapsicología y sus alcances. Presentado por un editorial escrito por Wim Krainer, Hugo Verbrugh, Eileen Coly, Lisette Coly, y Chris Roe, el libro de conferencias Utrecht II (en memoria de la primera conferencia internacional de parapsicología celebrada en 1954, que -a la sazòn- convocó por primera vez al mèdico argentino Dr. Orlando Canavesio), se divide en cuatro sesiones: La primera, "Mediciones de Psi", incluyó un estudio conceptual sobre la consciencia y psi (Roger Nelson), la investigación del presentimiento (Eva Lobach), e indicadores neuronales de psi (Thilo Hinterberger).

La segunda sesión sobre el tema "Expresiones de Psi en la Vida" incluyó el estudio de la percepción extrasensorial en sueños (Robert L. van de Castle), investigaciones de campo en hauting y poltergeists (Fátima Regina Machado), y variables de personalidad en la investigación de experiencias espontáneas (Christine Simmonds Moore). Otras presentaciones incluyeron un abordaje histórico del primer encuentro en Utrecht (Carlos S. Alvarado), la parapsicología en el contexto universitario (Deborah L. Delanoy), hacia una ciencia de las alteraciones de la conciencia (Etzel Cardeña), y la realidad auto-organizada (Brian Josephson, Premio Nobel).

La tercera sesión, "Problemas clínicos y médicos en parapsicología", incluyó el abordaje de las experiencias psi (Martina Belz), la espiritualidad y psi (Harald Walach), la sanación a distancia usando RMNf para medir la función cerebral (Jeanne Achterberg). Finalmente, la cuarta sesión se ocupó de problemas teóricos, tales como el problema de la relación mente-cuerpo en parapsicología (Hoyt Edge), el problema del tiempo (Richard Shoup), y física teórica y psi (York H. Dobyns). Finalmente, una controvertida exposición acerca del futuro de la parapsicología, por cierto, bastante pesimista, de Edwin May. El libro de la conferencia incluyó una desgrabación de las discusiones entre expositores y observadores y un CD con los resúmenes, fotografias y otros documentos de ésta y la primera conferencia internacional. Los interesados en adquirir la obra pueden visitar el sitio de la PF http://www.parapsychology.org

 

* Redactor en Jefe de la Revista Argentina de Psicología Paranormal (1990-2004), Secretario del Instituto de Psicología Paranormal, Asoc. Civil. Es autor y traductor de artículos sobre historia de la parapsicología, investigación ganzfeld, y psychomanteum publicados en la RAPP y Journal of the Society for Psychical Research. Ha sido expositor en varias conferencias de parapsicología en Buenos Aires. Es miembro de la Asociación Iberoamericana de Parapsicología. Tiene particular interés en el estudio de los psíquicos y sus estrategias para estimular psi bajo condiciones de laboratorio, y la biografía de psíquicos e investigadores. Actualmente colabora en el proyecto SIPSI para crear la más completa base de datos en parapsicología en español.
Jorge Villanueva.
Por Jorge Villanueva*.
jovillanu@yahoo.com.ar

The strange case of William Mumler, Spirit Photographer

Laboratories of Faith: Mesmerism, spiritism, and occultism in modern France.

The Articulate Dead: They brought the spirit world alive

Filters and Reflections: Perspectives on reality.

The ESP Enigma: The scientific case for psychic phenomena.

Quinto Encontro Psi: A variedade das experiencias humanas.

Utrecht II: Charting the future of parapsychology.




Noticias
CURSO-TALLER "SABERES ALTERNATIVOS": CONOCIMIENTOS MAS ALLÁ DE LA RAZÓN

A cargo de Prof. Dr. Alejandro Parra el Instituto de Psicología Paranormal comenzará el curso anual "Saberes Alternativos: Conocimientos más allá de la razón" cuyo eje central girará en torno a la psicología y la psiquiatría transcultural, teorías actuales acerca de la consciencia, y el abordaje de prácticas espirituales tales como el chamanismo, el yoga, el budismo, entre otras, desde la perspectiva de la psiquiatría transcultural, y otros modelos de Oriente y Occidente. Entre otros temas, se abordarán también la meditación, los estados hipnagògicos (por ejemplo, ganzfeld y psicomanteum), hipnosis, experiencias fuera del cuerpo, experiencias misticas, y su potencial aplicación terapéutica. Entre otros conceptos se presentarán la clínica transpersonal para experiencias místicas y religiosas, espiritualidad "negativa" y defensividad espiritual, y modelos terapéuticos, tales como la imaginería guiada, terapia de vidas pasadas y sus consideraciones éticas, entre otras. El curso-taller está destinado a nuclear personas interesadas en trabajar en estas sabidurías y técnicas, revisar aspectos teóricos y conceptuales -por la mañana- y además tomar parte de un grupo de personas interesadas en diseñar y llevar a cabo experimentos psi basados en estas operaciones mentales -por la tarde. El inicio de la actividad será a partir del dia Sábado 8 de Mayo de 10 a 18hs. (y luego los Sábados 12 de Junio, 10 de Julio y 14 de Agosto). Para mayor información escribir a Alejandro Parra (Email rapp@fibertel.com.ar).


 

JUAN CARLOS RUSSO
JUAN CARLOS RUSSO: RADIESTESISTA ARGENTINO (1940-2010)

Víctima de un infarto, falleció el pasado mes de Febrero un amigo y colaborador del Instituto de Psicología Paranormal. Conocimos a Juan Carlos Russo en la década de los 90, y mantuvimos una cordial relación durante muchos años, quien dictó conferencias sobre la práctica radiestésica en el Instituto. También se desempeñaba como contador público y cooperó desinteresadamente en la contabilidad del Instituto. Russo se inició desde muy temprano en este campo, a mediados de la década del sesenta, se entrenò en materias psicotécnicas , como la grafología y los tests gráficos, de amplia aplicación entre los estudiosos de la psicología de la personalidad. Por diversas razones, la grafología y la parapsicología compartían un atractivo de parte de muchos, entre los cuales Russo fue un pionero, junto a Kurt Honroth, Angel Zarza, Ramon Rivera, Oscar Barros y Luis Grinstein en el inicio de las herramientas grafodiagnòsticas en Argentina y América Latina. Incursionó también en el campo de la hipnosis y la sofrología (una orientación de la hipnosis promovida por el psiquiatra colombiano Alfonso Caycedo), y además, religiones comparadas, teosofía, rosacrucismo, y mantuvo un vivo interés por varias medicinas alternativas, tales como la reflexología, la acupuntura y otras técnicas de oriente, como el Ayurveda, Yoga y Reiki, del cual fue un activo promotor y maestro. En el campo de la radiestesia, Russo llegó a ser un experto, pero también un duro crítico de las prácticas pseudocientíficas y el charlatanismo, por lo cual, cierta vez me dijo "nunca escribí un libro; si lo hiciera, ganaría muchos más enemigos de los que tengo." Russo coleccionó una de las mayores bibliotecas de radiestesia que pude apreciar, compuesta por más de mil volúmenes en varios idiomas, algúnos de los cuales son piezas raras e inhallables.

A lo largo de los años, Russo también desarrolló un interés en otras materias derivadas de su pericia en radiestesia, por la cual -señaló- "me he convertido yo mismo en un sensitivo", tales como la Geobiología (fue delegado en Argentina para la Asociación Internacional de Estudios Geobiológicos). Desde la actividad educativa, ofreció cursos libres, dictó conferencias en Argentina y otros paises (por ej. México), animó a otros estudiantes y recién iniciados a enfocar la radiestesia de manera seria y rigurosa, e integró (y llegó a ser Presidente) de la Asociación Argentina de Radiestesia (http://www.radiestesiaargentina.netfirms.com), fundada a mediados de los años cincuenta, una de las pocas instituciones supervivientes que contribuyó en la divulgación y práctica de la radiestesia en Argentina y en otros paìses. También lo tuvieron como colega y consultor L'Associazione Italiana Radiestesisti A.I.R., la Unión Científica de Radiestesia, UCIR y el Departamento Oficial de Radiestesia y Geobiología de la Sociedad Cubana de Geólogos.

En años recientes, Russo manifestó su orgullo personal por haber sido invitado como tutor (no asignado oficialmente) para varias tesis de grado basadas en la práctica radiestésica. Por ejemplo, la del Geofísico cubano Dr. Leodegario Lufriú Díaz y otra tesis en arquitectura, la de Consuelo Ardila Ortiz para la Universidad Autónoma del Caribe, en Barranquilla, Colombia, entre otras.

A pesar de que muchas de sus conferencias y clases nunca fueron publicadas (algo puede encontrarse en internet, pero Russo nunca publicó sus resultados), no obstante era un hombre cálido, cordial y apasionado defensor de la radiestesia y la parapsicología como ciencias. Creía que el método científico era el única forma de poner a prueba las afirmaciones de la radiestesia, y que no todos sus practicantes eran exitosos en ello. Era un hombre sabio, sin duda, cuya principal fuente de aprendizaje, provenía de sus propias experiencias y observaciones. Su mayor capital fue su pasión y su rigor para examinar la evidencia, y discriminar lo posible de lo meramente imaginario en este furtivo campo (AP).
Revistas recibidas

Journal of Scientific Exploration. Vol.23, No.1, Primavera 2009.
Journal of Scientific Exploration. Vol.23, No.4, Invierno 2009.
European Journal of Parapsychology. Vol.24.1, 2009.
European Journal of Parapsychology. Vol.24.2, 2009.
Parapsykologiske Notiser. No.68, 2009.
Parapsykologiske Notiser. No.69, 2009.
Scienza & Paranormale. Vol.18, No.85, Mayo 2009.
Scienza & Paranormale. Vol.18, No. Julio 2009.
The Journal of Spirituality and Paranormal Studies. Vol.33, No.1, Enero 2010.
The Journal of Spirituality and Paranormal Studies. Vol.33, No.2, Abril 2010.
Luce e Ombra. Vol.109, No.1, Enero 2009.
Luce e Ombra. Vol.109, No.2, Abril 2009.
Luce e Ombra. Vol.109, No.3, Julio 2009.
Luce e Ombra. Vol.109, No.4, Octubre 2009.
Journal of the Society for Psychical Research. Vol.73.1, No.895, Abril 2009.
Quaderni di Parapsicologia. Vol.41, No.2, 2009.
Australian Journal of Parapsychology. Vol.9. No.2, Diciembre 2009.
Ruh ve Madde. Vol.51, No.602, Marzo 2010.
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E-BOLETíN PSI. Vol.5, No.2(13), Mayo 2010

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E-Boletín Psi ® aparece tres veces por año (Enero, Mayo y Septiembre) y su distribución es gratuita. Las fechas límite para presentar artículos breves, libros para revisar, eventos de próxima organización, y noticias serán el 2 de Diciembre (Enero), 2 de Abril (Mayo) y 2 de Agosto (Septiembre) correspondiente a cada número.

Toda correspondencia debe ser dirigida directamente a su Editor Alejandro Parra. (rapp@fibertel.com.ar)

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Editor
Alejandro Parra

Compaginación & Diseño
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Asesor Legal
Héctor I.B. del Valle

Revisión de Libros
Jorge Villanueva

Colaboran en este número
Carlos S. Alvarado, Kendrick Frazier, Juan Gimeno, John Palmer, Alejandro Parra y Jorge Villanueva.
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