Instituto de Psicología Paranormal Instituto de Psicología Paranormal
E-BOLETÍN PSI. Vol.7, No.1, Enero 2012

   Indice:
DESDE EL ESCRITORIO DEL EDITOR…
Al inicio de este nuevo año, debemos admitir que la frecuencia y alcance de este e-boletín ha trascendido todas mis expectativas en cuando a calidad y distribución. Hemos logrado más de mil nuevos suscripciones sólo en 2011 y continuamente vamos incorporando nuevos temas y secciones.

En este número, Parra y Argibay llevaron a cabo dos ensayos de una prueba de percepción extrasensorial de respuesta libre (usando ilustraciones). Mediante el uso de la Escala Grupal de Susceptibilidad Hipnótica (SH) de Harvard, que evalúa el nivel de hipnotizabilidad usando doce sugestiones, ciento un sujetos fueron divididos por sus puntuaciones entre alta SH y baja SH, y a su vez, aciertos y no aciertos en ambas pruebas. Los resultados del estudio mostraron que grupo de individuos altamente hipnotizables obtuvieron mejores resultados en ambos ensayos en comparación con quienes puntuaron bajo (p = .03, una cola), lo cual parece sugerir que la hipnosis potencia las alteraciones de la experiencia subjetiva de sujetos susceptibles y facilita el rendimiento en pruebas psi.

El sociólogo Marcello Truzzi discute la relación entre la prestidigitación y la parapsicología, desde una perspectiva social. Aunque con fuertes e irreconciliables diferencias, en muchos aspectos magia e investigación psi guardan coincidencias y puntos de encuentro que merecen ser tenidos en cuenta, a pesar de ser dos mundos muy complejos y diferentes entre si. Por ejemplo, ambos nuclean tanto profesionales como amateurs, científicos y sensacionalistas, gente honesta y charlatanes. El autor expone cuatro secciones que entrañan profundas reflexiones: "Magos e Investigadores Psíquicos", explicando la compleja relación entre magos y parapsicólogos, y donde los magos pueden servir de auxilio para para detectar fraudes, "Multi-dimensionalidad y Multiplicidad de Roles", en donde Truzzi distingue entre médiums, psíquicos, mentalistas, magos y parapsicólogos, pero que empíricamente se yuxtaponen, y finalmente responde a la pregunta: ¿Son los magos enemigos o simpatizantes de lo paranormal?. Truzzi aquí plantea que un gran número de magos sensacionalistas han ofrecidos sumas de dinero para desafiar a médiums y curanderos a exhibir sus "presuntos" poderes con fuerte impacto publicitario.

También se presentan los textos de las presentaciones de los tres expositores que debatieron en la Tercera Mesa Redonda "Tocados por Dios: Diversas miradas de la experiencia mística" que tuvo lugar en el Museo Roca de Buenos Aires. El antropólogo Gustavo A. Ludueña definió a la experiencia religiosa como epistemología de lo numinoso y a la experiencia mística como una de las dimensiones cruciales de la práctica religiosa bajo tres nociones que tienen fuertes vínculos entre sí: las configuraciones de lo numinoso, y la epistemología y tecnología del ser. La psiquiatra Patricia Arca Mena sintetizó el campo de la neuroteología como una rama de las neurociencias que se ocupa del estudio de la neurobiología de la religión y la espiritualidad, y por añadidura, de la anatomía de una experiencia mística. Según Arca Mena, la meditación y la vida espiritual favorecen al bienestar físico, emocional e intelectual y puede llevar a una vida más sana y feliz. El sociólogo Nicolás Viotti, por su parte, exploró el aprendizaje y la transmisión de la posesión del Espíritu Santo en un culto de catolicismo carismático de Buenos Aires, donde el autor redefine los límites entre lo espiritual, lo mental y lo corporal.

Finalmente, Parra sintetiza las principales conferencias de la reciente convención anual de la Parapsychological Association, en Agosto último, en la ciudad de Curitiba, Paraná, Brasil, cuyos expositores vinieron de Argentina, Inglaterra, Alemania, Islandia, Japón, Suecia, Estados Unidos y Brasil. Jorge Villanueva comenta los más recientes libros de parapsicología y temas relacionados, publicados durante el último año.

Disfruten la lectura de este nuevo e-boletin!

-El Editor



Alejandro Parra, Editor
Alejandro Parra, Editor
rapp@fibertel.com.ar
Enero 2012

Investigación

DOS EXPERIMENTOS DE PERCEPCION EXTRASENSORIAL
EN INDIVIDUOS HIPNOTIZABLES 1


Alejandro Parra*
Juan Carlos Argibay**


Alejandro Parra
Alejandro Parra*
rapp@fibertel.com.ar

Juan Carlos Argibay
Juan Carlos Argibay**
jcargibay@hotmail.com

INTRODUCCIÓN

Debido a la posibilidad de facilitar el efecto psi bajo los efectos de la hipnosis, nos preguntamos si las personas hipnóticamente susceptibles (HS) -es decir, aquellos son especialmente sensibles a los efectos de la hipnosis- son más propensos a las experiencias anómalo/paranormales en comparación con personas con baja susceptibilidad hipnótica. Kumar y Pekala (2001) evaluaron la hipnotizabilidad y las experiencias/creencias anómalas y encontraron fuertes indicadores de su relación. Debido a que los individuos altamente susceptibles a la hipnosis experimentan un aumento en la alteración subjetiva de la experiencia en general, y un aumento de la experiencia atencional en relación a individuos con puntuaciones de baja y mediana hipnotizabilidad, es razonable sostener que las personas muy sugestionables puedan ser más propensas a tener experiencias inusuales (paranormales o anómalas en general) (Kumar y Pekala, 1989; Pekala y Kumar, 1987, 1988) y que incluso podría haber una relación entre puntuaciones altas en susceptibilidad hipnótica y habilidades extrasensoriales.

Otros estudios encontraron que las experiencias paranormales correlacionan con hipnotizabilidad (Nadon y Kihlstrom (1987) y creencias paranormales (Wagner & Ratzeburg, 1987), usando la Escala Grupal de Susceptibilidad Hipnótica de Harvard (Shor y Orne, 1962). Richards (1990) correlacionó la puntuación de la Escala Harvard con varios tipos de experiencia psíquica, pero las correlaciones eran bajas o marginalmente significativas, lo cual sugiere que la susceptibilidad hipnótica o la propensión a la fantasía podrían igualmente explicar la ocurrencia de tales experiencias psíquicas.

Ha habido poca investigación que evalúe los efectos de las puntuaciones altas de susceptibilidad hipnótica como una medida diferencial entre aciertos y no aciertos en pruebas de percepción extrasensorial, al margen de otros estudios que examinaron la actuación de personas muy susceptibles durante la hipnosis. Ryzl (1976a, 1976b) consiguió una puntuación de percepción extrasensorial bastante exitosa, con casi el 10% de sus participantes, cuando usaba un método hipnótico y una técnica de "entrenamiento psi" particular. También es muy posible que Ryzl estuviera trabajando con un subconjunto de individuos hipnóticamente muy susceptibles, aunque no hizo ninguna evaluación formal de hipnotizabilidad.

La historia de la relación entre la hipnosis y psi es bastante controvertida. El primer meta-análisis de Schechter (1984) y una década más tarde de Stanford y Stein (1994) encontraron resultados psi exitosos después de una inducción hipnótica en comparación con una condición de control. Pero May, Banyai, Vassy, y Faith (2000) no encontraron ninguna correlación positiva entre psi y la hipnotizabilidad en un experimento de visión remota.

Más recientemente, Tressoldi y Del Prete (2007), que replicaron los resultados de un experimento anterior (Del Prete y Tressoldi, 2005), encontraron una puntuación significativa de psi en las primeras dos sesiones de hipnosis y correlaciones débiles a moderadas entre las puntuaciones de psi y rasgos de personalidad, tales como absorción y transliminalidad, que también se han encontrado relacionadas con experiencias anómalas. Cardeña, Marcusson-Clavertz y Wasmuth (2009) no encontraron ningun efecto precognitivo para la hipnotizabilidad, pero los individuos muy hipnotizables que puntuaban bajo en disociación diferían significativamente entre quienes puntuaban alto en disociación y baja hipnotizabilidad. Estos resultados demuestran que se puede usar grupos seleccionados, aunque sugieren que la disociación puede mediar los efectos de la hipnotizabilidad en la manifestación de psi.

El objetivo de este breve análisis es determinar si dos grupos de individuos -con baja y alta susceptibilidad a la hipnosis (SH)- tienen puntuaciones psi diferenciales. Hipotetizamos que hay una relación entre puntuaciones altas de susceptibilidad hipnótica y el número de aciertos psi de los participantes, de manera que a mayor SH, más aciertos psi.


METODO

Participantes

La muestra consistió en 101 participantes (69 mujeres y 32 varones), con alto nivel educativo y creyentes en psi. Sus edades oscilaban entre 18 y 72 años (Media = 47,81; SD = 12,14). La mayoría indicó haber tenido experiencias personales de psi (93,5%). El setenta y ocho por ciento de los participantes tenían algún tipo de entrenamiento en técnicas de relajación y meditación, u otras técnicas de atención interna. Los participantes fueron reclutados mediante un anuncio publicado en internet (www.alipsi.com.ar)

Información a los Participantes

Los ensayos experimentales tuvieron lugar una vez por semana, durante dos horas, bajo la modalidad de talleres no arancelados, organizados en el Instituto de Psicología Paranormal (IPP) de Buenos Aires bajo la conducción de Alejandro Parra (AP) y Juan Carlos Argibay (JCA). En total, atendieron los talleres más de un centenar de personas, en grupos reunidos durante un período de dos años (2004-2006). Cada grupo estaba formado por entre 5 a 10 participantes (Media = 8), quienes recibieron información acerca del objetivo de las pruebas administradas, pero no de las hipótesis. Con el objeto de crear un ambiente informal, cálido y amigable, los autores respondieron todas las dudas de los participantes antes de las pruebas. También se administró un número de pruebas psicológicas y personalidad, que serán publicadas más adelante.

Después de la inducción hipnótica usando la escala de Harvard, los participantes completaron los 11 ítems (menos el último, amnesia post-hipnótica), y luego se administró la prueba de percepción extrasensorial. Los participantes firmaron un consentimiento informado. La participacion en el taller fue voluntaria, y todos los datos colectados fueron tratados en forma confidencial.


Escala de Susceptibilidad Hipnótica

Se utilizó la Escala Grupal de Susceptibilidad Hipnótica de Harvard -Formulario A (Shor y Orne, 1962), que evalúa el nivel de hipnotizabilidad cuando los participantes son evaluados en grupos. Es un método conductal en que los participantes, después de recibir la inducción hipnótica, evaluan sus respuestas con una escala tipo de Lickert de autoevaluación (1-5) de once puntos. Se utilizó la versión en español traducida originalmente del inglés (Lamas, del Valle-Inclán, Blanco, y Díaz, 1989). La inducción se grabó en un CD de 46:32 minutos de duración, en español argentino, y todos los participantes fueron sometidos a la misma inducción.


Prueba de Percepción de Extrasensorial

Las imágenes-objetivo provenian de un clip-art en CD, seleccionadas al azar de un grupo de dos mil imágenes bien diferenciadas con motivos tales como animales, gente haciendo tareas, paisajes, símbolos religiosos, paisajes, y dibujos animados humorísticos. Las imágenes fueron impresas en papel fotográfico. Mediante un procedimiento de doble ciego (ambos experimentadores no conocían los objetivos), cuatro imágenes fueron aleatorizadas y seleccionadas antes de ambos ensayos por el co-investigador JV. En su casa, JV seleccionaba las imágenes para cada participante y preparó 260 paquetes. Cada paquete contenía cuatro imágenes, tres señuelos y la imagen objetivo. Se emplearon dos paquetes por sujetos (para cada ensayo).

Luego, JV entregó los paquetes a JCA. Antes cada sesión, JCA entregaba a AP los paquetes con sólo dos imágenes-objetivo para cada participante (los señuelos quedaban en poder de JCA). AP, que estaba en contacto con los participantes durante la sesión experimental, no estaba en conocimiento de las imágenes objetivo que el co-experimentador había colocado en cada paquete. Por su parte, JCA y JV hicieron un listado del orden de imágenes-objetivo que mantuvieron aislados.

Todos este procedimiento fue empleado por cinco razones: 1. Las imágenes eran facilmente categorizables, 2. facilitaba el procedimiento de aleatorización mediante un programa en PC, 3. las imágenes-objetivo se caracterizaban por su diversidad y la valencia visual como para ser un objetivo atractivo para un experimento de PES, (4) el procedimiento evitaba cualquier indicio sensorial (visual), y (5) el procedimiento evitaba cualquier manipulación del objetivo, especialmene durante el procedimiento de obsevación del objetivo (emisión psi) y juicio del objetivo por parte de los participantes.

Antes de la sesión experimental, las imágenes-objetivo fueron seleccionadas y apropiadamente ocultas en sobres opacos, prensadas en forma de "emparedado" mediante dos cartones para evitar marcas en el papel a través del sobre. Luego, se colocaba la imagen objetivo dentro del cerrado y sellado con pegamento por JCA. Se utilizó una imagen objetivo por cada participante. Ambos ensayos se realizaron secuencialmente, el primer ensayo y luego el segundo. Al finalizar cada ensayo, se llevó a cabo el procedimiento de juicio.

Los participantes permanecieron sentados en una silla. AP entregaba el sobre sellado con la imagen-objetivo a cada participante. Las instrucciones dadas fueron "permanecer en silencio durante la prueba a ojos cerrados y esperar unos pocos segundos para que las imágenes mentales se presenten." AP permaneció en silencio en la sala, observando, durante toda la sesión experimental. Se emplearon dos formularios para cada participante. Una vez que cada participante completaba el primer juicio, iniciaba el procedimiento de evaluación. Luego continuaba el segundo ensayo y su correspondiente evaluación.

Al finalizar la ambos ensayos de PES, AP entregaba los sobres y formularios completos de todos los participantes a JCA, quien abría cada sobre y re-ordenaba la imagen-objetivo junto a otras tres imágenes señuelo (no objetivo) en una secuencia aleatoria antes de devolverlos a la AP. Luego, AP distribuía los sobres con las cuatro imágenes, un objetivo y tres señuelos, a cada participante, quienes veían los cuatro objetivos potenciales. Los participantes evaluaron cada imagen describiendo las similitudes que encontraban entre cada imagen y sus impresiones mentales. Se asignó un puntaje 1 a la imagen que los participantes consideraban como la mejor correspondencia entre su impresión subjetiva y la imagen como potencial objetivo a un puntaje de 4 a la imagen que el participante sentía que tenía menos o ninguna coincidencia con su impresión.


Aleatorización

Mediante un programa on-line (www.randomizer.org) se generaron una serie de números para seleccionar 260 imágenes del CD, y para ordenar aleatoriamente las imágenes-objetivo de ambos ensayos en poder de JCA. La distribución de las cuatro imágenes (imagen objetivo y tres señuelos) también fue aleatorizada, para evitar la preferencia de la posición que ocupa la imagen objetivo durante el procedimiento de evaluación.


Susceptibilidad Hipnótica

Para dividir la muestra en dos grupos de Baja SH y Alta SH se aplicó el siguiente criterio: Participantes que obtenían de 75 a 99% de SH en la Escala Harvard fueron clasificados como grupo "Alta SH" (N = 20; 20%), y participantes que puntuaron de 1 a 25% fueron clasificados como grupo "Baja SH" (N = 81; 80%).

También se utilizó el siguiente criterio para dividir la muestra en tres grupos de aciertos: (1) Sin aciertos en dos pruebas (N = 61, 60,4%), (2) Un acierto en dos pruebas (N = 30, 29,7%), y (3) dos aciertos en los dos ensayos (N = 10, 9,9%).


RESULTADOS

TABLA 1:
FRECUENCIA Y PORCENTAJE DE ACIERTOS
PARA GRUPOS DE ALTA Y BAJA SUSCEPTIBILIDAD HIPNÓTICA

Susceptibilidad Hipnótica
Aciertos psi * Baja Alta TOTAL
Sin acierto 54 (66.7%) 7 (35%) 61 (60.4%)
Un acierto 20 (24.7%) 10 (50%) 30 (29.7%)
Dos aciertos 7 (8.6%) 3 (15%) 10 (9.9%)
TOTAL 81 20 101

* Uno representa el rango de alta coincidencia, cuatro representa baja o ninguna.

La diferencia entre los tres grupos (sin acierto, un cierto, y dos aciertos) también fue significativa X2 (gl = 2) = 6.78, p = .017, a una cola).



TABLA 2:
DIFERENCIAS ENTRE DOS DIFERENTES GRUPOS ALTA Y BAJA SUSCEPTIBILIDAD HIPNÓTICA

Grupos Ensayos por
participante
MEA* Media t gl p
Baja SH 2 .50 .42 1.11 80 .27 (dos colas)
Alta SH 2 .50 .80 1.93 19 .03 (una cola)

* Media Esperada por Azar

También se examinó la actuación de ambos grupos (Baja y Alta susceptibilidad hipnótica) en las pruebas de percepción extrasensorial, utilizando un test de t para una muestra. El grupo de alta susceptibilidad hipnótica, logró mejores resultados que el grupo de baja susceptibilidad hipnótica, que puntuó en el nivel del azar.


DISCUSIÓN

Hemos llevado a cabo dos ensayos de PES bajo la modalidad de respuesta libre para determinar si dos grupos de SH (alta / baja) puntuaba de manera diferente en términos de aciertos psi. Nuestra hipótesis era que había una relación entre la puntuación alta de sujetos muy susceptibles a la hipnosis y el número de aciertos psi de estos participantes. Esta hipótesis fue confirmada: La diferencia entre los tres grupos (sin acierto, un acierto y dos aciertos) fue significativa (p = .017, a una cola). El grupo de alta SH obtuvo mejores resultados que el grupo de baja SH, que puntuó en el nivel del azar (p = .03, a una cola).

Quizá los individuos altamente susceptibles que dicen haber experimentado una variedad de fenómenos parapsicológicos, como esta muestra de creyentes en lo paranormal, serían los candidatos potenciales para manifestar psi en una situación experimental. Si este estudio se replica, sugerimos emplear un procedimiento para encontrar individuos con alta susceptibilidad hipnótica, creencia en psi, y haber tenido una variedad de experiencias previas con psi, o lo paranormal en general.

El tamaño del efecto asociado al fenómeno psi podría aumentar, especialmente si se utiliza la hipnosis. Estudios previos (Kumar & Pekala, 1988c, 1989; Pekala y Kumar, 1987-88, 1989) también sugieren que la hipnosis potencia las alteraciones de la experiencia subjetiva de sujetos susceptibles y facilita el rendimiento en pruebas psi (Schechter, 1984). El uso de la hipnosis con esta población propensa a fenómenos psi espontáneos puede ser una fructífera línea de investigación parapsicológica.


AGRADECIMIENTOS

Agradecemos a la Fundaçao BIAL su auspicio financiero para la ejercución de este proyecto.

Referencias

Cardeña, E., Marcusson-Clavertz, D., & Wasmuth, J. (2009). Hypnotizability and dissociation as predictors of performance in a precognition task: A pilot study. Journal of Parapsychology, 73, 137-158.

Del Prete, G., & Tressoldi, P. E. (2005). Anomalous cognition in hypnagogic state with OBE induction: An experimental study. Journal of Parapsychology, 69, 329-339.

Kumar, V. K., & Pekala, R. J. (1988). Hypnotizability, absorption, and individual differences in phenomenological experience. International Journal of Clinical and Experimental Hypnosis, 36, 80-88.

Kumar, V. K., & Pekala, R. J. (1989). Variations in phenomenological experience as a function of hypnosis and hypnotic susceptibility: A replication. British Journal of Experimental and Clínical Hypnosis, 6, 17-22.

Kumar, V. K., & Pekala, R. J. (2001). Relation of hypnosis specific attitudes and behaviors to paranormal beliefs and experiences: A technical review. In J. Houran & R. Lange (Eds.), Hauntings and poltergeists: Mullidisciplinary perspectives (pp. 260 279). Jefferson, NC: McFarland.

Kumar, V. K., & Pekala, R. J. (1989). Variations in phenomenological experience as a function of hypnosis and hypnotic susceptibility: A replication. British Journal of Experimental and Clinical Hypnosis, 6, 17 22.

Lamas, J. R., Valle-Inclán, F., Blanco, M. J. & Albo-Díaz, A. (1989). Spanish norms for the Harvard Group Scale of Hypnotic Susceptibility, Form A. International Journal of Clinical and Experimental Hypnosis, 37, 264-273.

May, E., Banyai, L., Vassy, Z., & Faith, L. V. (2000). Hypnotic susceptibility as a predictor of anomalous cognition performance [Abstract]. Third Simpósio da Fundação Bial: Aquí e Além do Cérebro, p. 417.

Nadon, R., & Kihlstrom, J. F. (1987). Hypnosis, psi, and the psychology of anomalous experience. Behavioral and Brain Sciences, 10, 597-599.

Pekala, R. J., & Kumar, V. K. (1987 88). Phenomenological variations in attention across low, medium, and high susceptible subjects. Imagination, Cognition and Personality, 7, 303 314.

Richards, D. G. (1990). Hypnotic susceptibility and subjective psychic experiences. Journal of Parapsychology, 54, 35-52.

Ryzl, M. (1967a). Review of some ESP experiments with a hypnotically prepared subject. Journal of the American Society of Psychosomatic Dentistry and Medicine, 23, 40 53.

Ryzl, M. (1967b). Review of some ESP experiments with a hypnotically prepared subject: Appendix. Journal of the American Society of Psychosomatic Dentistry and Medicine, 23, 75 81.

Schechter, E. I. (1984). Hypnotic induction vs. control conditions: Illustrating an approach to the evaluation of replicability in parapsychological data. Journal of the American Society for Psychical Research, 78, 1 27.

Shor, R. E., & Orne, E. C. (1962). Harvard Group Scale of Hypnotic Susceptibility. Palo Alto, CA: Consulting Psychologists Press.

Stanford, R. G., & Stein, A. G. (1994). A meta analysis of ESP studies contrasting hypnosis and a comparison condition. Journal of Parapsychology, 58, 235 269.

Tressoldi, P., & Del Prete, G. (2007). ESP under hypnosis: The role of induction instructions and personality characteristics. Journal of Parapsychology, 71, 125 137.

Wagner, M. W., & Ratzeburg, F. H. (1987). Hypnotic suggestibility and paranormal belief. Psychological Reports, 60, 1069 1070.


 
1 Una versión abreviada de este estudio fue originalmente presentado bajo el título: Two trials of a free-response ESP test in two groups of hypnotic susceptibility low/high scores: A pilot study. En M.Kitenis (Ed.), Proceedings of the 54th Annual Convention of the Parapsychological Association (p. 19). Curitiba, Parana, Brazil.

* Doctor en psicología y docente universitario. Es Presidente del Instituto de Psicología Paranormal, Buenos Aires. Es Presidente de la Parapsychological Association por el periodo 2011-2013. Tiene interés en la investigación clínica y experimental de las experiencias psicológicas anómalas, estados no ordinarios de conciencia, y psicodiagnóstico diferencial entre perturbación psicológica y experiencias anómalas.

** Psicólogo de orientación clínica cognitivo-conductual. Es docente universitario en Metodología de la Investigación y Estadística. Ha llevado a cabo investigaciones en relación a personalidad (especialmente sobre Neuroticismo, Extraversión y Psicoticismo), ideas obsesivas, depresión, conductas de temor, conducta sexual, etc. Se ha interesado en el desarrollo y adaptación de instrumentos psicométricos.




Historia

REFLEXIONES ACERCA DE LOS MAGOS Y SU RELACIÓN CON LA INVESTIGACIÓN PSÍQUICA: REFLEXIONES DESDE LA SOCIOLOGÍA Y LA PSICOLOGÍA SOCIAL*

Marcello Truzzi**

Marcello Truzzi
Marcello Truzzi
Los mundos de la investigación psíquica y de la magia1 tienen mucho en común, pero también son fundamentalmente diferentes. Los profesionales de ambos territorios están limitados a diferentes reglas o normas sociales. Si bien por lo general se los considera similares, estos dos mundos son altamente complejos y diferentes entre si. Ambos contienen elementos, tanto de ciencia como de recursos económicos. Ambos nuclean tanto profesionales como amateurs, científicos y sensacionalistas, académicos y aficionandos, gente honesta y charlatanes. Como veremos, son mundos en donde los buscadores de la verdad en torno a estos temas, los "buenos," a veces se convierten en "malos," y viceversa. En ambos mundos, no todo es lo que parece. Mucho se ha escrito sobre el problema del fraude y los sesgos perceptuales en la investigación psíquica, pero lo fundamental aqui es demostrar que existen problemas vinculados con la falta de autenticidad, similar a la que se encuentra en algunos de los críticos más respetables.

Richard de Mille (1979) nos enseña que debemos saber distinguir entre lo que él llama "autenticidad" y "validez." La primera se refiere a la sinceridad y a las credibilidad de un proponente, la otra se refiere a la realidad de un fenómeno que se pretende como tal. Una de las dificultades para estudiar a los psíquicos, a los investigadores psíquicos, y a los magos, tiene que ver con esto. Hay muchos que pretenden presentar pruebas, pero pocas parecen ser auténticas. Incluso los psíquicos deshonestos que creen en psi, asi como los psíquicos profesionales, también tenemos a los críticos abiertos a la posibilidad de psi. Ellos, al menos privadamente, admiten cierto grado de creencia de lo que públicamente niegan. Este informe bordea el problema de la autenticidad. El resultado es siempre una actividad engañosa, y sabemos de muchos que parecen ser capaces de disimular ideas contradictorias incluso y especialmente, acerca de si mismos.

A diferencia de la literatura de investigación psíquica, la mayor parte de la cual está accesible al público, la literatura sobre magia ha estado tradicionalmente escondida para aquellos fuera del círculo de practicantes de la magia. Los magos protegen sus secretos profesionales; a veces los mantienen celosamente lejos del alcance de cualquier otro mago. Hasta hace poco, los secretos del oficio del mago se transmitían vía una iniciación o por tradición oral; incluso hoy día algunos de los más grandes secretos (que los magos llaman el "verdadero funcionamiento") siquiera se han guardado en los archivos de algunos magos. La mayor parte de los procedimientos de la magia se publican en centros especializados y se distribuyen solamente entre los miembros de las entidades mágicas (por ejemplo, International Brotherhood of Magicians, Society of American Magicians, the Magic Circle, entre otras) e intentan limitar su accesibilidad al público en general. Muchas de estas publicaciones, sobretodo las revistas de magia, tienen comentarios (a veces bien informados y en forma amable) en materia de investigación psíquica, pero la mayor parte de la cual los estudiantes de parapsicología nunca leen. Por lo general, estos trabajos no se venden en librerías (la mayoría son publicaciones para iniciados). No obstante, con el surgimiento de nuevas unidades acádemicas, muchas de estas publicaciones restringidas ahora se pueden encontrar en algunas pocas librerías especializadas (casi siempre cerca de revistas y artículos de teatro para coleccionistas) y existen unos pocos catálogos para investigadores que recién se inician (p. ej., Coleman, 1987; Jay, 1990; Price, 1929, 1935; Tigner, 1989).

Como ocurre en la investigación psíquica, los estudios de magia abarcan desde los más desinformados hasta los más completos. Debido a que el estudio de la magia y su historia no está incorporada a ninguna carrera académica especializada, algunos autores escribieron su mayor parte, por lo general interesante, pero bastante vaga. Uno de los principales problemas es con quien aprender cuando no se encuentran escritores serios y respetables. Incluso algunos de los más reconocidos libros de magia han sido duramente criticados por sus errores, pero normalmente esto se hace en privado y hay que leer a determinados comentaristas para saber cuáles son estos errores.

El grupo Magic Collectors Association, y su publicación Magicol, es un excelente medio de información, así como también libros y artículos de importantes bibliotecas privadas. Debemos prestar suma atención a los autores de la historia de la magia, como Milbourne Christopher, Harry Price (cuyos libros se encuentran en la Universidad de Londres), Sidney W. Clarke, Henry Ridgely Evans, Harold Adrian Smith (cuyos artículos aparecían citados en la revista Tops, entre los años 1936 a 1940 (se pueden encontrar en la biblioteca de la Universidad de Brown; ver Wilmeth y Stanley, 1989), John Mulholland (cuya biblioteca es propiedad de David Copperfield), Trevor H Hall, Eric J. Dingwall, Edgard Heyl, y S. H. Sharpe (todos fallecidos), y David Price, Robert Gill, y John Booth (aún vivos). Quizás el trabajo más profesional es el de Edwin A. Dawes (que escribe una columna de historia para la revista Magic Circular) y Ricky Jay (que escribe y publica en el Jay's Journal of Anomalies).

Muchos escritos de magos o psíquicos (que se pueden conseguir en librerías) han venido siendo duramente criticados o desacreditados, especialmente los de los magos afiliados a organizaciones escépticas, como el Committee for the Scientific Investigation of Claims of the Paranormal (CSICOP) (ver Hansen, 1992) y esto ha eclipsado a los escritos más favorables o, al menos, agnósticos -pero menos conocidos- de otros magos. Recientemente, hay algunos parapsicólogos que se han preocupado seriamente por estudiar la literatura mágica y que han escrito trabajos importantes mostrando otros estereotipos del mago en su rol de refutador y al parapsicólogo como un ingenuo, víctima de un engaño. Estos nuevos investigadores psíquicos, que parecen estar bien informados de la metodología de la magia, están ayudándonos a tender un puente entre ambas culturas (ver especialmente, Auerbach, 1983, 1987, 1988; Hansen, 1984, 1985a, 1985b, 1986, 1987, 1988, 1989, 1990a, 1990b, 1992a, 1992b; Haraldson y Wiseman, 1995; Morris, 1982, 1986; Werry, 1980; Wiseman, 1991, 1992, 1995; Wiseman, Beloff y Morris, 1992; Wiseman y Haraldson, 1995; Wiseman y Morris, 1994, 1995a, 1995b).

Una última observación antes de continuar: así como hay literatura sensacionalista sobre temas paranormales (que van desde tabloides a artículos escritos para lectores de divulgación por quienes dicen llamarse "expertos") también existe un gran efectismo e investigaciones de pésima calidad en el mercado de ciertos autores de magia. Estos escritos, en su mayoría, son históricamente incorrectos y contienen más publicidad que verdad. Y en el caso de algunos magos refutadores, si examinamos sus argumentos bien de cerca, no dejan de ser -en realidad- pseudo-refutadores.


MAGOS E INVESTIGADORES PSÍQUICOS

Aunque la relación entre los magos y los investigadores psíquicos es compleja, los investigadores psíquicos deben pedir el auxilio de los magos para detectar fraudes. El Dr.Eric J Dingwall, uno de los más veteranos miembros del London'd Magic Circle y pionero de la investigación psíquica, hasta el momento de su fallecimiento, en 1986, dijo:

Ver a un hombre de ciencia en una seánce a veces permite darnos cuenta de cuán pobre es la formación científico cuando hace estudios objetivos o hace un juicio equilibrado... En este campo, el investigador debe... tener conocimiento de los principios de la magia, el fraude y las técnicas de misdirection [distracción perceptual] que compete a la psicología. (Dingwall, 1962, p. 207)
Todavía hay muchas personas, incluyendo investigadores psíquicos y magos, que creen que las investigaciones psíquicas y la magia son territorios antagónicos. Martin Gardner sostiene que el mago es el "verdadero enemigo" de los parapsicólogos (Gardner, 1983, p. 18). Gardner quizá sea el más fuerte defensor de esta posición:

¿Acaso estoy diciendo que todos los investigadores psíquicos deberían estar entrenados en magia o buscar el auxilio de los magos antes de testificar a favor de los milagreros? Eso es exactamente lo que digo. Hasta el científico más eminente, si ignora los procedimientos elementales de la magia, puede caer en manos de un hábil charlatán (Gardner, 1983, pp. 18-19).
Este cuadro de situación se debe, aparentemente, a la popularidad de unos pocos magos (incluyendo el mismo Gardner) que han actuado como críticos frente a la opinión pública. Muchas personas conocen las luchas anti-espiritistas del Harry Houdini que tuvieron una enorme repercusión gracias a la forma en que se desenmascararon a los médiums fraudulentos. Houdini siguió la tradición de John Nevil Maskelyne, quien junto a su amigo, George Alfred Cooke, demostraron y luego reprodujeron los fenómenos de los hermanos William Henry Harrison e Ira Davenport en 1865. Cuando Maskelyne publicó Modern Spiritualism en 1876, se ganó la fama de experto en el desenmascaramiento público del fraude del médium y actuó como perito del Juez en la Corte que juzgó los delitos del famoso médium americano Henry Slade (que murió en 1905) por sus efectos fraudulentos. Desde entonces, muchos magos hicieron demostraciones públicas de los médiums espiritistas como parte de sus shows teatrales, y naturalmente, dio la impresión de que los magos eran enemigos acérrimos de lo sobrenatural. Durante muchos años, Joseph Dunninger fue sucesor de Houdini como refutador público de los espiritistas, y actualmente el último sucesor en este linaje es James ("El Asombroso") Randi.

Martin Gardner sostiene que el mago es el verdadero enemigo de los parapsicólogos.
Martin Gardner sostiene que el mago es el "verdadero enemigo" de los parapsicólogos.

En 1981, con motivo de la convención anual de la Parapsychological Association, administré una encuesta entre sus miembros donde les pregunté si estaban o no de acuerdo con la siguiente afirmación: "La mayoría de los magos creen en la realidad del psi." Sólo el 3% de los encuestados dijo estar de acuerdo (el 47% estuvo en desacuerdo y un 50% no estaba ni de acuerdo ni en desacuerdo). La realidad acerca de cómo los magos ven este tema parece ser bastante diferente. En una encuesta llevada a cabo por Pearl Birdsell (1981), en un encuentro de magos en California, Birdsell encontró que el 82% expresó creer en la PES; Lutz Muller (1980) encontró la misma respuesta en el 72.3% de los magos encuestados en el Germany Magic Circle, quienes expresaron que probablemente psi es real.

Ahora bien, si las experiencias psi son irreales uno puede esperar que los magos especializados en trucos que simulan eventos psi sean quienes tienen una actitud hostil hacia la parapsicología, pero la verdad parece revelar lo contrario. En 1979 administré una encuesta entre los miembros de la Psychic Entertainers Association (PEA), un grupo internacional dedicado a imitar efectos psi, y obtuve resultados sorprendentes. Sus miembros indicaron que el 87% creía que la PES "verdaderamente existe" y el 25% señaló que creía que la "ciencia había demostrado la existencia de la percepción extrasensorial." Sin embargo, de un tiempo a esta parte, la creencia en psi ha declinado bastante entre los miembros de la PEA. En una nueva encuesta que realizé en 1993, encontré respuestas "sí" en un 47% a la pregunta "¿cree usted en la PES?, un 20% de respuestas "no sé," y 33% de respuestas de "no" (Miller, 1993). No se puede comparar ambas encuestas, pero lo cierto es que PEA ha venido cambiando sustancialmente la composición de su membresía (desde 1993 se han incorporado más magos amateurs que profesionales), y no tengo más información del promedio de respuestas desde esta última encuesta (Truzzi, 1995a).

Comparándolo con los datos que la encuestadora Gallup en el público norteamericano, parece que los magos creen en la PES más que el promedio norteamericano. Por eso, cuando Richard Reichbart escribió que "la mayoría de los magos tienen una tendencia anti-psi" (1978, p. 170) en un artículo para el Journal of the American Society for Psychical Research ("Magic and Psi" [Magia y Psi]), estaba reflejando la visión general de los parapsicólogos, pero no la opinión real de lo que encontramos entre los magos.

Pese a esta malinterpretación, mi encuesta sobre los parapsicólogos mostró que el 92% estaba de acuerdo con la afirmación "los magos pueden jugar un rol positivo en parapsicología" y el 70% manifestó que "los magos deben consultar a los parapsicólogos para la administración de los tests a los psíquicos." Birdsell, a favor de los magos, encontró un 71% de respuestas positivas a la pregunta: "¿Cree usted que la comunidad cientifica ortodoxa debería aceptar y contribuir a la investigación parapsicológica?" De modo que hay muchas razones para creer que tanto los magos como los parapsicólogos deberían darse la oportunidad de trabajar juntos y de manera constructiva.

Antes que comienze esta cooperación, será necesario un poco de educación, tanto de los investigadores psíquicos como de los magos; ambos grupos padecen de un gran número de estereotipos erróneos -que el público comparte- acerca de la historia de la magia y los problemas involucrados con la parapsicología. Discutiré algunos hechos históricos y consideraciones sociológicas que, espero, podrán sorprender pero al mismo tiempo estimular nuevas apreciaciones de lo que necesitamos si es que hay alguna posible cooperación entre los magos y los investigadores psíquicos.


MULTI-DIMENSIONALIDAD Y MULTIPLICIDAD DE ROLES

Es común leer autores que distinguen entre cinco tipos de actores: médiums, psíquicos, mentalistas, magos e investigadores psíquicos. Actualmente conforman un continuo de roles sociales conceptualizados en forma pura (lo que los sociólogos denominan "tipo de constructo") pero que empíricamente se yuxtaponen. Los mediums son personas que dicen tener contacto con un mundo "sobrenatural" diferente. En Estados Unidos y en Inglaterra forman parte del movimiento espiritista y dicen comunicarse con personas desencarnadas. Los psíquicos, por otra parte, son personas que dicen tener poderes mentales inusuales, como la telepatía, la clarividencia, la precognición (constituyen lo que J.B. Rhine llamó percepción extrasensorial o PES) y la psicokinesis (acción de la mente sobre la materia o PK).

La mayoría de los parapsicólogos agrupan estas cuatro habilidades y las denominan psi. Los mentalistas son personas -por lo general magos- que se especializan en simular psi (son pseudo-psíquicos, sobretodo actores de teatro que asumen el rol de psíquicos legítimos). Son artistas cuyo propósito es entretener. Los magos son personas que tambié entretienen simulando hazañas imposibles; a veces incluyen efectos psi, e incluso fenómenos ocultistas, pero su auditorio entiende claramente que se trata de trucos e ilusiones. Los investigadores psíquicos (conocidos como parapsicólogos) tratan de examinar científicamente tales fenómenos o habilidades supra-normales. Los investigadores psíquicos van desde quienes realizan investigación de campo de relatos descriptivos (y anecdóticos) de fenómenos espontáneos hasta los parapsicólogos que experimentan en laboratorio en busca de fenómenos predictibles y repetibles.

Es importante distinguir entre lo que el sociólogo Ervin Goffman (1959), en términos teatrales, llamó presentaciones del Yo "en escena" y presentaciones del Yo "detrás de escena." Básicamente, distingue entre un yo público y un yo privado. Para cada uno, una persona puede estar en grupo (el Yo en escena) y el otro a solas (el Yo detrás de la escena). Por ejemplo, artistas como el "medium" contemporáneo Frances Willard o el "psíquico," ya fallecido, David Hoy (Godwin, 1974), estaban cerca de los magos y conocían bien sus trucos en actos públicos. Un mentalista que simula un fenómeno psi en privado podría creer que realmente es un psíquico, pero considera que su psi está muy poco desarrollado como para hacer una buena demostración.

Eusapia Palladino puede ser descrita como una medium-mixta. Si bien ha producido fenómenos paranormales genuinos, también lograba engañar cuando tenía oportunidad. De hecho, cuando Thurston fue testigo de la levitación de una mesa ofreció u$ 1.000 a cualquiera que pudiera probar que Palladino no podía levitar la mesa sin trucos ni fraude.
Eusapia Palladino puede ser descrita como una "medium-mixta". Si bien ha producido fenómenos paranormales genuinos, también lograba engañar cuando tenía oportunidad. De hecho, cuando Thurston fue testigo de la levitación de una mesa ofreció u$ 1.000 a cualquiera que pudiera probar que Palladino no podía levitar la mesa sin trucos ni fraude.

A veces los investigadores psíquicos describen a los médiums, como Eusapia Palladino, como "medium-mixtos," ya que si bien quizás haya producido fenómenos paranormales genuinos, también lograba engañar en toda ocasión que tuviera oportunidad. Muchos investigadores psíquicos afirmaban que Uri Geller, que usaba técnicas de prestidigitación, era un psíquico genuino. Otros, que públicamente actuaban como desenmascaradores en lo privado, quizá creían en lo paranormal (Harry Price particularmente llegó a acusar varias veces a Houdini de ésto). Otros investigadores psíquicos hacían pública su presunta objetividad científica, mientras que en privado actuaban como cómplices de los psíquicos a los cuales supuestamente estaban investigando (una acusación bastante injusta se hizo contra Hereward Carrington en relación a la médium E. Palladino). A veces también los espiritistas acusaban a los magos de poseer poderes mediúmnicos. Todas estas categorías y sus combinaciones son empíricamente posibles, pero por lo general, los roles públicos y privados de la mayoría de estas personas eran algo diferentes. He escuchado en privado a super-refutadores, como James Randi, expresar una visión menos dogmática de lo que se esperaría de un pronunciamento público, y de manera similar, algunos psíquicos conocidos admiten privadamente la posibilidad de que se haya interpretado erróneamente sus experiencias de una manera que -naturalmente- no reconocerían en público.

Si bien por lo general se piensa en los grandes magos-desenmascaradores como personas totalmente escépticas, de hecho, hay casos totalmente direrentes. Por ejemplo, Julian Proskauer, en uno de sus más virulentos libros anti-espiritistas (Spook Croks!),reconoce que "en escena se han dado fenómenos inexplicables" (Proskauer, 1932, p. 300). También, Joseph Dunninger, que creía sinceramente en la telepatía (Dunninger, 1944, 1956, 1974; Schuwarz, 1980), señalaba que "los verdaderos líderes de la magia profesional acuerdan unánimente que entre el 90 y el 95% de los médiums espiritistas son fraudulentos; y que el resto probablemente no lo sea." (Dunninger, 1935, p. 10). Aunque se rehusan llamar a estas anomalías residuales como "sobrenaturales" o "paranormales," incluso los super-refutadores admiten que existen al menos unos pocos fenómenos realmente inexplicables.

Otra dimensión importante que intersecta estas tipologías tiene que ver con la función que cumplen estas personas. Por ejemplo, algunos pueden ser amateurs o profesionales (o profesionales part-time). Pueden actuar en presentaciones teatrales y/o como consejeros privados. Pueden ser investigadores profesionales, o pueden combinar varias funciones. Un mago refutador puede aparecer en un escenario, pero también escribir monografías serias (como la de Milbourne Christopher). Una médium puede convertirse en investigadora psíquica (como Eileen Garrett y su Parapsychology Foundation), o en psíquico (como Keith Harary). Un mentalista también puede convertirse en psíquico (como David Hoy). El mentalista Joseph Dunninger (que luego se incorporó a la Scientific American Committee on Psychic Research) era al principio un investigador psíquico serio que llegó a ser presidente de la organización que él mismo tituló Universal Council for Psychic Research (Anónimo, 1944) (pero de la que llegó a ser el único miembro). Pretendía haber conseguido los códigos secretos (pero que nadie más que él comprendía) de Edison, Conan Doyle, y Houdini, supuestamente dictados a Dunninger antes de sus muertes, para que pudiera utilizarlos para experimentar con los mediums (Kahn, 1941). Lo importante aquí es recordar que estos roles no son tan simples como parece, de hecho son multidimensionales. El estereotipo común de "magos vs. mediums" oscurece más el fenómeno que lo que realmente pone en evidencia.

Resulta interesante el hecho de que muchos investigadores psíquicos conocieran técnicas mágicas. Los libros The Physical Phenomena of Spiritualism: Fraudulent and Genuine [Los fenómenos psíquicos del espiritismo: Fraude y realidad] de Hereward Carrington (1907); Behind the Scenes with the Mediums [Detrás de escena con los médiums] de David P. Abbott (1916), Telepathy: Genuine and Fraudulent [Telepatía: Fraude y realidad] de W. W. Baggaly (1917); Revelations of a Spirit Medium [Revelaciones de un médium espiritista] de Harry Price y Eric J. Dingwall (1922); How to go to a Medium [Cómo ser un médium] de Dingwall (1927) son buenos ejemplos de investigaciones psíquicas y su relación con la magia, y el hecho de que ellos mismos fueron miembros de fraternidades mágicas. Hoy, los investigadores psi Daryl J. Bem, Richard Wiseman, George Hansen, Loyd Auerbach y yo hemos estados bastante involucrados en la comunidad mágica, y muchos otros parapsicólogos (Stanley Krippner, Russel Targ, y Arthur Hastings) también han sido magos en su juventud.

Algo que normalmente se olvida es la excelente comunicación que siempre ha habido entre magos e investigadores psíquicos. Por ejemplo, en los primeros ejemplares del Journal of the Society for Psychical Research se publicaban varios comentarios y artículos dirigidos a magos, particularmente los del Professor Hoffmann (pseudónimo de Angelo J. Lewis). Howard Thurston (1929) escribió en su libro Modern Magic [Magia Moderna] "después de cincuenta largos años, esta es la única obra autorizada sobre el tema" (p. 46). Las primera investigaciones psíquicas estaban plagadas de excelentes artículos que desenmascaraban mediums fraudulentos (Baggally, 1912; Besterman, 1928; Bird, 1927; Carrington, 1924,1926; Davey, 1888; Davis, 1910; Drebs, 1901, 1916; Feilding, 1922; Hodgson, 1884; Hyslop, 1919; Pedley, 1899; Price, 1926) así como cuando presentaban artículos sobre el problema de los errores de observación (Besterman, 1932; Davey, 1887; Fraser-Harris, 1934; Hodgson, 1886-87, 1892; Massey 1878, 1886). Si bien es cierto que la mayoría de los investigadores psíquicos actuales no sabe mucho acerca de magia, debería haber un mayor intercambio de conocimientos e información que la que hay respecto a la situación actual tal como la plantean los críticos de la investigación psíquica.

La mayoría de los parapsicólogos rechaza al mentalismo y consideran falsos a psíquicos como Uri Geller. Incluso Geller en Inglaterra ofreció u$1000 a cualquier posible sucesor que pudiera doblar una cuchara monitoreado por cualquier científico con cámaras de TV, como él lo hizo.
La mayoría de los parapsicólogos rechaza al mentalismo y consideran falsos a psíquicos como Uri Geller. Incluso Geller en Inglaterra ofreció u$1000 a cualquier posible sucesor que pudiera doblar una cuchara monitoreado por cualquier científico con cámaras de TV, como él lo hizo.

Muchos magos han trabajado en algún momento de sus vidas, en el "mundo psíquico". Algunos han actuado como mediums, psíquicos, mientras que otros lo han hecho bajo la forma de adivinos (Truzzi, 1995a). Incluso el mago refutador James Randi, al comienzo de su carrera, trabajó en una feria como el presunto psíquico Prince Ibis y escribía el horóscopo de una revista como columnista (Anónimo, 1987). En 1950 Randi declaró a los medios de prensa de Toronto que podía predecir el futuro (Hicks, 1950), que poseía "una combinación de telepatía, clarividencia, y poderes proféticos" y que "a los nueve años tuvo el primer 'anuncio' de que poseía poderes de percepción extrasensorial" (Hicks, 1950b).

Hay muchos problemas de información que aparecen en el detrás de la escena, y también mucho chismorreo. Algunos psíquicos han estado en contacto con el mundo de la magia y otros han tenido apariciones regulares en radio y TV, o tienen conexiones en el mundo del espectáculo, como en el caso de los mentalistas, quienes en su mayoría tienen contacto regular con el mundo de la magia. El primer manager de Uri Geller, Yasha Katz, que luego reveló que Geller lo usaba para emitir códigos secretos desde el auditorio, había hablado con Randi mucho antes que éste hiciera públicas sus denuncias contra Geller. Este tema se complicó a causa de que Katz luego se contradijo y negó haber hecho esta "confesión" (Geller & Playfair, 1986, pp. 164-165).

Por lo general, los magos saben cuales son los problemas que existan en el "detrás de la escena" de otros artistas en el mundo del espectáculo cuando trabajan con un "psíquico", pero que no están dispuestos a traicionar o desacreditar a su colega. Muchos magos también pueden ver cuando un psíquico intenta reproducir sus "movimientos" ante terceros como una evidencia de manipulación fraudulenta. Muchos magos dicen que pueden "sacar a un 'mago' para poner a otro en su lugar."

Un caso clásico es el que ocurrió entre Houdini y la medium "Margery" (la Sra. Crandon). Houdini la "desenmascaró" cuando encontró una pequeña regla en un gabinete, con la cual quizá haya podido simular ante testigos algunos efectos espiritistas. Se llegó a acusar a Houdini mismo de colocar esa regla (Gresham, 1959), otros lo defendieron (Christopher, 1970), pero los magos presentan el caso de otro modo, más complejo. Según ciertos comentarios, Houdini habría descubierto que la Sra. Crandon contaba con la cooperación de su experimentador cuando tomaba sus manos y las colocaba entre los muslos de la médium.

Semejante situación llevó al experimentador a optar de dos modos: Primero, hacerlo público, en cuyo caso hubiera desatado un terrible escándalo donde, al fin y al cabo, nadie le hubiera creido. O, segundo, podría haber cooperado y esperado alguna retribución "placentera." Supuestamente, Houdini habría sabido del método de Margery y sabía como ella hacía la artimaña. Puesto que Houdini no quería estar involucrado en ningun escándalo sexual (recordemos que en aquella época dominaba la moral victoriana), convencido que estaba tratando con una charlatana, él mismo le habría colocado la regla para desenmascarar definitivamente -pero de manera elegante- a la médium, de la misma forma en que muchos policías atrapan a criminales "famosos." Dingwall (1983), que conocía a Margery y a Houdini, dudaba de la veracidad de esta historia, pero otros historiadores de la magia la encontraron interesante.

Hay muchas anécdotas de los métodos indirectos para "tratar" a personas que saben engañar pero para quienes el fraude es una evidencia pública inadecuada. Por ejemplo, he contado el caso en donde un mago había descrito las fallas en varios experimentos psi conocidos. El mago creia que no iba a poder descubrir la fuente de "error" de estos experimentos sin comprometer necesariamente a su informante, otro mago. Entonces, el mago confeccionó un tipo de experimento totalmente diferente por el cual iba a poder reproducir el efecto, diciendo que había ocurrido otra clase de "error". Los experimentadores psi habian presentado evidencias para demostrar que el supuesto "error" no podía haberse cometido -el mago sabía que no podía haber ocurrido, pero quienes habian leido acerca del error que el mago señalaba, no leyeron la refutación de los investigadores, y finalmente el cuestionado efecto paranormal quedó desacreditado. El mago sencillamente ignoró a los investigadores bajo el supuesto de que esa "falsa" desacreditación serviría al propósito de denunciar el trabajo que él "sabía" (por su informante) que de todos modos estaba en un error.

Este "detrás de la escena" popular, a veces distorsionado e inapropiado, también alcanza a los investigadores psíquicos. Por ejemplo, Rinn (1950, p. 291) decía que Hereward Carrington compraba "pintura fosforescente que solamente usaban los médiums" en la tienda de artículos de magia de Francis Martinka. Burling Hull (1977, p. 74) gustaba relatar como Carrington había comprado un doctorado por 70 dólares "en un instituto privado."

Un rara fotografía de Harry Houdini y la medium Margery (Mina Crandon). Houdini la desenmascaró cuando encontró una regla en un gabinete con la cual quizá haya podido simular efectos espiritistas ante testigos. Sin embargo, Houdini habría descubierto que la Sra. Crandon tenía la cooperación de su experimentador (arriba, en la foto) cuando tomaba las manos de éste y las colocaba entre los muslos de la médium.
Un rara fotografía de Harry Houdini y la medium "Margery" (Mina Crandon). Houdini la "desenmascaró" cuando encontró una regla en un gabinete con la cual quizá haya podido simular efectos espiritistas ante testigos. Sin embargo, Houdini habría descubierto que la Sra. Crandon tenía la cooperación de su experimentador (arriba, en la foto) cuando tomaba las manos de éste y las colocaba entre los muslos de la médium.

También han aparecido artículos en revistas de magia, como "Was Prof. J.B. Rhine Hoodwinked?" [¿El Prof J.B.Rhine engaña?], de Annemann (1938) o ensayos escritos por magos en donde se discuten "puntos oscuros" en las condiciones experimentales de los investigadores psíquicos que solamente leen sus colegas (Corinda, 1958). Y otros pocos magos han oído historias sobre psíquicos conocidos que tienen conversaciones "amistosas" con magos a quienes les han admitido haber empleado trucos para engañar a los investigadores psíquicos.

Es parte del detrás de escena de los prestidigitadores que refutan a los magos, que ocasionalmente se confabulen con los mediums que "desenmascaran" para conseguir mayor publicidad para ambos cuando los periódicos reseñan sus enfrentamientos. Como la mayoría en el mundo del espectáculo sabe, lo que se dice en ese medio es a veces menos importante que pronunciar bien el nombre. Para demostrar lo extraño que se puede tornar este asunto, encontré un exposé de un mentalista que pretendía ser psíquico, publicado en una vieja revista de magia. El tono crítico del artículo refutaba una parte de este "psíquico" en una famosa publicación de ocultismo. Incluso ese mismo crítico había escrito otro artículo sobre fantasmas para la misma publicación de ocultismo (Groth, 1952) donde presentaba a un amigo mentalista suyo como a un psíquico genuino.

Aunque los roles que hemos discutido se interrelacionan todos entre si, la distinción más importante que nos preocupa aquí es la que se da entre los psíquicos genuinos y sus simuladores, los mentalistas. Si bien al principio el tema central parece ser la certeza de si una demostración es genuina o si es obra de un mentalista, las cosas no son en realidad tan claras como parece. El rol de un mentalista tiene una especial relación con la magia en general, y esto guarda un carácter marginal que puede ser apropiadamente comprendido sólo en su contexto histórico, una tema que trataré a continuación.


LOS PRIMEROS MENTALISTAS

El gran mago francés Robert-Houdin (1877, p. 30) dividió a la magia en seis categorías, tres de las cuales se ajustan a lo que hoy podríamos denominar mentalismo: (1) "Magia mental", que consiste en el "control que se adquiere sobre la voluntad del espectador" y "la lectura de los pensamientos secretos mediante un ingenioso sistema de códigos," al que podemos llamar pseudo-telepatía; (2) el supuesto mesmerismo, que consiste en una "imitación del fenómeno hipnótico, second-sight [doble vista], clarividencia, adivinación, trance, y catalepsia," lo que llamaríamos pseudo-clarividencia y pseudo-hipnosis; y (3) "El negocio del médium," que consiste en "espiritismo, o la supuesta evocación de espíritus, mesas parlantes, mesas que se mueven, voces que se escuchan provenientes supuestamente del más allá, y trazos o escritos en pizarras y otros dispositivos misteriosos," lo que hoy llamaríamos pseudo-apariciones, y/o pseudo-macro-psicokinesis. Respecto a ejemplos contemporáneos, Robert-Houdin mencionó a M. Alfred de Caston (1), M. Lassaigne (2), y los hermanos Davenport y los hermanos Stacy (3).

Si bien uno puede encontrar en muchos ejemplos de mentalistas en libros de historia de la magia (Christopher, 1973; Dawes, 1979; Lamb, 1976; y especialmente D. Price, 1985, p. 439-193), parece no haber mucha información sobre mentalistas en libros de historia de la magia. Uno de los mejores estudios es el de Harry Price (1936, p 253- 277). Price advirtió que Johann Beckman habia escrito en 1770 de una "figura parlante... que operaba por medio de un hombre, instruído por un confederado, que hacia señas secretas usaba un código secreto" (Price, 1936, p. 255). Sin embargo, fueron Giuseppe Pinetti de Willdalle (1750-1780) y luego su esposa en 1783, loa que presentaron el primer gran acto de telepatía. Otros, como Robert-Houdin (1846), (Alexander) Herrmann, el Grande (1848), y John Henry Anderson (cerca de 1848) perfeccionaron estos códigos, y Julius Zancig (1857-1929), en palabras de Price, introdujeron el primer sistema de códigos silenciosos, que Zancig y su esposa empleaban a la perfección. Otras duplas más tarde alcanzaron una notoriedad excepcional utilizando tales códigos, como los casos de Robert Heller (William Henry Palmer) y Haidee Heller (a fines del siglo XIX), Alfred Edward Capper y su hermana Nellie, Los Tres Svengalis, Benevbol (que ya presentaba entretenimiento psíquico), Ernesto Bellini, Los Zoomahs (el Sr. y la Sra. Giddings) y The Trees.

Aparte de estas duplas, Price menciona a muchos actores, como Erik Jan Hanussen (Hernan Steinschneider); Maloitz (Max Louis Blitz), el "Médium Cantante;" la Señorita Gene Dennis; Frederik Marion (Joseph Kraus); y Dr. A.J. McIvor-Tyndall, que ejecutaron pruebas individualmente. Fueron particularmente interesantes los primeros "telépatas" Washington Irving Bishop, Stuart Cumberland (Charles Garner), conocidos como "intérpretes del lenguaje corporal" -y algún tiempo después Eugene de Rubini, un "telépata" que no usaba contacto y cuyas habilidades siquiera podían ser imitadas (como Axel Helstrom o Frederick Marion) y que logró diseñar una técnica que era lo más parecido a una genuina comunicación telepática pero mediante procedimientos mágicos (acerca de Rubini, ver Christopher, 1970; Frikell, s. d.; Rinn, 1950, pp. 528-536; Stratton, 1921).

Algunos mentalistas actuaban bajo lo que rotularíamos un estado hipnótico. Tal vez una de las más importantes psíquicas fue Magdeleine Guipet, una "medium musical" que reconocidos investigadores psíquicos sometieron a prueba hacia fines del siglo XIX. Albert von Schrenck-Notzing incluso le dedicó un libro entero (von Schrenck-Notzing, 1904). Otros médiums musicales de este período, mencionados por Price, fueron Lina y una bailarina española llamada Carmencita. En 1872, Jesse B.H. Shephard demostró habilidades similares en Londres.

Annie Abott, conocida en Inglaterra como "Georgia, la Magnética," resultó una artista de interés para algunos investigadores psíquicos (Anónimo, 1891; Dawes, 1991, 1992; Hurst, 1897; Newcomb, 1904). Annie fue la más importante entre varias mujeres de vaudeville de fuerte carácter, incluyendo a Lulu Hurst (la Sra. Paul Atkinson), creadora del acto, conocida como la "Asombrosa Georgia." Durante ese período llegó a haber muchos distintos tipos de artistas que creaban actos excéntricos, como los "hombres con múltiples mentes," "niños calculadores," e incluso sanadores y animales que hablaban; todos hacian gala de su arte en los escenarios de principios de siglo veinte.

Como magos que actuaban en el rol de psíquicos, muchos médiums del vaudeville, por supuesto, sabian cómo funcionaba el detrás de la escena. Algunos magos importantes en esta categoría fueron Washington Irving Bishop, Anna Eva Fay (Heathman), su nuera Eva Fay (Anna Norman), la "Mahatma Blanca" (Samri y Kitty Baldwin), William M. Fay, J.F. Day, y quizá la más famosa dupla, los hermanos Davenport (William H.H. e Ira), y su hermana la Sra. Lizzie Davenport Blandy. Durante su primer período, Anna Eva Fay se presentaba a si misma como una auténtica médium y hasta engañó a William Crookes, el eminente físico e investigador psíquico inglés. De acuerdo a Price (1930, p.10), Fay le había ofrecido al mago J.N. Maskelyne venderle el secreto de sus métodos por los cuales había engañado a Crookes. Hacia el final de su vida, Fay se convirtió en una auténtica maga e incluso llegó a ser miembro de honor del Círculo Mágico de Londres.

El primer artista de lo que sería una forma de clarividencia bajo hipnosis, fue Alexis Didier, quien en 1847 engañó a Robert-Houdin (Dingwall, 1968, p.165). Otros dos artistas de vaudeville de interés para los investigadores psíquicos, fueron Max Weiss (aprox. en 1918), conocido como "el hombre con ojos de rayos X", y el "Profesor" K.B. Duke (mejor conocido como Kuda Bux, cuyo verdadero nombre era Akhnur Jammum, aprox. 1905-1981), quienes iniciaron sus presentaciones en Inglaterra. Debe mencionarse que el Sr. y Sra. Piddington, quienes actuaban como "radio-telépatas," escribieron una serie de interesantes comentarios en el Journal of the Society for Psychical Research entre 1949 y 1950; incluso una "destreza" paranormal del mentalista Maurice Fogel que involucró al mismo J.B. Rhine en 1947 (Anónimo, 1947).


LOS MAGOS: ¿ENEMIGOS O SIMPATIZANTES DE LO PARANORMAL?

Desde que John Henry Anderson, el primero de una larga serie de Grandes Magos del Norte, desafió a cualquier médium a reproducir raps (golpes) en un escenario, ofreciendo hasta u$1.000 para ello -pero que se vió forzado a retractarse cuando las hermanas Fox aceptaron el reto (Fodor, 1966, p. 211)- hoy día es bastante común que los magos anuncien estas ofertas. Joseph Dunninger también (desde 1936), ofreciendo, en diferentes momentos, entre u$10.000 a u$ 35.000.

Más recientemente, James Randi (quien copió de muchas maneras el estilo de Dunninger), también lanzó el desafío con una suma equivalente a los u$500.000 (Uri Geller en Inglaterra también ofreció u$1000 a cualquier posible sucesor que pudiera doblar una cuchara monitoreado por cualquier científico con cámaras de TV). Estos desafíos públicos, que parecen tener un noble propósito, siempre han resultado un excelente dispositivo publicitario para muchos.

Aparte de estos magos, como James Randi, David Berglas (presidente del British Magic Circle y miembro del Occult Committee) y el fallecido Milbourne Christopher, muchos otros críticos de la investigación psíquica, Martin Gardner, Trevor H. Hall, Ray Hyman, Persi Diaconis, Danny Korem, André Kole, Gordon Stein, Robert A Steiner, Gerald Mertens, Henry Gordon, Massimo Polidoro, y Joe Nickell, han demostrado también tener amplios conocimientos sobre magia.

A veces, la antipatía de algunos magos ha resultado molesta o incluso ha puesto en ridículo a la parapsicología misma. Otras veces los magos denuncian engaños (Truzzi, 1993), el más conocido de los cuales es el "Proyecto Alpha" de Randi (Krippner, 1984; Randi, 1983; Thalbourne, 1995; Truzzi, 1987), que provocó el cierre del laboratorio de parapsicología de la Universidad de Washignton, en St. Louis. El debate extra-científico incluso llegó a los estrados judiciales (bajo el cargo de calumnias e injurias), el más reciente de los cuales fue la disputa Randi vs. Uri Geller, que terminó con dos sentencias de la corte contra Randi (quien interpretó los resultados a su favor), otra acción condujo a Geller a Japón, y otra al investigador psíquico Eldon Byrd, cuyos experimentos apoyaban los presuntos poderes del psíquico Geller (Truzzi, 1995).

Estos fuertes desencuentros ponen trabas por el hecho de que muchos de los grandes magos dejaron de interesarse legítimamente por los fenómenos del espiritismo (Hansen, 1990, 1992; Price, 1923, 1932a, 1932b. 1932c). Tanto Giovanni Bartolomeo Bosco (1793-1863) como Jean Eugene Robert-Houdin (1805-1871) afirmaban públicamente que los fenómenos que producía el medium D.D.Home no podían ser reproducidas por medio de técnicas mágicas. Will Goldston (1874-1941) y el "Profesor" Jacobs (aprox. 1881), que eran reconocidos magos, se convirtieron al espiritismo (Fodor, 1966, p. 212). Julius Zancig (aprox. 1857-1929) se convirtió al espiritismo cuando recibió un mensaje en idioma danés (Ernst y Carrington, 1932, p. 231).

Algunos magos actuaron como peritos de Jueces, como ocurrió con el juicio por los delitos de estafa del famoso médium americano Henry Slade por sus efectos espiritistas fraudulentos. Sin embargo, otro mago Samuel Bellachini llevó a cabo experimentos con Slade y manifestó que para obtener estos efectos, la explicación de trucos de prestidigitación resultaba insatisfactoria.
Algunos magos actuaron como peritos de Jueces, como ocurrió con el juicio por los delitos de estafa del famoso médium americano Henry Slade por sus efectos espiritistas fraudulentos. Sin embargo, otro mago Samuel Bellachini llevó a cabo experimentos con Slade y manifestó que para obtener estos efectos, la explicación de trucos de prestidigitación resultaba insatisfactoria.

Samuel Bellachini (Samuel Berlach, aprox. 1827-1885), que fue mago en la corte de Berlín, llevó a cabo experimentos con el médium americano Henry Slade y manifestó que para obtener estos efectos, la explicación de trucos de prestidigitación resultaba insatisfactoria (Bayless, 1972, p. 220). Harry Kellar quedó fuertemente impresionado por la levitación del médium William Eglinton. Kellar escribió: "llegué a la sesión como un escéptico, más debo reconocer que, a causa del fenómeno del que fui testigo, me encontré con algo imposible de explicar en forma normal" (Kellar, 1890, p. 168). Hamilton (Pierre Etienne-Auguste Chocat, 1812-1877), el sucesor de Robert-Houdin, confirmó que había algo inexplicable en el caso de los hermanos Davenport (cuyos métodos son ahora conocidos en la fraternidad mágica). Y cuando Howard Thurston (1869-1936) fue testigo de la levitación de una mesa en la cual Eusapia Palladino no tenía contacto material con el objeto, mientras que él y su asistente controlaban los pies, las rodillas y las manos de la médium, ambos manifestaron creer en sus habilidades y ofreció u$1.000 a cualquiera que pudiera probar que "Palladino no podía levitar la mesa sin trucos ni fraude" (Carrington, 1954, p. 54-57). Como vemos, muchos magos conocidos adhieren o a veces también atacan a los médiums. Harlan Tarbell era un peculiar e interesante defensor de los fenómenos paranormales. También escribió Tarbell Course in Magic [El Curso de Magia Tarbell], una colección de obras de inestimable valor. Estaba abocado a la teosofía y manifestaba ser fiel creyente del ocultismo y la magia esotérica (Parish, 1994). Más recientemente, el gran ilusionista Doug Henning, practicante de Meditación Trascendental, manifestó en varias ocasiones sus verdaderas intenciones de volar (usando las técnicas de Maharishi).

Ehrich Weiz (1874-1926), más conocido como Harry Houdini, si bien era escéptico no se burlaba de esas cosas. Admitió haber visto la aparición de su madre en un teatro de Berlín en el momento que ella moría en Nueva York, y tenía varias fotografías que mostraban efectos que sencillamente no podía explicar.
Ehrich Weiz (1874-1926), más conocido como Harry Houdini, si bien era escéptico "no se burlaba de esas cosas". Admitió haber visto la aparición de su madre en un teatro de Berlín en el momento que ella moría en Nueva York, y tenía varias fotografías que mostraban efectos que sencillamente no podía explicar.

Incluso las observaciones de John Neville Maskelyne (1839-1917) y Harry Houdini (pseudónimo de Ehrich Weiz, 1874-1926), ambos magos ultra-refutadores, eran bastante más complejas de lo que generalmente se cree. Maskelyne admitió que creia en las apariciones y que algunos de los fenómenos de las mesas giratorias eran genuinos, así como de algunas fuerzas psíquicas (Maskelyne, 1885; Prince, 1930, p. 330-331; Zoellner, 1888, pp. 215-216). De manera similar, Houdini insistió que si bien era escéptico, "no se burlaba de esas cosas" (Houdini, 1924, p. xiii). Houdini mismo dijo haber visto la aparición de su madre en los bastidores de un teatro de Berlín en el momento que ella moría en Nueva York, y tenía varias fotografías que mostraban efectos que sencillamente no podía explicar (Byron, 1993, p. 79-80; Carrington, 1952). Además, de acuerdo a Bayless (1972, p. 211-212), Houdini mismo escribió una carta describiendo una sesión "exitosa" con la médium de "Eva C." (pseudónimo de Marthe Beraud). Como sea, E.J. Dingwall me dijo personalmente que él había estado en la sesión y que esa versión era errónea. A pesar del escepticismo de Houdini hacia el mundo de los espíritus, en su última entrevista (Anónimo, 1926), reconoció personalmente creer en la reencarnación e incluso afirmó creer en la existencia de las premoniciones.

Sean o no verdaderas las expresiones privadas de Houdini, parece claro que su oposición era principalmente hacia el espiritismo y no hacia los fenómenos psíquicos paranormales (o lo sobrenatural). De modo que cuando Houdini critica la simpatía de Robert-Houdin por Alexis Didier, advierte que la evidencia "no tiene nada que ver con el espiritismo, sino con las sesiones con un clarividente..." (Houdini, 1924, p. 253). Aunque reconoce que hay muchos clarividentes fraudulentos, Houdini parecía estar lejos de negar la existencia de la telepatía, e incluos simpatizaba de los actos de transmisión de pensamiento sin contacto que practicaba Eugene de Rubini (Christopher, 1970, pp. 75-76; Rinn, 1950, p. 536; Stratton, 1921).

El investigador psíquico Richard Hodgson (1894), discutiendo el testimonio de los magos que se sintieron defraudados por los médiums, expresa claramente este punto:

Por supuesto, no se pone en duda que un mago o cualquier persona familiarizada con las técnicas de la magia, probablemente descubra el modus operandi de un truco más rápidamente que un observador recién iniciado -incluso si uno no puede descubrir el truco, en virtud de su conocimiento de varias técnicas, puede describirlo mejor que otras personas, aun si no es superior a él en otros aspectos. Quizá un mago no sea un observador agudo de circunstancias con las que no está familiarizado, perteneciente a su especialidad como mago; quizá su memoria no esté suficientemente entrenada en la reproducción de circunstancias que no pudo observar; y se encuentra absolutamente desconcertado por la precisión de tales eventos. Un mago parece no tener ninguna capacidad especial cual mago en este sentido. Y una tendencia que pone obstáculos al observador común, es que probablemente el mago opere más poderosamente del lado de un prestidigitador. En muchos casos, el mero hecho de haber sido engañado contribuirá a la maravillosidad de su percepción, sobretodo si está excesivamente confiado en su habilidad para detectar trucos. Por tal razón, está más apto para creer que el fenómeno, si es ininteligible para él, sea inexplicable "por causas naturales." El Sr. Kellar parece haber tomado esta actitud confiada cuando observó la actuación de Eglinton en 1882.

A veces se deja entrever, por regla casi sin excepción, que el truco de una persona que ignora los métodos usados, involucrará una falta de apropiada descripción de sus condiciones fundamentales. Y esta descripción deficiente es, con frecuencia, tan marcada que a los estudiantes no se les ofrece explicación alguna. Estas declaraciones no se aplican sólo a observadores comunes sino también a los magos, cuyo testimonio está viciado por la misma responsabilidad que tiene la mala observación y los lapsus de memoria, que tanto aparecen en las descripciones de los observadores de los fenómenos "ocultos."

Entonces, si un mago dice haber sido incapaz de descubrir trucos en los fenómenos "ocultos," se considera que sus afirmaciones tienen más valor que una persona no familiarizada con la magia. Hay algo de este fenómeno que es excepcional... pero suponiendo que el mago no pueda descubrir el truco, ¿cuál es el valor de su opinión si dice que no puede realizar ningún truco? Esto depende de cada individuo y no de sus conocimientos de magia. Debemos considerar su talento, su habilidad para observar y enumerar las circunstancias detalladas de su presentación, su conocimiento de ciencias físicas y mentales, y su tendencia a creer en fenómenos sobrenaturales sin evidencia suficiente (pp. 360-361).

El mago Harry Kellar quedó impresionado por la levitación del médium William Eglinton: Llegué a la sesión como un escéptico, más debo reconocer que, a causa del fenómeno del que fui testigo, me encontré con algo imposible de explicar en forma normal.
El mago Harry Kellar quedó impresionado por la levitación del médium William Eglinton: "Llegué a la sesión como un escéptico, más debo reconocer que, a causa del fenómeno del que fui testigo, me encontré con algo imposible de explicar en forma normal".

EL CAMBIANTE ROL DE LOS MAGOS

Desde sus comienzos, los mentalistas se han preocupado por el problema de la autentidad de sus presentaciones. Pero es apenas parte de un problema mucho mayor que enfrenta la mayoría de los magos. La historia de la magia, hasta principios de los años veinte, quizá hacia el fin de la trayectoria de Harry Kellar, hizo más incapié en la cuestión de la mistificación que en la del entretenimiento. Thurston, refiriéndose a Kellar, decia que "primero llegó el misterio, el entretenimiento no era lo más importante" (Thurston, 1929, p. 227). Sin embargo, Thurston también decía que "las condiciones cambiaron desde los tiempos de Robert-Houdin, Alexander Hernan y Harry Kellar. Por consiguiente, el entretenimiento juega un rol importante para el mago contemporáneo." (p. 251).

Los primeros magos estaban muy vinculados con los fenómenos sobrenaturales. Muchos eran los hechiceros de su comunidad. El mago como "pseudo-ocultista" era el rol dominante, como puede verse en escritos como The Discoverie of Witchcraft [El Descubrimiento de la Brujería] (1584) de Reginald Scot o Natural Magick [Magia Natural] de John Baptista Porta (1588) donde se mezclan los trucos de los magos con las artes negras. Los Hermanns, por ejemplo, cultivaron una mística de si mismos aún cuando tomaban distancia del estereotipo de "charlatán ignorante que realiza trucos con lentejuelas y turbantes, usando palabras extrañas, danzas como las de los derviches y el 'hocuspocus' de un viejo fakir (Burlingames, 1942, p. 50). En tiempos de Kellar, el rol del mago como nigromante mefistofélico era bastante común, como lo retrata su propia autobiografía editada por "Satan, Junior," si bien habia personas que cuando se retiraban de sus presentaciones, decian que realmente habían visto pequeños demonios dibujados en la publicidad gráfica de Kellar.

Para el mago de nuestro mundo industrializado de hoy, la mística de lo sobrenatural y de lo oculto ha desaparecido. Esto es parte de la secularización general y el desencanto global de nuestra sociedad, enormemente desmistificada en su visión de la naturaleza, lo cual ha afectado las relaciones entre la ciencia, la religión y lo oculto (Truzzi, 1971, 1972). Hoy también el entretenimiento ha reemplazado a la mística, y muchos magos están más interesados en ganar popularidad y publicidad que en producir misterios. La mentalidad de la mayoría de los magos está menos preocupada por la magia en un sentido tradicional que en trucos de tipo rompecabezas o juegos de ingenio, que muchos críticos describirían como algo más semejante a un juego de manos que a la magia en si. Como Dingwall correctamente expresó:

La esencia de la magia realmente consiste en efectuar lo que hasta ahora era aparentemente imposible, o en otras palabras, es el arte de crear en los sentidos la impresión de que opera un agente sobrenatural... a veces (uno) ve personas que se enorgullecen de llamarse a si mismos magos. Hacen manipulaciones extraordinarias con monedas, cartas, bolas de billar, y elementos que aparecen de los sitios más inesperados. A esta manipulación se la llama prestidigitación. Lo que importa es que el artista actue como ilusionista, no como mago, y sus habilidades invariablemente resulten "muy inteligentes" o "muy rápidas" para su audiencia, pero nunca "muy místicas." El público sabe que hay un misterio llamado prestidigitación pero sabe que funciona como un "como si." El practicante del arte de la magia es diferente. Sabe que la prestidigitación es sólo un medio para el fin. Simplemente es parte de una presentación, una cuestión esencial del aspecto técnico de su arte. Pero no es el fin en si mismo. Supongamos que un mago está por realizar un experimento que puede acabar de dos maneras distintas; una tiene que ver con un gran talento para la prestidigitación y la otra ningun talento en absoluto. Uno sería tonto si optara por el primero. Lo fundamental del trabajo de un mago es la representación y el efecto, pero si el efecto en ambos casos fuera el mismo, sería una pérdida de tiempo pasarse horas practicando complicadas manipulaciones. El mago optaría por el segundo método; el prestidigitador por el primero. Hablará de la velocidad de la mano para engañar al ojo humano, agitará las cartas, o hará sonar sus monedas al tiempo que aturdirá a su audiencia, que regresará a su hogares con la idea de que han sido testigos de una extraordinaria habilidad para la prestidigitación. Si bien todo esto podría ser verdadero, aun asi, esto no sería realmente magia. (pp.208-209)
Asi como la secularización de la sociedad ha abandonado la desmistificación y la naturalización de lo "sobrenatural", también la magia ha cambiado su carácter de "sobrenaturalidad" -predominio de sacerdotes y magos de feria como Cagliostro y St. Germain- por funciones seculares. Una de estas funciones ha sido la refutación de los antiguos elementos "sobrenaturales" y uno de ellos ha sido la desmistificación de lo oculto bajo la forma de un entretenimiento teatral. Por ejemplo, por un lado tenemos a los magos en su rol de comediantes, como Carl Ballantine (un artista contemporáneo extremadamente hábil), que entretienen con éxito usando trucos bien simples.

En términos de los tipos sociales de magos identificados por el sociólogo Orrin Klapp (1962), los magos han sabido desempeñar históricamente el rol de "heroes" públicos y "villanos" públicos pero más recientemente también han surgido los "magos comediantes," creados intencionalmente para el público "tonto", lo cual genera un gran dilema acerca de la seriedad con la cual las mentes modernas ven hoy a la magia.

Mientras que los magos que interpretan el rol de pseudo-ocultistas han padecido en manos de la secularización y la declinación de la creencia pública en la magia -sobretodo como resultado de la educación en masa, que ha significado una disminución de la mentalidad "campesina" asociada a la vida rural- estos cambios han resultado diferentes para diferentes aspectos de nuestra cultura. La audiencia por lo general no cree que los escenarios de los ilusionistas representen lo que ocurre en verdad; nadie ya cree que el mago esté realmente decapitando o levitando a su asistente, o haciendo desaparecer a un elefante, pero el pueblo americano en general continua creyendo en la telepatía y en la posibilidad de que las habilidades sobrehumanas quizá existan. Hoy dia nadie cree que los fantasmas aparecen de verdad en las presentaciones teatrales, pero todavía se cree (o por lo menos hay una posibilidad ambivalente) de que hay algunas personas que pueden afectar la materia con su mente, incluso a escasa magnitud. Si bien hay críticos que han señalado que si realmente existe una habilidad psicokinética, ésta seguramente debería utilizarse para algo más que doblar una llave, quizá haya una pequeña posibilidad de que ésto sea posible. La mayoría de las personas probablemente no estaría dispuesta a aceptar los presuntos poderes de Uri Geller con los cuales él dice haber podido transportar una cámara a la tierra desde la luna, pero creen plausible la idea de que tal vez pueda poner en marcha un reloj descompuesto.

De manera similar, un mentalista puede razonablemente presentar un "experimento" de telepatía en un escenario teatral muy trivialmente, como adivinar el número de serie de un billete de un dólar. Pero su auditorio probablemente se sentiría frustrado si el mago comenzara a decirles lo que se está hablando en ese mismo momento en secreto entre el presidente de los Estados Unidos y el Concejo Nacional de Seguridad. El problema para el mentalista es crear un efecto que sea extraordinario en ese momento, pero no tan increíble como para que entre en conflicto con el sistema de creencias de su auditorio (aunque esto a veces puede ocurrir sin querer). Hay una famosa anécdota, pero probablemente falsa, de un mentalista que predijo el anuncio periodístico de un crimen justo en el momento en que aparecía en los periódicos un asesinato perpetrado por un asaltante desconocido. La anécdota también dice que el mentalista fue arrestado creyéndolo culpable del asesinato -la gente se preguntaba ¿cómo podía haberlo sabido por adelantado?- acerca de lo cual, como la única forma de defenderse, no tuvo otra opción más que la de revelar sus métodos a la policía.

Actualmente, entre las representaciones de diferentes tipos de efectos psíquicos de los magos podemos distinguir:

(1) los pseudo-psíquicos, que tratan de engañar y ofrecen sesiones y demostraciones de sus presuntos poderes;

(2) los psíquicos de escenario, cuya principal demostración ocurre fuera de los escenarios pero también pueden hacerla en teatros o clubes nocturnos (por ejemplo, Peter Hurkos y Uri Geller);

(3) los magos mentalistas, que demuestran tener algunos efectos o "trucos" en sus programas, la mayoría de los cuales parecen más trucos de magia que fenómenos psíquicos (por ej. David Copperfield);

(4) los pseudo-refutadores, junto a otros magos pretenden revelar los métodos de los psíquicos profesionales pero usan otros más convencionales; y

(5) los refutadores, esto es, magos que desenmascaran a los pseudo-psíquicos, advirtiendo al público en general que todos los psíquicos usan trucos.


DEL PSEUDO-OCULTISTA AL PSEUDO-CIENTÍFICO

Una manera de legitimar a la magia es buscar la protección del científico antes que la del hechicero. Asi muchos magos han pasado del rol del "ocultista" al rol del "científico," por lo cual el intento de actuar como científico ha tomado tres formas: La primera, "legitimar la publicidad de las maravillas científicas." Robert-Houdin, por ejemplo, personificaba a un autómata y Henri Robin mostraba las propiedades de los aparatos científicos que se usaban por aquel entonces (1869), como la bobina eléctrica (Dawes, 1979, p.127). Por lo general, se distorcionaban los avances científicos o bien parte de los métodos para demostrar un fenómeno eran secretos, aplicando ciencia a la magia (como el dispositivo electromagnético de Robert-Houdin) o se tergiversaba la ciencia (como cuando Robert-Houdin decía poder suspender a su asistente. Lo hacia liviano como una pelota usando nada menos que una sustancia descubierta en 1847: el éther). Gustavus Katterfelto (en 1782) acostumbraba presentar a la magia disfrazada de una ciencia nueva cuando usaba las proyecciones de un "miscroscopio solar," sus demostraciones con la esfera en llamas, y sus medicinas curalotodo. Aunque los científicos críticaban duramtne estas actividades como presentaciones fraudulentas, al punto que éstas se publicitaban y se vendian como productos científicos novedosos, los magos tenian un rol positivo como agentes de publicidad de la ciencia.

Muchas personas saben de los desafíos públicos anti-espiritistas de Harry Houdini (izq.) para desenmascarar a médiums fraudulentos. Joseph Dunninger (centro) fue sucesor de Houdini como refutador público de los espiritistas. Actualmente el último sucesor en este linaje es James (El Asombroso) Randi (der.).
Muchas personas saben de los desafíos públicos anti-espiritistas de Harry Houdini (izq.) para desenmascarar a médiums fraudulentos. Joseph Dunninger (centro) fue sucesor de Houdini como refutador público de los espiritistas. Actualmente el último sucesor en este linaje es James ("El Asombroso") Randi (der.).

Otro rol en donde los magos se aliaban más con la ciencia que con el ocultismo era cuando refutaban a los presuntos poderes sobrenaturales de los otros, a veces incluso de otros magos. Al actuar como refutadores, estos magos asumían un rol importante educando a la gente, inoculándole ideas contra lo mágico y lo sobrenatural. Recibian el aplauso de los científicos y en su nuevo rol de publicistas de la tecnología científica, bien podría calificarseles como el rol cuasi-científico del mago, que resultó particularmente significativo para los magos quienes, durante siglos, pasaron de ser parias y vagabundos a comediantes respetables y socialmente aceptados (e incluso admirados). Aliándose con la ciencia pero contra la "irracionalidad," los magos pudieron disociarse a si mismos de su origen y convertirse en guardianes y protectores de lo público, funcionando como los "hackers" en computación que atrapan y luego reclutan al delincuente para que coopere en los servicios de seguridad. Algunos magos, que en cierto modo comenzaron siendo estafadores, terminaron como parte de una brigada de rescate contra lo irracional. Pero como ocurre en el mundo del espionaje, muchos de estos nuevos "guardianes" a veces actuan como "dobles agentes." Y todo puede prestarse a confusión. Por ejemplo, el investigador Harry Price condujo investigaciones que confirmaban la realidad del fenómeno paranormal de la Rectoría de Borley (Price 1940, 1946), pero se hizo también conocido por sus estudios críticos del medium Rudi Schneider (Price, 1930). Sin embargo, un exámen de su trabajo mostró que Price había distorcionado, no sólo su evidencia positiva del caso de la rectoría de Borley (Dingwall, Goldney, & Hall, 1956; Hasting, 1969), sino también su evidencia negativa del caso de Schneider (Gregory, 1985).

Este rol como desenmascarador fue siempre importante como antídoto contra la charlatanería, pero se hizo particularmente importante con el advenimiento del espiritualismo y el rol de refutadores de fraudes espiritistas que desempeñaban muchos magos en nombre de su arte, como Maskelyne, Kellar, Thurston, Houdini, Dunninger, Christopher, y Randi. Lo que vemos aquí es el rol de lo que supuestamente se presenta como "magia honesta" que busca un policía para los "magos pícaros" que de lo contrario se abusarían del público inocente. Como dijo Joseph Dunninger (1935):

Los magos sienten que están ofreciendo un servicio especial cuando denuncian a los mediums fraudulentos. Eso es lo que hacen. Pero el hecho de que ganen dinero y publicidad con estas actividades no cambia en nada las circunstancias. (p. 11)
Este rol cuasi-científico es importante. En un estudio sobre las reacciones "patológicas" contra las declaraciones científicas no-ortodoxas, el psicólogo Ray Hyman (1980) habla de científicos holgazanes que permiten que críticos irresponsables e incompetentes ataquen afirmaciones extravagantes -que rechazan considerándolas pseudocientíficas- para desacreditarlas. En particular, Hyman ha elogiado al fisiólogo William B. Carpenter considerándolo un "hombre exitoso" contra las ideas espiritualistas de Alfred Russel Wallace.

Aunque Hyman ve a este "hombre exitoso" como parte de la comunidad científica, su función original proviene de los magos, y es lo que he llamado el rol cuasi-científico. El mejor ejemplo moderno es el de James ("El Asombroso") Randi, que se enorgullese de ser miembro del Committee for the Scientific Investigation of Claims of the Paranormal. (Algunos críticos han calificado a este grupo de cuasi-científico; pero como el Profesor Hyman es un miembro respetable de esta organización, es poco probable que esté de acuerdo con dicha caracterización). Con frecuencia se acusa a Randi de formular sus críticas a la parapsicología en forma incorrecta e irresponsable, donde Randi, repetidamente, confunde los esfuerzos serios de los investigadores psíquicos con lo que Martin Johnson ha calificado con el nombre de "para-pornografía," como las presentaciones de medios de prenesa como The National Enquirer o periódicos similares. (Muchos críticos parecen no saber que incluso los parapsicólogos serios se rehúsan a conceder entrevistas para The National Enquirer).

El sociólogo de la ciencia Harry Collins (1983) se lamentó por la aparente falta de responsabilidad de muchos científicos cuando proporcionan información crítica responsable en parapsicología, en lugar de dejar ese lugar abierto a los magos, que no necesariamente comparten los criterios de los hombres de ciencia, sobretodo el valor de una visión comprometida, pero desinteresada, con la objetividad. Como Randi parece más interesado en la publicidad que en investigar meticulosamente lo que ello involucra (por ejemplo, ver Truzzi, 1984), sus esfuerzos quizá se podrían ajustar más al modelo de "ciencia patológica" de Hyman. Otro excelente ejemplo de este intento de desacreditar más que investigar se puede encontrar en las "explicaciones" -a menudo absurdas- de Houdini en su obra Miracle Mongers and Their Methods [El Traficante de Milagros y sus Métodos] de 1920. Es interesante leer hoy su libro A Magician Among the Spirits [Un mago entre los espíritus] de 1924, sobretodo la parte donde ofrece explicaciones las cuales -aun cuando Houdini demostraba su carácter fraudulento- bien podrian ser erróneas, pero que en aquel momento eran eficaces para desacreditar. Los problemas con las investigaciones de Houdini comenzaron a hacerse notables, pero tuvieron un débil impacto (ver las críticas de Prince, 1930). Los magos cuasi-científicos también nos han obsequiado un enorme abanico de pseudo-explicaciones; pero este rechazo prematuro en lugar de ser el portal hacia nuevos e interesantes fenómenos a explorar, en última instancia, probablemente termina siendo una ciencia más en retroceso que en progreso.

Una tercera forma de magos en su rol de científicos, adoptada particularmente por muchos mentalistas contemporáneos, es la del mago como pseudo-científico. En lugar de demostrar ciertas fuerzas ocultas, el mago moderno puede querer demostrar los principios supuestamente científicos de algunos dispositivos. Un viejo ejemplo era el de un supuesto jugador de ajedrez autómata que albergaba, en realidad, a un asistente escondido. Otros ejemplos eran aquellos magos que pretendían demostrar antídotos contra los venenos, o comer una cantidad de fósforos o aceite hirviendo, o magos que exhibían animales con inteligencia humana (como el cerdito Toby, que era bien conocido en 1817).

Aquí lo fraudulento produce un efecto en donde se presenta en nombre de la ciencia, lo que debería ser en nombre de lo sobrenatural. De este modo, los mentalistas modernos, por lo general, presentan efectos a su auditorio como "experimentos parapsicológicos," o el mago mismo como receptor o emisor de mensajes telepáticos (algo más sobrenatural que "natural"). Si bien estas demostraciones "científicas" son eventos normales, en realidad, son presentaciones de eventos paranormales pero ni ocultos ni sobrenaturales, sino aceptados por algunos científicos como eventos reales pero fuera de su comprensión. Esta es una distinción importante y central para la relación entre parapsicólogos y magos. El mago que es escéptico de la PES y que actúa como un cuasi-científico que refuta la evidencia de la existencia de la PES, por lo general, malinterpreta a los parapsicólogos calificándolos como pseudo-científicos, o como ocultistas disfrazados de científicos. El crítico de la PES considera a los falsos psíquicos como pseudo-ocultistas (dicen tener contacto con lo sobrenatural) o a los pseudo-científicos (dicen poder demostrar la existencia de la PES como un fenómeno empíricamente válido para la investigación científica). Pero confunden las demostraciones pseudo-científicas de los falsos psíquicos con los controles científicos inapropiados de la parapsicología. (Los científicos verdaderos, en la mayoría de las otras ciencias, tampoco controlan apropiadamente las variables de sus experimentos. Los malos experimentos todavía forman parte de la ciencia real. La parapsicología es una ciencia que intenta estudiar científicamente a psi, exista o no, y es independiente de estudios particulares -buenos o malos).

Por tal razón, la mayoría de los parapsicólogos rechaza al mentalismo cuando presenta como un "psi real," lo que cualquier mago puede hacer. Los consideran falsos psíquicos, como el caso de Uri Geller o incluso "comediantes" como Kreskin, quien -en su extensa carrera- no tuvo suerte para los negocios; su negocio era tratar de escapar del rótulo de "pseudocientífico," como lo calificaron los críticos escépticos, refutadores, e incluso magos cuasi-científicos como James Randi. Esto coloca a los investigadores psíquicos en contra de los magos. Por otro lado, hay magos pseudo-científicos que -aun cuando promueven un interés público hacia la parapsicología- malinterpretan la investigación psíquica y el fenómeno psi. Y, por supuesto, la presencia de magos que simulan psi refuerza la visión de los magos críticos de que todo lo relacionado a psi es un error o producto de una observación inadecuada o de trucos. Cualquier mentalista pseudo-científico puede imitar psi, el mago crítico menos impresionado (por ejemplo, los magos refutadores cuasi-científicos que conocen el detrás de la escena en las presentaciones de los mentalistas) queda convencido de la supuesta evidencia real del fenómeno psi que presentan los parapsicólogos científicos! De este modo se afirma irónicamente que los artistas psíquicos que creen en psi, y que podrían estar interesados en promover la investigación seria del fenómeno psi, a causa de la perfección de sus presentaciones donde se puede simular psi, refuerzan la idea entre los magos críticos de que se puede ridiculizar a los parapsicólogos por no haber encontrado realmente al fenómeno psi.


Referencias

ABBOTT, D. P. (1916). Behind the scenes with the mediums. Chicago: Open Court.

ANNEMANN, T. (1936, Julio). Bert Reese secrets. The Finx, pp. 139-140.

ANNEMANN, T. (1938, August). Was Professor J.B. Rhine hoodwinked? The Finx, pp. 329-333.

ANÓNIMO (1891a). General meeting [items the Georgia Magnet]. Journal of the Society for Psychical Research, 5, 167-169.

ANÓNIMO (1891b). Photographing Indian conjurors. Journal of the Society for Psychical Research, 5, 884-886.

ANÓNIMO (1926, 1ro. Noviembre). Death rings down curtain on Houdini. Detroit Free Press, pp. 1-11.

ANÓNIMO (1944). Dunninger, Joseph. Current biography 1944. New York: H.W Wilson.

ANÓNIMO (1947). Maurice Fogel. Journal of the American Society for Psychical Research, 34, 86-87.

AUERBACH, L.M. (1983, Enero). Mentalism for parapsychologists. ASPR Newsletter, 9, p. 4.

AUERBACH, L.M. (1987). Stage magic: What do parapsychologists need to know? [Resumen]. En D.H. Weiner & R.D. Nelson (Eds.), Research in parapsychology 1986 (pp. 182-185). Metuchen, NJ: Scarecrow Press.

AUERBACH, L.M. (1988, June). Psi and the art of magic. Fate, pp. 83-91.

BAGGALLY, W.W. (1917). Telepathy: Genuine and fraudulent. London: Rider.

BAGGALLY, W.W. (1912). Report on sittings with Charles Bailey, the Australian apport medium. Journal of the Societyfor Psychical Research, 15, 194-201.

BAYLESS, R. (1972). Magicians and mediums. En R. Bayless (Ed.), Experiences of a psychical researcher (pp. 208-228). New Hyde Park, NY: University Books.

BESTERMAN, T (1928). Report of pseudo-sitting for physical phenomena with Karl Krauss. Journal of the Society for Psychical Research, 24, 388-392.

BESTERMAN, T. (1932). The psychology of testimony in relation to paraphysical phenomena: Report of an experiment. Proceedings of the Society for Psychical Research, 40, 363-387.

BIRD, M. (1927). Some notes on dark-seance fraud. Journal of the American Society for Psychical Research, 21, 201-215.

BYRON, J. (1993). Amazing psychic experiences of the Jamous (pp. 77-83). Leicestershire: Tynron Press.

CARRINGTON, H. (1907). The physical phenomena of spiritualism: Genuine and fraudulent. Boston: Herbert B. Turner.

CARRINGTON, H. (1924). On some methods employed by clairvoyant mediums. Journal of the American Society for Psychical Research, 18, 700-714.

CARRINGTON, H. (1926). Ventriloquism, considered as a possible explanation of "independent voice" phenomena. Journal of the American Society for Psychical Research, 20, 495-498.

CARRINGTON, H. (1952). Psychic oddities. London: Rider.

CARRINGTON, H. (1954). The American seances with Eusapia Palladino. New York: Garrett Publications.

CARRINGTON, H. (1955, Diciembre). Magic and psychic phenomena. The Conjurors' Magazine, p. 159.

CHRISTOPHER, M. (1970). ESP seers & psychics. New York: Thomas Y. Crowell.

CHRISTOPHER, M. (1973). The illustrated history of magic. New York: Thomas Y. Crowell.

COLEMAN, Earle J. (1987). Magic: A reference guide. New York: Greenwood Press.

COLLINS, H. (1983, Junio 30). Magicians in the laboratory: A new role to play. New Scientist, pp. 929-931.

CORINDA, T. (1958). Psychical research versus mentalism. En T. Corinda, Thirteen steps to mentalism (pp. 146-147). London: Corindds Magic Studio.

DAVEY, S J. (1888). Spurious mediumship. Journal of the Society for Psychical Research, 3, 199-207.

DAVEY, S. J. (1887). The possibilities of mal-observation from a practical point of view. Journal of the Society for Psychical Research, 3 , 8-44.

DAWES, E.A. (1979). The great illusionists. Secaucus, NJ: Cbartwell Books.

DAWES, E.A. (1991a, Diciembre). A rich cabinet of magical curiosities: 179. Annie Abbott the Georgia Magner: A powerful London attraction. Magic Circular, 85, 244-246.

DAWES, E.A. (1991b). Hard acts to swallow: Regurgitation as a form of entertainment through the ages. Gullet, 1, 105-112.

DAWES, E.A. (1992a, Enero). A rich cabinet of magical curiosities: 180. Annie Abbott the Georgia Magnet: The controversy rages. Magic Circular, 86, 8-10.

DAWES, E.A. (1992b, Febrero-Marzo). A rich cabinet of magical curiosities: 181. Annie Abbott, explanations and an unaccepted challenge. Magic Circular, 86, 37-39.

DAWES, E.A. (1992c, Abril). A rich cabinet of magical Curiosities: 182, Annie Abbott "demagnetisation" and return visits to Britain. Magic Circular, 86, 61-63.

DINGWALL, E.J. (1921). Magic and mediumship. Psychic Research Quarterly, 1, 206-219.

DINGWALL, E.J. (1927). How to go to a medium: A manual of instruction. London: Kegan Paul, Trench, Trubner.

DINGWALL, E J. (1962a). Very peculiar people. New Hyde Park, NY: University Books.

DINGWALL, E.J. (1962b). Some human oddities. New Hyde Park, NY: University Books.

DINGWALL, E.J. (1968a). Great Britain: Appendix. En E.J. Dingwall (Ed.), Abnormal hypnotic phenomena: A survey of nineteenth century cases, IV (pp. 153-158). New York: Barnes & Noble.

DINGWALL, E.J. (1968b). The Didier brothers. In E.J. Dingwall (Ed.), Abnormal hypnotic phenomena: A survey of nineteenth century cases, P. France (pp. 158-206). New York: Barnes & Noble.

DINGWALL, E.J. (1983). Personal communication to M. Truzzi.

DINGWALL, E. J., GOLDNEY, K. M., & HALL, T H. (1956, Enero). The haunting of Borley Rectory: A critical survey of the evidence. Proceedings of the Society for Psychical Research, 51, Parte 186.

DUNNINGER, J. (1935). Inside the medium cabinet. New York: David Kemp.

ERNST, B. M.L., & CARRINGTON, H. (1932). Houdini and Conan Doyle: The story of a strange friendship. New York: Albert and Charles Boni.

FEILDING, E. (1922). An experiment in faking "spirit" photographs. Journal of the Society for Psychical Research, 20, 219-223.

FODOR, N. (1966a). Didier brothers, Alexis and Adolph. En N. Fodor, Encyclopedia of Psychic Sciences (p. 90). Secaucus, NJ: Citadel Press. [Publicado originalmente en 1933].

FODOR, N. (1966b). Magicians. In N. Fodor, Encyclopedia of Psychic Science (pp. 211-214). Secaucus, NJ: Citadel Press. [Publicado originalmente en 1933].

FRASER-HARRIS, D.F. (1934). Sources of error in visual observations in the seance room. Psychic Science, 13(1), 31-35.

GARDNER, M.(1983a). Order and surprise. Buffalo, NY: Prometheus.

GARDNER, M. (1983b). The whys of a philosophical scrivner. New York: Quill.

GARDNER, M. (1983c). Lessons of a landmark PK hoax. Skeptical Inquirer 7(2), pp. 16-19.

GELLER, U., & PLAYFAIR, G. L. (1986). The Geller effect. London: Jonathan Cape.

GODWIN, J. (1974). Super-psychic: The incredible Dr. Hoy. New York: Pocket Books.

GOFFMAN, E. (1959). The presentation of serin everyday life. Garden City, NY: Doubleday.

GOLDSTON, W. (1933). Secrets of famous illusioinists. London: John Long.

GREGORY, A. (1985). The strange case of Rudi Schneider. Metuchen, NJ: Scarecrow Press.

GRESHAM, W.L. (1959). Houdini: The man who could walk through walls. New York: Holt, Rinehart, and Winston.

GROTH, G. [Martin Gardner]. (1952, October). He writes with your hand. Fate, pp. 39-43.

HANSEN, G.P. (1984). A brief introduction to magic for parapsychologists. Paper presented at the meeting of the Southeast Regional Parapsychological Association, Winter Park, FL.

HANSEN, G.P. (1985a). A brief overview of magic for parapsychologists. Parapsychology Review, 16(2), 5-8.

HANSEN, G.P. (1985b). Examples of a need for conjuring knowledge [Resumen]. En D.H. Weiner & R.D. Nelson (Eds.), Research in parapsychology, 1986 (pp. 185-186). Metuchen, NJ: Scarecrow Press.

HANSEN, G.P. (1986). Review of Psychic paradoxes by J. Booth. Journal of the American Society for Psychical Research, 80, 336-338.

HANSEN, G.P. (1987). Examples of a need for conjuring knowledge. En D.H. Weiner y R. Nelson (Eds.), Research in parapsychology 1986 (pp. 185-186). Metuchen, NJ: Scarecrow Press.

HANSEN, G.P. (1988). Risks of deception by subjects. Proceedings of Presented Papers: The Parapsychological Association 31st Annual Convention (pp. 163-179). Montreal, Quebec, August 17-21.

HANSEN, G.P. (1989). Some comments on the role of magicians in parapsychology. Proceedings of Presented Papers: The Parapsychological Association, 32nd Annual Convention (pp. 77-92). San Diego, CA, August 18-20.

HANSEN, G.P. (1990a). Deception by subjects in psi research. Journal of the American Society for Psychical Research, 84, 25-80.

HANSEN, G.P. (1990b, Agosto; Septiembre). Magicians who endorsed psychic phenomena. Linking Ring, 70, 52-54; 63-65, 109.

HANSEN, G.P. (1992a). Magicians on the paranormal: An essay with a review of three books. Journal of the American Society for Psychical Research, 86, 151-185.

HANSEN, G.P. (1992b). The research with B.D. [Bill Delmore] and the legacy of magical ignorance. Journal of Parapsychology, 56, 307-333.

HANSEN, G.P. (1992c). CSICOP and the skeptics: An overview. Journal of the American Society for Psychical Research, 86, 19-63.

HARALDSSON, E. & WISEMAN, R. (1995). Reactions to and an assessment of a videotape on Sathya Sai Baba. Journal of the Society for Psychical Research, 60, 203-213.

HASTINGS, R.J. (1969, Marzo). An examination of the Borley report. Proceedings of the Society for Psychical Research, 55, Parte 201.

HICKS, W. (1950a, Agosto 31). He sees the future. Toronto Star.

HICKS, W. (1950b, Agosto 17). Snoops on minds. Toronto Star.

HODGSON, R. (1884). On vision with scaled and bandaged eyes. Journal of the Society for Psychical Research, 1, 84-86.

HODGSON, R. (1886-87). The possibilities of mal-observation and lapse of memory from a practical point of view. Proceedings of the Society for Psychical Research, 4, 381-495.

HODGSON, R. (1892). Mr. Davey's imitations by conjuring of phenomena sometimes attributed to spirit agency. Proceedings of the Society for Psychical Research, 8, 253-310.

HODGSON, R. (1894). Indian magic and the testimony of conjurors. Proceedings of the Society for Psychical Research, 9, 354-366.

HOUDINI, H. (1924). A magician among the spirits. New York: Harper & Brothers.

HULL, B. "Voltd" (1977). The billion dollar bait. Deland, FL: Volcanda Associates.

HURST, L. (1897). Lulu Hurst (the Georgia wonder) writes her autobiography, andfor the first time explains and demonstrates the great secret of her marvelous power. Rome, GA: Lulu Hurst.

HYMAN, R. (1980). Pathological science: Towards a proper diagnosis and remedy. Zetetic Scholar, No.6, 31-43.

HYSLOP, J.H. (1919). Experiments in slate writing and other methods. Journal of the American Society for Psychical Research, 13, 299-313.

JAY, R. (1990). Many mysteries unravelled: Conjuring literature in America, 1786-1874. Worcester, MA: American Antiquarian Society.

KAHN, E.J., Jr. (1941, November 29). Profiles: Nothing up his sleeve. New Yorker, pp. 26-30, 32, 34, 36.

KELLAR, H. (1890). A magician tour up and down and round the earth. Chicago: Donohue, Henneberry.

KLAPP, O. E. (1962). Heroes, villains, andfools: The changing American character. Englewood Cliffs, NJ: Prentice-Hall.

KRIPPNER, S. (1984, Julio). The Randi caper. AHP [Association for Humanistic Psychology] Newsletter, pp. 20-21.

LAMB, G. (1976). Victorian magic. London: Routlege & Kegan Paul.

MASKELYNE, J.N. (1885a, April 18). A spiritualistic expos. 1. A chat with Mr. Maskelyne. Pall Mall Gazette, pp. 4-5.

MASKELYNE, J.N. (1885b, Abril 20). A spiritualistic expose. 11. A chat with Mr. Maskelyne. Pall Mall Gazette, pp. 4-5.

MASKELYNE, J.N. (1885c, April 23). Letter: Mr. Maskelyne and the spiritualists. Pall Mall Gazette, p. 2.

MASSEY, C.C. (1886-1887). The possibilities of mal-observation in relation to evidence for the phenomena of spiritualism. Proceedings of the Society for Psychical Research, 4, 75-110.

MILLER, R. (1993, Diciembre). The 1993 PEA psychic survey. Vibrations [Newsletter of the Psychic Entertainers Association], p.15.

MORRIS, R.L. (1982). An updated survey of methods and issues in ESP research. En S. Krippner (Ed.), Advances in parapsychological research (Vol. 3, pp. 5-40). New York: Plenum.

MORRIS, R.L. (1986). What psi is not: The necessity for experiments. En H. L. Edge, R. L. Morris, J. Palmer & J. H. Rush, Foundations of parapsychology: Exploring the boundaries of human capability (pp. 70-110). Boston: Routledge & Kegan Paul.

MORRIS, S. (1982, Enero). Interview: Martin Gardner. Omni, pp. 67-69, 80-81, 84, 86.

MULLER, L. (1980). Para-Psi und pseudo: Tarapsychologie und die Wissenschaft von der Tauschung [Paranormal and pseudo psi: Parapsychology and the science of deception]. Berlin: Ullstein.

NELSON, R.A. (1964). The art of cold reading. Columbus, OH: Nelson Enterprises.

NEWCOMB, S. (1904a). Professor Simon Newcomb on the Georgia Magnet. Journal of the Societyfor Psychical Research, 11, 169-170.

NEWCOMB, S. (1904b). Professor Newcomb on "the Georgia Magnet." Journal of the Societyfor Psychical Research, 11, 242-243.

PARRISH, R. (1994). Words about wizards. Glenwood, IL: David Meyer Magic Books.

PEDLEY, C. H. (1899). Exposure of a trick code. Journal of the Society for Psychical Research, 9, 61-64.

PRICE, D. (1985). Magic: A pictorial history of conjurers in the theater. New York: Cornwall Books.

PRICE, H. (1923, December). The psychic element in legerdemain. Light, pp. 772-773.

PRICE, H. (1926). Some early works on false mediumship. Journal of the American Society for Psychical Research, 20, 220-226.

PRICE, H. (1929). Short-title catalogue of works on Psychical research, spiritualism, magic, psychology, legerdemain and other methods of deception, charlatanism, witchcraft and technical works for the scientific investigation of abnormal phenomena from circa 1450 to 1929 A.D. Proceedings of the National Laboratory of Psychical Research, 1, Parte 2.

PRICE, H. (1930). Rudi Schneider: A scientific examination of his mediumship. London: Methuen .

PRICE, H. (1932a, Agosto 5). Conjurers and psychic phenomena. Light, pp. 374-375.

PRICE, H. (1932b, Agosto 12). Conjurers and psychic phenomena. Light, pp. 386-387.

PRICE, H. (1932c, Septiembre 9). Conjurers' tributes to spiritualism. Light, pp. 440.

PRICE, H. (1935). Bulletin 1- Supplement to short-title catalogue of works on psychic research, alleged abnormal phenomena, spiritualism, magic, witchcraft, legerdemain, charlatanism and astrology. London: University of London Council for Psychical Investigation.

PRICE, H. (1936). Confessions of a ghost hunter. London: Putnam.

PRICE, H. (1940). The most hauntedhouse in England: Ten years' in vestigations of Borley Rectory. London: Longmans, Green.

PRICE, H. (1946). The end of Borler Rectory. London: George G. Harrap.

RANDI, J. (1983a). The project alpha experiment: Part 1. The first two years. Skeptical Inquirer, 7(2), 24-33.

RANDI, J. (1983b). The project alpha experiment: Part 2. Beyond the laboratory. Skeptical Inquirer, 7(3), 36-45.

RANDI, J. (1983c, July 28). Psience research. New Scientist, p. 300.

RANDI, J. (1983d). A test of psychokinetic metal bending. An aborted experiment [Resumen]. En W.G. Roll, J. Beloff & R. A. White (Eds.), Research in parapsychology 1982 (pp. 112-113). Metuchen, NJ: Scarecrow Press.

RANDI, J. (1991). James Randi: Psychic investigator. London: Boxtree.

REICHBART, R. (1978). Magic and psi: Some speculations on their relationship. Journal of the American Society for Psychical Research, 72, 153-175.

RINN, J.F. (1950). Sixty years of psychical research: Houdini and I among the spiritualists. New York: Truth Seeker.

STRATTON, G.M. (1921). The control of another person by obscure signs. Psychological Record, 28, 301-314.

THALBOURNE, M.A. (1995). Science versus showmanship: A history of the Randi hoax. Journal of the American Society for Psychical Research, 89, 344-366.

THURSTON, H. (1929). My life of magic. Philadelphia: Dorrance.

THURSTON, H. (1931, Septiembre). Letter: Astrology. Linking Ring.

TRUZZI, M. (1984a). The role of conjurors in psychical research and parapsychology [Resumen]. En R.A. White & R.S. Broughton (Eds.), Research in parapsychology 1983 (pp. 120-121). Metuchen, NJ: Scarecrow Press.

TRUZZI, M. (1984b, Diciembre 21). Thoughts on the disclaimer. Magick, pp. 1715-1716.

TRUZZI, M. (1987a). Reflections on "project alpha": Scientific experiment or Conjuror's illusion? Zetetic Scholar, 12/13, 73-98.

TRUZZI, M. (1987b). On pseudo-skepticism. Zetetic Scholar, 12/13, 3-4.

TRUZZI, M. (1993). The sociology and social psychology of hoaxes. En G. Stein (Ed.), Encyclopedia of hoaxes (pp. 292-297). Detroit, MI: Gale Research.

TRUZZI, M. (1995a, Enero). Retrocognitions. Vibrations [Newsletter of the Psychic Entertainers Association], p.14.

TRUZZI, M. (1995b, Octubre-Diciembre). An end to the Uri Geller vs. Randi vs. CSICOP litigation? PA News, pp. 9-11.

VON SCHRENCK-NOTZING, Baron A. (1904). Die traum Magdeleine: Einepsychologische Studie iiber Hypnose und dramatische Kunst [Theftmale dream dancer Magdeleine: A psychological study on hypnosis and dramatic art]. Stuttgart: Enkc.

WERRY [pseudónimo de Werner Geissler-Werry]. (1980). Interview mit Eberhard Bauer. "Magische" Welt: Zeitschrift fur Angewandte Tricktecbnik und Wabrnebmungstduschung ['Wagical" World: Journal of Applied Trick Techniques and the Description of Perception], 29 (1), 8-12.

WILMETH, D.B., & STANLEY, J.H. (Eds.). (1989). Books at Brown 1987, Volume A-AXIV. Providence, RI: The Friends of the Library of Brown University.

WISEMAN, R., BELOFF, J., & MORRIS, R. L. (1992). Testing the claims of Sorrat. Journal of the Society for Psychical Research, 58, 363-376.

WISEMAN, R. (1991). Differential recall of a pseudo-psychic demonstration as a function of belief in the paranormal. Proceedings of Presented Papers: The Parapsychological Association 34th Annual Convention (pp. 412-428).

WISEMAN, R. (1992). The Fielding report: A reconsideration. Journal of the Society for Psychical Research, 58, 129-152.

WISEMAN, R., & HARALDSSON, E. (1995). Investigation of macro-PK in India: Swami Premananda. Journal of the Society for Psychical Research, 60, 193-202.

WISEMAN, R., & MORRIS, R.L. (1994). Modelling the stratagems of psychic fraud. European Journal of Parapsychology, 10, 31-44.

WISEMAN, R., & MORRIS, R.L. (1995a). Recalling pseudo-psychic demonstrations. British Journal of Psychology, 86, 113-125.

WISEMAN, R., & MORRIS, R.L. (1995b). Guidelines for testing psychic claimants. Amherst, NY: Prometheus.

ZOLLNER, J. C. F. (1888). Transcendental physics. Boston: Colby & Rich.

 
1 Con el término "magia" me refiero a aquellos autores británicos que destacan lo "mágico" para distinguirlo de la "magia real" del ocultismo (tal como lo empleaba Aleister Crowley), aunque hoy se conoce como "magik". El término "investigación psíquica" va mas allá de los límites del laboratorio, y se presenta bajo el término "parapsicología."

* Este artículo fue originalmente publicado en inglés en Advances in Parapsychological Research (Vol. 8, pp. 221-276) editado por Stanley Krippner. Agradecemos al editor su generoso permiso para reproducir el presente capítulo. Fue publicado en español en la Revista Argentina de Psicología Paranormal, 15,.1-2, Enero-Abril 2004, y traducido del inglés por Jorge Villanueva.

** Marcello Truzzi (1935-2003) fue profesor de sociología en el Departamente de Sociología de la Eastern Michigan University de Ypsilanti en Michigan, Estados Unidos. También fue miembro fundador y miembro del Consejo del Committee for the Scientific Investigation of Claims of the Paranormal (CSICOP), y el primer editor de su revista The Zetetic (que luego pasó a llamarse The Skeptical Inquirer). Fundó el Center for Scientific Anomalies Research (CSAR) y editó su propia revista, el Zetetic Scholar el cual promovía la interacción entre críticos y proponentes de la existencia del fenómeno paranormal. Entre sus obras, podemos destacar, junto a Arthur Lyons (1991) The Blue Sense: Psychic Detectives and Crime.



Mesa redonda

TOCADOS POR DIOS: DIVERSAS MIRADAS DE LA EXPERIENCIA MISTICA

Presentación de Alejandro Parra

Alejandro Parra
Alejandro Parra
rapp@fibertel.com.ar
El día Viernes 18 de Noviembre del 2011 tuvo lugar en el Museo Roca -Instituto de Investigaciones Históricas- la mesa redonda "Tocados por Dios: Diversas Miradas de la Experiencia Mística", donde expusieron Patricia Arca Mena, Gustavo Ludueña y Nicolas Viotti sus perspectivas respecto al diálogo entre ciencia y religión, la experiencia religiosa y la trascendentalidad, y el estudio de los correlatos neurobiológicos de la experiencia mística.

La experiencia mística tiene múltiples perspectivas; dimensiones de un prisma que componen un cuerpo desconocido o -cuanto mucho- desintegrado de la percepción humana. Antiguas sabidurias, en Oriente y Occidente, han apreciado el valor de la experiencia mística para construir civilizaciones enteras y conquistar imperios. Pero en nuestros tiempos, el predominio de la razón y la lógica occidental ha menospreciado su estatus y significado, reduciendo la experiencia mística a un equivalente disfuncional, o quizá de una manera más tolerante, producto de un inusual modo de ser y convivir en nuestra singular sociedad plural. La meditación, los sueños, las experiencias "cumbre", la sanación espiritual, la oración, el éxtasis, el ascetismo, el Samâdhi en el yoga, el Satori en el budismo zen, son experiencias que permiten acceder a un súbito acto de conocimiento integral -tan profundo y revelador- que transforma la condición humana y la compele a una resignificación de los métodos para validar la naturaleza de la realidad y el entorno que nos rodea.

Tres expositores provenientes de distintos campos de la ciencia examinaron el valor de tales experiencias desde un abordaje neurocientífico contemporáneo, antropológico, psicológico y social pocas veces exhibido al gran público. Un desafío abierto a la revelación del misterio de la conexión mente-cuerpo y lo trascendente.

Patricia Arca Mena durante su exposición y detalle del público participante
Patricia Arca Mena durante su exposición y detalle del público participante.


De izq. a der.: Alejandro Parra, Gustavo Ludueña, Nicolás Viotti, y Patrica Arca Mena.
De izq. a der.: Alejandro Parra, Gustavo Ludueña, Nicolás Viotti, y Patrica Arca Mena.



LA EXPERIENCIA RELIGIOSA COMO EPISTEMOLOGIA DE LO NUMINOSO

Gustavo A. Ludueña *

Gustavo A. Ludueña
Gustavo A. Ludueña
galuduena@hotmail.com
INTRODUCCION

La experiencia mística representa una de las dimensiones cruciales de la práctica religiosa. Aquí será entendida como el vínculo que el sujeto creyente establece con un mundo-otro que es variable según los términos en que sea definido por cada sistema de creencia. Este mundo etéreo asociado a cosmogonías, cosmologías y otras formas de explicación del propio mundo y del universo, no está divorciado de la experiencia cotidiana del creyente sino que encuentra ilimitadas modalidades para hacérsele presente. Se adoptaron aquí tres nociones que no sólo remiten a ese espacio otro, sino que sostienen fuertes vínculos entre sí. Ellas son las de configuraciones de lo numinoso, epistemología y tecnologías del ser. Creo que estas concepciones pueden enmarcarse dentro de un marco analítico -que denomino estructura episteme-numen-, y que las mismas pueden ser entendidas como un triángulo conceptual necesario para dar cuenta de la experiencia mística. Antes de abordar el carácter relacional de aquella estructura, veamos primero los rasgos que identifican a este mundo distinto del cotidiano.


EL MUNDO-OTRO

El filósofo Rudolf Otto logró una aproximación a este mundo otro a través de la noción de numen. Según este autor, lo numinoso no puede ser definido sino que "sólo puede suscitarse, sugerirse, despertarse".1 Otto resuelve este problema de definición mediante las características que el numen reviste. La primera de ellas se refiere al "sentimiento de criatura". Es decir, al "sentimiento de la criatura de que se hunde y se anega en su propia nada y desaparece frente a aquél que está sobre todas las criaturas".2 Esta característica que implica ya un "objeto fuera de mí" remite en forma directa al numen, que es justamente el motivo causal del sentimiento de criatura y, por lo tanto, su "sentimiento concomitante".3 Un segundo rasgo está dado por el "mysterium tremendum". El cual evoca en el creyente un estado anímico distinto del sentimiento de criatura. Asociándose, por un lado, con "lo oculto y secreto, lo que no es público, lo que no se concibe ni entiende, lo que no es cotidiano y familiar"4 y, por el otro lado, con lo estrictamente tremendum que no es otra cosa que el temor. Sin embargo, este último no se explica por un miedo "natural". Lo tremendum constituye un "pavor numinoso" que no se distingue sólo en grado del miedo corriente. Es de una cualidad completamente diferente que a menudo puede incluir un "efecto corporal de reacción".5 Por otra parte, este temor expresado hacia el numen se correlaciona con una característica del objeto numinoso que Otto señala como la cólera o la ira de Dios.6 El cual remite a la "majestas" o majestad, es decir, "el elemento de poder, potencia, prepotencia, omnipotencia" del numen.7 A esta majestad tremenda de superioridad absoluta se opone el sentimiento de criatura que "exige el aniquilamiento del yo".8

El filósofo Rudolf Otto logró una aproximación a este mundo otro a través de la noción de numen  o energia. La noción desarrollada por Otto sobre lo numinoso puede constituirse en una herramienta útil para la empresa analítica que pretenda encarar los sistemas de simbología religiosa.
El filósofo Rudolf Otto logró una aproximación a este mundo otro a través de la noción de numen o "energia". La noción desarrollada por Otto sobre lo numinoso puede constituirse en una herramienta útil para la empresa analítica que pretenda encarar los sistemas de simbología religiosa.
Finalmente, una última característica de lo numinoso es lo que Otto denomina "energía". Que se pone de manifiesto en el amor o la cólera de Dios y "evoca expresiones simbólicas, tales como vida, pasión, esencia afectiva, voluntad, fuerza, movimiento, agitación, actividad, impulso".9 En suma, esta tercera cualidad remite a un numen absolutamente viviente que elude su reificación en una divinidad enteramente racionalizada. He aquí un componente lúcidamente destacado que remite a lo irracional en toda religión. Debe evitarse la "visión parcial e incorrecta" que consiste en "la idea de que los predicados racionales [espíritu, razón, voluntad inteligente, sabiduría, etc.] apuran y agotan la esencia de la divinidad".10 Es en este punto justamente donde interviene más directamente la categoría de "lo santo". La cual hace referencia no sólo a un comportamiento moral (como la bondad, por ejemplo), sino a una dimensión "inefable […] completamente inaccesible a la comprensión por conceptos".11 Este plusvalor de significación requiere para el autor de un término que designe lo santo "menos su componente moral, y […] menos cualquier otro componente irracional".12 Este algo que "vive en todas las religiones como su fondo y médula" es lo que Otto denomina bajo el nombre de "lo numinoso".

Pese a que no es mi intención expresar una crítica a esta visión filosófica creo que es necesario hacer algunos breves comentarios. En primer lugar, se trata de una producción intelectual que descansa en un basamento religioso estrictamente judeocristiano, y por lo tanto su empleo para el análisis de religiones y/o grupos religiosos contemporáneos debe ser cuidadosamente ponderado. Por otra parte, como toda producción socio-históricamente situada aparece claramente influenciada por un evolucionismo aún vigente en la Europa de principios de siglo XX. Lo cual se manifiesta de modo patente cuando hace referencia al catolicismo como una religión superior en relación a "otras formas y grados de religión", por sus "conceptos de eminente claridad, transparencia y plenitud".13

Asimismo, se pone de relieve una visión de tono esencialista que promete a priori la aparición de lo irracional en toda religión existente. Por otro lado, manifiesta una concepción fuertemente psicologicista marcadamente centrada en el sujeto individual e ideal experimentando y viviendo por sí solo todo este encuentro con la divinidad, dejando al margen del análisis su entorno colectivo y aún sociológico. Este último aspecto se relaciona con otro poderosamente presente en el trabajo de Otto que es el abismo instalado a partir del binomio sujeto-numen, el cual se caracteriza por las cualidades diametralmente opuestas con las que estarían revestidos. Finalmente, cabría preguntarse si la distinción tajante que Otto se esfuerza por demostrar en todas las religiones entre lo racional y lo irracional es realmente así, o habría que pensar en un hiato meramente analítico que guarda poca o ninguna correspondencia con la experiencia religiosa real según la viven los creyentes.

No obstante estas observaciones, creo que su concepto de lo numinoso representa una categoría sumamente útil para el abordaje que desde las ciencias sociales podemos realizar en relación con los grupos religiosos, particularmente en los estudios sobre cosmologías, cosmogonías, etc. En mi trabajo de campo en comunidades benedictinas pude comprobar en numerosas ocasiones su utilidad. Como creyentes católicos, los monjes se comprenden dentro del dogma oficialmente aceptado por la Iglesia Romana. Sin embargo, dentro de su cosmología se destaca la presencia de ciertas figuras numinosas que juegan una participación activa en la vida religiosa colectiva. Tal es el caso del fundador de la Orden Benedictina a la cual estos monjes pertenecen. En efecto, San Benito de Nursia (480-547 d.C.) fue un anacoreta italiano que creó los primeros monasterios dando origen a la orden religiosa que lleva su nombre. Su contribución más prominente fue la redacción de la Regla de los Monjes, que establece en términos precisos el modo en que debe desarrollarse la vida en el monasterio. Su profusión fue significativa a lo largo de todo el medioevo y aún en nuestros días es fácil advertir su impronta en estas casas religiosas.

Es posible hallar el culto, o la relación con, otras entidades numinosas para otras religiosidades. En la complejidad de estas cosmologías pueden advertirse las modalidades y multiplicidad de formas en las que el numen se presenta, cómo es caracterizado y definido por los actores, qué atributos le son concedidos, etc. La noción desarrollada por Otto sobre lo numinoso puede constituirse en una herramienta útil para la empresa analítica que pretenda encarar los sistemas de simbología religiosa, siempre y cuando sean consideradas las observaciones formuladas al comienzo. Esta categoría de trabajo expresa su utilidad tanto en el estudio de grupos concretos tomados separadamente, como en el análisis de tipo comparativo focalizado en aspectos particulares. Su potencialidad para la investigación antropológica-etnográfica se pone especialmente de manifiesto para el abordaje de las experiencias del tipo místico. En la realidad que estudiamos nos encontramos a menudo con situaciones en las que el mundo "real" y el mundo-otro parecen fundirse en un punto temporo-espacial liminal, en el que la presencia de lo numinoso se hace patente para el creyente. Esta experiencia del numen desnuda la preponderancia de otras dos dimensiones que conforman junto a lo estrictamente numinoso una unidad indisoluble, y que sólo es posible desvincular -aunque no sin dificultades- en forma analítica. Estas están constituidas, por un lado, por los saberes y conocimientos que los sujetos poseen y construyen en relación con el numen y, por otro lado, por las modalidades en las que los mismos sujetos establecen el vínculo místico con él. Veamos algunos de los aspectos que componen a estas últimas.


LAS TECNOLOGÍAS DEL SER

El empleo del concepto de tecnología como categoría conceptual para el análisis de los modos en que los sujetos trabajan sobre la conciencia o sobre sus propios cuerpos fue ampliamente utilizada por numerosos autores.14 Yo mismo hice uso de ella para el estudio del silencio en una comunidad monástica de benedictinos.15 Otros autores que se refirieron a los "mecanismos de relación con lo sagrado" parecen igualmente apuntar en esta dirección.16 Como toda categoría de este tipo presenta las dificultades esenciales de la distancia conceptual que ella puede presentar con relación a los usos nativos de aquello que pretende explicar. Por ello es necesario recordar que las nociones empleadas deben ser siempre, cualesquiera que éstas sean, las que tienen que adecuarse a la realidad etnográfica y no a la inversa. En el caso contrario, deben ser lisa y llanamente descartadas para el estudio. En este sentido, el concepto general de tecnología parece sugerir prima facie un carácter instrumental, utilitario, y hasta finalista que puede empañar la justa apreciación de los usos que los nativos hacen de ciertas prácticas. Este es un aspecto fundamental a tener en cuenta.

Uno de los primeros en emplear esta noción fue Marcel Mauss, quien acuñó el término de "técnicas corporales" para referirse a "la forma en que los hombres, sociedad por sociedad, hacen uso de su cuerpo en una forma tradicional".17 Con esta idea Mauss pretendía englobar a todas aquellas prácticas que comportaban ciertas posturas, movimientos, etc., que involucraban al cuerpo y que tenían un claro origen cultural. Así, actividades tan triviales como caminar, correr, nadar, estar de pié, etc., encontraban su racionalidad dentro del sistema simbólico de la sociedad.18 De este modo, "no puede haber un modo natural de considerar el cuerpo que no implique al mismo tiempo una dimensión social".19 También el antropólogo Claude Lévi-Strauss se ha hecho eco de esta línea de pensamiento, sosteniendo que desde las modalidades de construcción de herramientas líticas, hasta las técnicas orientales de respiración y las diferentes formas de gimnasias, pueden ser analizadas bajo esta óptica.20 Por otra parte, estos trabajos que enfatizan los usos del cuerpo y su entorno sociológico pueden ser complementados con los realizados por el filósofo francés Michel Foucault.

Marcel Mauss acuñó el término de técnicas corporales para referirse a la forma en que los hombres, sociedad por sociedad, hacen uso de su cuerpo en una forma tradicional.
Marcel Mauss acuñó el término de "técnicas corporales" para referirse a "la forma en que los hombres, sociedad por sociedad, hacen uso de su cuerpo en una forma tradicional.
En los cuales se distinguen cuatro tipos de tecnologías: 1) las de la producción; 2) las de los sistemas de significación; 3) las del poder; y 4) las tecnologías del yo. Estas últimas "permiten a los individuos efectuar, por cuenta propia o con la ayuda de otros, cierto número de operaciones sobre su cuerpo y su alma, pensamientos, conducta, o cualquier forma de ser, obteniendo así una transformación de sí mismos con el fin de alcanzar cierto estado de felicidad, pureza, sabiduría o inmortalidad".21 En este enfoque se ponderan otras dimensiones, menos contempladas en los trabajos de Mauss, que se refieren a los aspectos puramente psicológicos del individuo. Desde una perspectiva estrictamente genealógica rastrea las raíces morales de la cultura occidental hasta los antecedentes de la civilización grecorromana.

De este modo, señala la importancia del ejercicio de la askesis (ascesis o ascetismo) entre los antiguos griegos, particularmente en determinados grupos filosóficos -como los estoicos, los pitagóricos y los cínicos-. La askesis era llevada a cabo mediante dos tecnologías que se encuentran ponderadas en todo el trabajo de Foucault, y que aluden a dos dimensiones del ser -el cuerpo y el alma- que prefiguran las expresiones de las filosofías platónica, agustina y cartesiana. Ellas son la melete o meditatio y la gymnasia. Mientras la primera "es una experiencia imaginaria que ejercita el pensamiento" y se refiere a la meditación a través del conocimiento de sí, la segunda está relacionada con la práctica de ciertos ejercicios corporales como la abstinencia sexual, el ayuno, etc.22 Cada una de estas técnicas estuvieron presentes en las actividades cotidianas de distintas escuelas filosóficas, aunque no siempre con la misma significación ni con la misma intensidad. Tecnologías del ser tales como el cuidado y el conocimiento de sí presentes en la Antigua Grecia, en los gnósticos, y en las primeras tradiciones del cristianismo monástico, proyectan su permanencia en el monacato actual.23 La experiencia mística -es decir, el encuentro con la divinidad según lo hemos definido al comienzo- se efectúa entonces aquí mediante el empleo de diferentes técnicas o tecnologías del ser.24

Por otra parte, en relación con lo que hasta aquí ha sido señalado cabría hacer mención a un último aspecto que no puede ser soslayado en el análisis de las experiencias místicas de lo numinoso en el campo religioso. Me refiero a lo que eventualmente podría ser denominado como la dimensión sensorio-perceptiva presente en este tipo de experiencias. La consideración antropológica de este punto parece conducirnos a los límites mismos de nuestra disciplina. Aunque el marco analítico presentado comprende claramente esta dimensión. En consecuencia, esta última se encuentra profundamente ligada tanto a las epistemologías como a las técnicas y, por supuesto, a lo numinoso mismo, ya que es éste al fin y al cabo el que parece despertar ciertas sensaciones o percepciones en los sujetos que desarrollan estas experiencias. Estados de paz, de plenitud, de alteración de consciencia, de visión, etc., se presentan en estos sistemas de creencia, a veces en forma individual y otras en forma colectiva.25 En modo alguno es pretensión de este trabajo alcanzar un modelo explicativo en relación a esta dimensión que reviste aristas tan complejas, aunque sí pueden ser considerados ciertos puntos de interés. Pese a ser tomado como una perogrullada, debe recordarse que la mente humana aún con las diferencias culturales que caracterizan a nuestra especie "es en todas partes una y la misma cosa, con las mismas capacidades".26

Por otra parte, la percepción parece rehuir a tal universalismo, como bien lo expresó Lévi-Strauss al referirse al peso del componente cultural en relación al qué y al de qué modo se percibe lo que se percibe. Lo cual realiza mediante un ejemplo etnográfico de cómo para determinados grupos humanos era posible observar el planeta Venus a la luz del día, y para otros no.27 El producto de la percepción no sólo implica un proceso fisio-biológico sino que implica igualmente un proceso cultural. En este sentido, Lévi-Strauss afirma que en la constitución del paradigma científico durante los siglos XVII y XVIII se enfatizó la negación de lo sensitivo. La ciencia emergente sólo podía constituirse y reemplazar al pensamiento místico y mítico solamente "si volvía la espalda al mundo de los sentidos, al mundo que vemos, olemos, saboreamos y percibimos, que el mundo sensorial era un mundo ilusorio frente al mundo real, que sería el de las propiedades matemáticas, que sólo pueden ser descubiertas por el intelecto y que están en total contradicción con respecto al testimonio de los sentidos".28

Estas sugerentes observaciones resultan de importancia para su aplicación a la cuestión que nos convoca. Por cierto que el "mundo real" al que este autor se refiere poco tiene que ver con ese mundo otro que se constituye en la patria de lo numinoso. Por otro lado, la sensorialidad sobre ese mundo puede tener pocas o ninguna correspondencia con las percepciones que el sujeto puede experimentar en relación con el numen. Sin embargo, es posible rescatar el hecho de que en tanto que la percepción se constituya en un proceso en el cual la cultura mantenga una presencia activa, su intervención en las experiencias místicas generadas en determinados sistemas de creencia también responda a la especificidad de los mismos. Lo cual significa que tanto lo percibido como el modo en que se percibe sea concreto al sistema que se está considerando. Los ejemplos mencionados apuntan en este sentido. Las configuraciones de lo numinoso son diferenciales, las epistemologías y las tecnologías empleadas también lo son.

Es posible entonces que los productos perceptivos de los sujetos de estos grupos tampoco sean iguales. Una contribución de Bateson parece arribar a idénticas conclusiones, cuando afirma que "el mecanismo de percepción, la manera en que uno percibe, está regido por un sistema de presuposiciones que yo llamo nuestra epistemología particular: toda una filosofía profundamente insertada en nuestro espíritu pero más allá de nuestra consciencia".29 Esta observación introduce la particularidad epistemológica del modo de percibir, es decir, del modo en que el sujeto establece su relación con el numen en la experiencia mística. Existe una indudable asociación entre percepción y conocimiento. Podemos estar seguros de que varios ejemplos de experiencias religiosas nos mostrarían la importancia que revisten los conocimientos sobre lo numinoso y sobre cómo abordarlo para construir un vínculo con él en cualquiera de sus formas. Entonces, ¿de qué modo es posible realizarlo sin la posesión de estos saberes que permiten tal relación? La epistemología justamente posibilita esta meta. En cada uno de estos sistemas de creencia caracterizados por las especificidades irreductibles de sus propias configuraciones numinosas, se circunscriben sistemas cognitivos que requieren de técnicas concretas que hagan posible el contacto sujeto-numen que se consuma en la experiencia mística.30


LA ESTRUCTURA EPISTEME-NUMEN

Los sistemas de creencia construyen sus propios mundos-otros. Estos sacro-espacios de alteridad se constituyen en la patria eterna de los númenes que en ella habitan. Tales alusiones denotan la versatilidad de la categoría desarrollada por Otto para el estudio de las figuras simbólicas que devienen en el otro del sujeto creyente, el cuál sólo puede entrar en relación con ellas en la instancia peculiar de la experiencia mística. El numen o los númenes, o lo numinoso en general, pueden adoptar formas tan diversas, heterogéneas y complejas como tantos sean los sistemas de creencia en los que aquéllos se presenten. Lo numinoso tratado apriorísticamente y sin un sistema simbólico-creencial de referencia pierde su anclaje ontológico-existencial y, por lo tanto, sólo obtiene su especificidad configuracional en el momento en que hacemos alusión a un sistema X. En consecuencia, puede uno referirse a númenes estrictamente determinados (n1, n2, n3, etc.) por el pensamiento nativo. Así, como categoría teórica abstracta solamente sirve a la especulación, de modo tal que únicamente se posee de realidad (podríamos decir de vida) cuando se introduce de lleno en el campo etnográfico. Sólo en esta manera la noción de lo numinoso se constituye en una herramienta susceptible de escudriñar en el mundo otro nativo.

Ahora bien, este concepto que permite la evaluación de las características, poderes, personificaciones, relaciones, ámbitos de influencia, etc., de los númenes involucrados, implica necesariamente el manejo por parte de los sujetos de un conjunto de saberes relacionados con dichas ontologías.31 Estos conocimientos se adquieren tanto a través del estudio y la reflexión como mediante la experiencia vivida en la práctica frecuente. Asimismo, la construcción de este saber comporta la emergencia de epistemologías nativas diferenciales, cuya especificidad está dada por las configuraciones particulares del numen. Se incluye aquí, por ejemplo, el cómo construir, manejar y experimentar la situación de vínculo con lo numinoso; los ámbitos propicios para su realización; las hermenéuticas generadas entorno a estas mismas experiencias místicas; las distintas modalidades de acceder a lo numinoso, etc. Es decir, el cómo se conoce acerca de lo que se conoce. Es así que para dos sistemas de creencia dados (X, Y) se conforman marcos epistemológicos particulares de abordaje de lo numinoso (e1, e2) que hacen posible al sujeto el vínculo místico con el mundo otro.

Este saber -que no es sólo teórico sino fundamentalmente pragmático- forma parte de un sistema de prácticas (podríamos decir de un habitus), al modo en que fue definido por Pierre Bourdieu, que remite específicamente a un saber hacer.32 Esta epistemología, que involucra un conocimiento práctico, está inextricablemente ligada a lo numinoso. Pero también se halla asociada a las tecnologías que el sujeto utiliza en su relación con el numen. Debe recordarse en este punto la necesidad de no concebir a estas tecnologías como una mera herramienta externa instrumentalizadora para obtener un fin. En efecto, estas tecnologías son cuerpo, son consciencia, y forman parte del ser como una totalidad. Tampoco son innatas al modo de la competencia chomskiana, sino adquiridas en un proceso de socialización a la manera del habitus bourdieuano. Estas tecnologías del ser de uso individual o colectivo, conscientes o inconscientes, entramadas en los cuerpos y en las mentes, adquiridas, comportan al igual que lo numinoso y las epistemologías saberes bien concretos. Es lícito entonces afirmar que en cada uno de los sistemas particulares se presentan, junto a las mencionadas configuraciones de lo numinoso y a las epistemologías, ciertas tecnologías del ser (t1, t2, t3, etc.) que hacen posible la aproximación del sujeto con el mundo otro y la consecuente construcción de algún tipo de vínculo con el numen.

La consecuencia más directa de todo esto es que el sujeto no se lanza al encuentro de lo numinoso en un estado de desnudez ontológica, sino que lo hace con las vestimentas provistas por un conjunto de saberes que posibilitan la constitución de este vínculo simbólico-existencial. Es necesario entonces detenerse en las cualidades de estos particulares conocimientos. En primer lugar, debe señalarse su carácter nativo-cultural, es decir, la especificidad que lo asocia a un particular sistema de creencia definiendo una cierta dimensión identitaria (esta última sin duda junto a otros elementos en los que no nos hemos detenido). Cabría mencionar aquí las tradiciones de las cuales muchos de estos grupos se hacen eco incorporando y resignificando saberes precedentes. Un segundo aspecto relacionado con el anterior es el matiz profundamente heterogéneo que parece caracterizar a estos saberes. En este sentido, a los conocimientos sobre lo numinoso, las epistemologías, las tecnologías y las tradiciones -que ya de por sí dibujan un paisaje bastante heteróclito y complejo-, se suman a menudo saberes cuyo origen se encuentra fuera de la propia doctrina o teología. Me refiero a conocimientos profanos como historia, política, economía, ciencia, etc., que engrosan el campo cognitivo y juegan un papel de no poca envergadura en los procesos hermenéuticos del numen. En otro trabajo analicé el modo en que los saberes médicos eran incluidos en la construcción de un discurso interpretativo en relación con un supuesto caso de posesión diabólica, junto a otros elementos estrictamente teológico-doctrinales.33

Un último punto a ser mencionado, que se desprende de todo este trabajo, es el vínculo inextricable que dichos saberes guardan con el numen. Estos conocimientos heterogéneos de los sujetos conforman un campo cognitivo desde el cual se torna viable cualquier relación construida con lo numinoso pudiendo, por otra parte, ser comprendido dicho campo dentro lo que Foucault denominó como "episteme"34. Este autor se refirió a esta noción no en los términos de "una teoría subyacente, sino un espacio de dispersión, un campo abierto y sin duda indefinidamente descriptible de relaciones"35. Foucault emplea la idea de episteme para aludir a las matrices de pensamiento -nutridas evidentemente por una enorme cantidad de conocimientos- de un período histórico relativamente prolongado -por lo cual dichos saberes son particulares a esta etapa-, con el objeto de explicar la emergencia de determinados paradigmas científicos (por ejemplo, el modelo médico o las ciencias humanas) así como la constitución de ciertas maneras de conceptualizar algunos aspectos de la realidad, cualesquiera que éstos sean (por ejemplo, la locura).

La perspectiva foucaultiana, más genealógica que histórica, apunta justamente a concentrarse en lo disperso, lo confuso, lo heterogéneo, lo conflictivo. Por lo cual esta visión no sólo trasunta una crítica a ciertas formas de hacer historia (tal como el mismo autor lo señala), sino que además se encuentra perfectamente reflejado en la noción misma de episteme. En este sentido, Foucault afirma que en "una cultura y en un momento dados, sólo hay siempre una episteme, que define las condiciones de posibilidad de todo saber, sea que se manifieste en una teoría o que quede silenciosamente investida en una práctica"36. La episteme está dirigida a dar cuenta del campo cognitivo de una cultura, de un tiempo histórico y, en consecuencia, de la heterogeneidad y complejidad intrínseca a esta particular unidad analítica de conocimientos. Es a partir de una determinada episteme que una sociedad construye sus modelos de ciencia, de pensamiento y de abordaje de la realidad. Mi adopción del concepto de episteme apunta justamente a rescatar estos elementos históricos, difusos, complejos y heteróclitos pero no ya a un nivel macro-cultural, sino a un plano micro-sociológico circunscripto a las fronteras ambiguas de un sistema de creencia. Los saberes antes mencionados referidos a lo numinoso, las epistemologías, las tecnologías y las tradiciones (que intervienen directamente en la creación y re-creación de los elementos anteriores), pueden ser subsumidos dentro de la noción de episteme37.

Por lo tanto, lo que aquí fue entendido como experiencia mística -que en el sentido sui generis adoptado involucra cualquier tipo de acto, práctica o situación a través de la cual el sujeto creyente construye algún tipo de vínculo con lo numinoso-, comporta la injerencia y el interjuego de las dimensiones denotadas en el numen y en la episteme. Por tal motivo, este tipo de experiencias religiosas pueden ser analíticamente abordadas en la investigación antropológica desde lo que aquí se denomina como la estructura episteme-numen. Esta estructura de naturaleza vincular caracteriza la experiencia vívida en la que se refleja cuando el sujeto mismo se torna en puente humano entre las dimensiones epistémicas y numinosas, en la inmediatez de la situación concreta de la experiencia mística. En consecuencia, encarar la empresa de estudiar la constitución del vínculo sujeto-mundo-otro desde el marco conceptual aportado por la estructura episteme-numen, implica atender a la articulación de ciertos saberes de orden sociocultural -que comportan dimensiones epistemológicas, tecnológicas, numinosas y sensorio-perceptivas-, que sólo se revelan en el escenario etnográfico de la experiencia religiosa.


CONCLUSIÓN

En este breve trabajo hablamos de la estructura episteme-numen, la cual presenté como una constante esencial de carácter relacional presente en diferentes religiosidades. Asimismo, dijimos que puede entenderse como un marco analítico de trabajo para el abordaje de las experiencias religiosas. Estas últimas definidas como un particular constructo nativo para la constitución de algún tipo de vínculo con la esfera de lo numinoso. En tanto que la estructura episteme-numen fue mostrada como un recurso teórico para explicar el modo en que el sujeto vive, experimenta y construye su relación con el numen. Por lo tanto, esta estructura de relación concibe al sujeto inmerso en una episteme -como campo cognitivo de saberes heteróclitos e indisolublemente ligados a ciertas prácticas-, que se torna en la condición necesaria para el encuentro del numen. Este recurso analítico puede ser pensado como un marco referencial intermedio de traducción entre el mundo otro sacro-simbólico interviniente en la experiencia religiosa, y el mundo racional-explicativo del antropólogo. En este punto considero necesario hacer algunas aclaraciones respecto a este enfoque.

En primer lugar, debe destacarse que lo que fue presentado de manera conceptualmente desmenuzada, en el campo etnográfico puede encontrarse (y es lo que coloca mayores obstáculos a nuestra investigación) de una manera tan imbricada, que sólo el estudio microscópico y detallado puede establecer. Lo cual implica por parte del antropólogo un proceso de des-construcción y re-construcción para lograr la explicación de lo que se está produciendo. En segundo lugar, hay que recordar que los términos teóricos a los que se ha hecho referencia remiten a categorías analíticas que se diferencian sustancialmente de las empleadas en los contextos nativos. Por lo cual como elementos analíticos sólo pueden servirnos para pensar determinado tipo de experiencias, invistiéndose de un sentido verdadero cuando son confrontadas con el campo o, mejor aún, cuando ellas constituyen sus propios significados en el espacio nativo. En tercer lugar, este enfoque microscópico, concentrado en las experiencias religiosas, tiene que ser necesariamente complementado con una perspectiva macroscópica que establezca los vínculos de estructuración de estas experiencias con el contexto sociocultural mayor del cual forman parte. Evitar el reduccionismo resulta fundamental para no perder de vista su relación con procesos sociales de amplio alcance.

Dos observaciones restan formular en relación con el enfoque propuesto. Primeramente, el vinculado con la denominación frecuente de sistema de creencia o religión en general para aludir a conglomerados humanos concretos. En muchos casos, la referencia a un sistema de creencia dado parece suponer que se está frente a un grupo determinado (no importa cual) que sostiene una particular teología fundada en el acto de creer, es decir, en la fe. Postura que, según creo, elimina la posibilidad de evaluar los procesos subyacentes de sostenimiento y re-creación de tal acción. Es decir, el dogma, la teología o la doctrina -en tanto saberes específicos sobre lo numinoso-, se encuentran "allí" para ser seguidos, creídos y, pocas veces, discutidos. Esta perspectiva se sostiene en dos presupuestos. En primer lugar, conceptualiza ingenuamente a la teología como un componente estático sencillamente dado dentro del universo simbólico nativo. Ignorando, pese a aceptar las posibles transformaciones históricas sufridas, los resortes profundos de regeneración que hacen posible la re-creación de los conocimientos. Por otra parte, supone un sujeto pasivo y limitado a un papel de receptor de un mensaje del que no es protagonista o sólo lo es secundariamente. En cuyo caso el individuo se presenta más como seguidor que como hacedor de su propia teología.

La última observación que debe hacerse se relaciona directamente con la anterior formulación. Esta consiste en considerar a los sistemas de creencia no sólo como sistemas de fe sino, además, como sistemas cognitivos. La estructura episteme-numen propuesta presupone implícitamente que dichos sistemas no sólo re-producen determinados saberes sobre lo numinoso. Los re-crean introduciendo transformaciones mediante la producción de nuevos conocimientos. Los sujetos construyen y producen saberes en relación con el mundo otro, lo cual implica tanto un sujeto activo como una relación más dinámica con el numen. Este proceso no sólo es teórico y especulativo, sino que es verdaderamente experiencial; tornando a la instancia de la experiencia mística como la instancia misma de los procesos cognitivos de producción de conocimiento sobre lo numinoso. Considero que quizás sea éste último, fundamentalmente, el aporte más importante de la perspectiva propuesta en este trabajo.

Bibliografía

BATESON, Gregory. Espíritu y Naturaleza. Buenos Aires: Amorrortu, 1993.

BOURDIEU, Pierre. El Sentido Práctico. Madrid: Taurus, 1991.

DOUGLAS, Mary. Símbolos Naturales. Exploraciones en Cosmología. Madrid: Alianza, 1993.

FORNI, Floreal H. Nuevos movimientos religiosos en la Argentina. En: Nuevos Movimientos Religiosos y Ciencias Sociales II. Buenos Aires: CEAL, 1993, pp. 7-23.

FOUCAULT, Michel. Respuesta a Esprit. En: El Discurso del Poder. México: Folios Ediciones, 1983, pp. 64-87.

FOUCAULT, Michel Tecnologías del Ser y Otros Textos Afines. Barcelona: Paidós, 1991.

FOUCAULT, Michel Las Palabras y las Cosas. Una Arqueología de las Ciencias Humanas. México: Siglo XXI, 1998.

HARPHAM, Geoffrey Galt. The Ascetic Imperative in Culture and Criticism. Chicago and London: The University of Chicago Press, 1987.

LEVI-STRAUSS, Claude. Introducción a la obra de Marcel Mauss. En: Antropología y Sociología. Madrid: Tecnos, 1971, pp. 13-42.

LEVI-STRAUSS Mito y Significado. Madrid: Alianza, 1986.

LUDUEÑA, Gustavo A. Cosmología y epistemología espiritualista en la Escuela Científica Basilio". Ilu. Revista de Ciencias de las Religiones 6, 2001, pp. 67-77.

LUDUEÑA El silencio como práctica de ascesis corporal en una comunidad de monjes benedictinos. Quaderns de l'Institut Catalá d'Antropologia, 17-18, 2002, pp. 65-78.

LUDUEÑA Asceticism, Fieldwork, and Technologies of the Self in Latin American Monasticism. Fieldwork in Religion 1(2), 2005, pp. 145-164.

MARTIN, L., GUTMAN, H. y P. HUTTON (Eds.). Technologies of the Self. A Seminar with Michel Foucault. Amherst: The University of Massachusetts Press, 1988.

MAUSS, Marcel. Técnicas y movimientos corporales. En: Antropología y Sociología. Madrid: Tecnos, 1971, pp. 337-356.

OTTO, Rudolf. Lo Santo. Lo Racional y lo Irracional en la Idea de Dios. Madrid: Alianza, 1980.

REIDHEAD, Van A. Structure and Anti-Structure in Monasticism and Anthropology: Epistemological Parallels and Adaptive Models. Anthropology of Consciousness 2. Society for the Anthropology of Consciousness, 1993, pp. 9-22.


 
* Antropólogo (Universidad de Buenos Aires), Doctor en Antropología, y Magíster en Antropología Sociocultural por la Memorial University of Newfoundland (Canadá). Es investigador del CONICET y profesor en la Universidad de Buenos Aires, Universidad Nacional de San Martín y Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, donde enseña antropología de los sistemas simbólicos, y métodos y técnicas de investigación etnográfica. Sus trabajos focalizan temas de simbolismo, experiencia religiosa, historia, ritual e ideología en el campo de la antropología de la religión, sobre la que publicó en revistas especializadas nacionales e internacionales. Es miembro del Consejo Directivo de la Asociación de Cientistas Sociales de la Religión del Mercosur, y Fellow del Clare Hall College de la Universidad de Cambridge.

1 R. OTTO, Lo Santo. Lo Racional y lo Irracional en la Idea de Dios, p. 16.

2 Ibid., p. 19.

3 Ibid., p. 21.

4 Ibid.

5 Ibid., p. 27.

6 Ibid., p. 29.

7 Ibid., p. 30.

8 Ibid., p. 33.

9 Ibid., p. 35.

10 Ibid., p. 10.

11 Ibid., p. 14.

12 Ibid., p. 15.

13 Ibid., p. 10.

14 F. FOUCAULT, Tecnologías del Yo y Otros Textos Afines; G. HARPHAM, The Ascetic Imperative in Culture and Criticism; L. MARTIN et. al., Technologies of the Self. A Seminar with Michel Foucault; C. LEVI-STRAUSS, Introducción a la obra de Marcel Mauss; M. MAUSS, Técnicas y movimientos corporales.

15 Cf. G. A. LUDUEÑA, El silencio como práctica de ascesis corporal en una comunidad de monjes benedictinos.

16 Cf. F. FORNI, Nuevos Movimientos Religiosos en la Argentina, p. 13.

17 M. MAUSS, Ibíd., p. 337.

18 M. DOUGLAS, Símbolos Naturales. Exploraciones en Cosmología, p. 90.

19 Ibíd., p. 94.

20 C. LEVI-STRAUSS, Ibíd., p. 15.

21 F. FOUCAULT, Tecnologías del Yo y Otros Textos Afines, p. 48.

22 Ibíd., p. 76.

23 G. LUDUEÑA, 2005. Asceticism, Fieldwork, and Technologies of the Self in Latin American Monasticism.

24 No es mi intención analizar las transformaciones que estas técnicas experimentaron a lo largo de su desarrollo histórico. Aunque es claro que las mismas se encuentran fuertemente emparentadas con ciertas prácticas que aún continúan llevándose a cabo en las comunidades monásticas (ejemplos de ello lo constituyen el silencio, el ayuno, el celibato, la confesión, etc.). Incluso el mismo Foucault rastrea la genealogía del psicoanálisis freudiano hasta llegar a estas tecnologías, cf. L. MARTIN et. al., Ibíd.

25 A este respecto y en relación con el espiritismo kardecista se afirmó que "hay un acceso a la experimentación personal de las personas comunes: contactos con entidades espirituales personalizadas (espíritus de difuntos). Todo esto atravesado por un nítido vector o tensión de acercamiento constante a la verdad y a la ética (en coincidencia paradójicamente con el espíritu evolucionista)", F. FORNI, Ibíd., p. 17.

26 Cf. C. LEVI-STRAUSS, Mito y Significado, p. 40.

27 Ibid., p. 39.

28 Ibíd., p. 24.

29 G. BATESON, Ibíd., p. 100.

30 En este sentido se ha afirmado que "en tanto que el mundo del monje es trascendente […] la relación con Dios es completamente subjetiva y el monje sólo puede experimentar a Dios a través de su propia humanidad -sus sentidos y los significados ordinarios de la percepción humana", V. REIDHEAD, Ibíd., p. 15.

31 Véase, por ejemplo, un caso tomado del espiritismo, G. A. Ludueña, Cosmología y epistemología espiritualista en la Escuela Científica Basilio.

32 P. BOURDIEU, El Sentido Práctico.

33 Este hecho demuestra que estos sistemas no pueden ser considerados aisladamente, sino como parte integrante de un contexto histórico-social al cual pertenecen y al cual son permeables.

34 M. FOUCAULT, Respuesta a Esprit; Ibíd., Las Palabras y las Cosas. Una Arqueología de las Ciencias Humanas.

35 Ibíd., Respuesta a Esprit, p. 63.

36 Ibíd., Las Palabras y las Cosas. Una Arqueología de las Ciencias Humanas, p. 166.

37 Adviértase que aquí sólo están siendo contemplados estos conocimientos en razón de la intervención directa que ellos parecen desarrollar en el contexto de las experiencias de relación con el numen. Esta consideración no descarta por cierto la posibilidad de que se presenten otros saberes ya sea a nivel de este tipo de situaciones, o a nivel del sistema de creencia tomado en general.


NEUROTEOLOGÍA Y EXPERIENCIA MÍSTICA

Patricia Arca Mena *

Patricia Arca Mena
Patricia Arca Mena
arcaneurociencias@yahoo.com.ar
La neuroteología es una rama de las neurociencias que se ocupa del estudio de la neurobiología de la religión y la espiritualidad. En otras palabras, es el estudio de la interacción de lo divino (theos) y lo humano (neuron). A lo largo de la historia se encontraron diferentes personalidades del ámbito de la ciencia que se preguntaron sobre la existencia de Dios, tales como Copérnico, que era canónigo; Gregor Johan Mendel, padre de la genética y abad; John Polkinghorne, físico y sacerdote anglicano; Manuel Carreira, astrofísico y jesuita; Stanley Laki, historiador y padre dominico; o el mas reciente, Francis Collins director del Instituto Nacional de Investigación de Estados Unidos sobre Genoma Humano, autor de ¿Cómo habla Dios? y Premio Príncipe de Asturias 2001 a la Investigación Científica y Técnica. Se han hecho diferentes encuestas para tratar de determinar la distribución de las creencias en función de las especialidades y se observó que los de mayor creencia espiritual eran los médicos, seguidos en orden decreciente por matemáticos, biólogos, físicos y químicos.

La inauguración del estudio científico natural de la religión se da en 1901 por William James, profesor de psicología de la Universidad de Harvard. La serie de conferencias que el estadounidense brindó en la Universidad de Edibumburgo, y que luego fueron publicadas con el titulo "Las variedades de experiencias religiosas: Un estudio sobre la naturaleza humana" se convirtieron en un clásico. Ya en 1950, Wilder Peinfield, neurocirujano canadiense, detectó mientras preparaba a pacientes epilépticos para las cirugías, y estimulaba el cerebro con electrodos, que al activar el lóbulo temporal los paciente experimentaban experiencias místicas. Mas de 70 años después que James, un psiquiatra de Pennsilvania, el Dr. Eugene D´Aquili, profesor de psiquiatría y, al mismo tiempo, antropólogo de la religión, retoma el tema de las bases neurobiológicas de las experiencias religiosas. En 1975 publica un articulo en la revista de Ciencia y Religion Zygon, con el titulo de "Los determinantes de la conducta ritual religiosa", estimulando esta línea de investigación.

Cuando la experiencia conlleva ciertas sensaciones de de trascender lo mundano y penetrar en una dimensión espiritual se habla de éxtasis místico. Este fenómeno transcultural tiene registros en muchas sociedades y religiones diferentes.
Cuando la experiencia conlleva ciertas sensaciones de de trascender lo mundano y penetrar en una dimensión espiritual se habla de éxtasis místico. Este fenómeno transcultural tiene registros en muchas sociedades y religiones diferentes.

El neuroteólogo Michael Persinger encontró que la espiritualidad tiene una base neurológica, y con su equipo de investigadores desarrolló un dispositivo llamado el "casco de Dios" que crea un débil campo magnético sobre los lóbulos temporal y parietal derechos del cerebro, y obtuvo como resultado el 80 por ciento de experiencias religiosas. Tres décadas más tarde, un neurocientífico budista, Todd Murphy (independiente, pero en contacto con Persinger), realizó una versión de la Máquina de Dios llamada Shakti (término hindú de la divinidad).

Herbert Benson, un cardiólogo de la Harvard Medical School estableció que el sistema de respuesta al estrés afecta a todo el sistema nervioso y que la meditación con mantras ayuda a relajarlo, baja la presión arterial, mejora la salud del corazón y prolongar la vida, además de dar felicidad y de generar el sentimiento de estar más cerca de una entidad trascendente, entre otras ventajas.

James Austin, neurólogo del Instituto Tecnológico de Massachussets, propone que las experiencias religiosas se darían por una inhibición de la amígdala y zona parieto temporal, y una activación de la corteza prefrontal. Andrew Newbwerg, neuroteólogo de la Universidad de Pennsilvania, exploró los cerebros de monjes tibetanos y franciscanos con SPECT. Observo que la meditación desactiva las zonas del cerebro que regulan la personalidad y desciende la actividad parietal. De este modo el sujeto podría sentirse fundido con la totalidad al perder la capacidad de distinguirse de los demás y la orientación corporal espacial.

Rick Strassman, un psiquiatra de Nuevo México, fue el primer investigador en obtener permiso para experimentar con drogas psicodélicas en humanos en los años 70. Y de sus estudios surgió el planteo de la hipótesis de la "molécula espiritual": la DMT (dimetiltriptamina) sintetizada en la glándula pineal, llamada por los místicos como "el tercer ojo". Lars Farde, profesor de psiquiatria del instituto Karolinska de Estocolmo, estudió la relación del hecho religioso con la serotonina y su receptor 5- HT1A. Concluyó que existe una alta correlación entre las funciones cerebrales y la personalidad con respecto a estos receptores. Así, podría existir una base química para creer en un ser superior.

La fe alivia el estrés ante las presiones cotidiana, fomenta actitudes de generosidad, altruismo, y mejora el comportamiento social y reduce la depresión. Estas personas tienen mayor capacidad de autocontrol y regulan de manera más eficiente sus actitudes y emociones. Las plegarias por otros potencian la capacidad de perdonar.
La fe alivia el estrés ante las presiones cotidiana, fomenta actitudes de generosidad, altruismo, y mejora el comportamiento social y reduce la depresión. Estas personas tienen mayor capacidad de autocontrol y regulan de manera más eficiente sus actitudes y emociones. Las plegarias por otros potencian la capacidad de perdonar.

Roland R. Griffiths de la Universidad John Hopkins, sometió a voluntarios sin experiencia previa en alucinógenos a diferentes dosis de psilocibina (alcaloide presente en los hongos) obteniendo un 61 por ciento de experiencias místicas completas. Richard Savidson, neuroteólogo de la Universidad de Wisconsin, estudio monjes tibetanos con electroencefalogramas durante meditación y descubrió patrones mayores de ondas gamma. En 1994 el educador Laurence O. McKinney en Neurotheology: Virtual Religion in the 21st Century. Ramachandran Vilayanur, neurólogo, neuroteólogo, profesor y director del laboratorio del Cerebro y Percepción de la Universidad de California en San Diego, propuso "la maquina espiritual" en donde establecía que la intensidad de los sentimientos religiosos podría depender de aumentos de la electricidad del lóbulo temporal y llamo a éste último "Punto de Dios".

Dean Hammer genetista del National Cancer Institutes de Estados Unidos estudió y postuló al gen VMAT2 como el de la autotrascendencia o espiritualidad. Por su parte, Rick Strassman, psiquiatra de la universidad de Nuevo México sugirió que, si dichos genes están vinculados a la dimeltitriptamina (único psicodélico que produce naturalmente el cerebro), se podría modificar artificialmente la genética para modular los niveles de religiosidad. Laura Koening estudio gemelos en Minesota en los años 90, y en 2005 observó que si bien en la niñez y adolescencia tanto los gemelos como los no gemelos practicaban la misma fe religiosa que en su casa, en la edad adulta los gemelos desarrollaron pautas religiosas comunes, mas allá de su crianza.

El neuroteólogo Michael Persinger (izq) encontró que la espiritualidad tiene una base neurológica, y con su equipo de investigadores desarrolló un dispositivo llamado el casco de Dios que crea un débil campo magnético sobre los lóbulos temporal y parietal derechos del cerebro.
El neuroteólogo Michael Persinger (izq) encontró que la espiritualidad tiene una base neurológica, y con su equipo de investigadores desarrolló un dispositivo llamado el "casco de Dios" que crea un débil campo magnético sobre los lóbulos temporal y parietal derechos del cerebro.

Mario Beauregard y Vicent Paquette, neuroteólogos de la Universidad de Montreal, estudiaron con scanners de RMN a monjas mientras contaban experiencias religiosas y vio que se activaban al menos 12 regiones del cerebro, entre ellas las involucradas en registro de emociones y conciencia. Actualmente dos autores Richard Dawkins y Francis Collins, ateo y creyente respectivamente, se han opuesto en sus posturas. El primero, en El espejismo de Dios, biólogo evolutivo y profesor de Oxford, afirmó que la creencia en un ser sobrenatural evita el progreso de la ciencia y evade la responsabilidad de explicar el mundo. Opina que, como un virus, infecta a los niños con teorías incorrectas que dicen predicar la paz y generan en realidad intolerancia y guerras. El segundo, en ¿Cómo habla Dios?, director del Instituto Nacional de Investigación sobre Genoma Humano, afirmo que la ciencia y Dios están en armonía y no existen antagonismos. Para el autor, la elegancia y complejidad del genoma humano son la prueba irrefutable de un creador.

Muchas personalidades históricas han tenido experiencias místicas, como Vincent Van Gogh (arriba, izq.), Juana de Arco (centro), Paulo de Tarso (San Pablo) (der.), Ignacio de Loyola (abajo, izq.), Sor Hildergard Von Bingen (centro), y el Dalai Lama (der.).
Muchas personalidades históricas han tenido experiencias místicas, como Vincent Van Gogh (arriba, izq.), Juana de Arco (centro), Paulo de Tarso (San Pablo) (der.), Ignacio de Loyola (abajo, izq.), Sor Hildergard Von Bingen (centro), y el Dalai Lama (der.).

La historia y los textos sagrados (no sólo los cristianos) están llenos de testimonios de personas que, de manera espontánea o provocada, logran alcanzar un "estado modificado de la conciencia". Cuando la experiencia conlleva ciertas sensaciones de de trascender lo mundano y penetrar en una dimensión espiritual se habla de éxtasis místico. Este fenómeno transcultural tiene registros en muchas sociedades y religiones diferentes. En el citado 'Las Variedades de la Experiencia Religiosas", William James comenta que la experiencia mística es inefable, que quienes la experimentan refieren que no puede describirse en palabras adecuadas, que debe experimentarse directamente, pues no es posible comunicarla ni transferirla a los demás. Y razona: "Por esta peculiaridad los estados místicos se parecen más a los estados afectivos que a los intelectuales".

Muchas personalidades históricas han tenido experiencias místicas, como Vincent Van Gogh, William Bake, George Rusell, Juana de Arco, Ezequiel, San Pablo, Mahoma; Dante, Ignacio de Loyola, Bernardo de Claraval, Rumi, Jacob Bohme , Ovidio, Al-Gazzali, Ibn Arabi, Hildergard Von Bingen y el Dalai Lama, entre otros. Y es así que diferentes autores han establecido una variedad de parámetros que debe tener la experiencia mística para ser catalogada como tal y diferenciarse de las diferentes patologías neuropsicológicas, como psicosis, epilepsia, esquizofrenia, etc. Estos parámetros, similares para las diversas culturas, religiones y épocas de la humanidad sólo marcan diferencias según la formación y historia personal de lo vivido en la historia del sujeto. Las mismas podrían resumirse en las siguientes:
  • Sensación de unidad de todo lo existente.
  • Pérdida del yo y del mundo (sujeto y objeto).
  • Pérdida del sentido de la causalidad.
  • Sensaciones de fuerte tono afectivo: alegría, bienaventuranza, paz, vitalidad, bienestar físico y mental.
  • Sensación de estar en contacto con lo sagrado.
  • Sensación de objetividad y realidad.
  • Superación del dualismo y aceptación de la paradoja.
  • Inefabilidad.
  • Transitoriedad: dura instantes, como mucho una o dos horas.
  • Cambios positivos persistentes en la actitud y conducta del sujeto.
  • Cualidad noética: estados de conocimiento de intuición y verdad.
  • Sensación de elevación y/o flotar en el aire.
  • Referencia a la luz: fogonazos, luminosidad sostenida, presencia luminosa, fuego o calor intensos (generalmente blanca).
Numerosos autores han estudiado neurofisiológicamente el desencadenante de la experiencia mística. El resultado es una gran diversidad de teorías sobre las causas, desde pasivas a activas, naturales a provocadas, químicas a genéticas, etc. Las inducidas serían provocadas por métodos químicos como por ejemplo el peyote, o métodos naturales como la meditación. Y es así que el hombre a lo largo de la historia desarrolló diversas técnicas por activación del sistema nervioso parasimpático, o del sistema nervioso simpático para poder provocarlas.


Beneficios de la espiritualidad

La espiritualidad o la religiosidad pueden ayudar a personas con traumatismo cerebral en su rehabilitación (Waldron-Perrine y Rapport, 2011). La fe alivia el estrés del cerebro ante las presiones cotidianas (Tiger & McGuire, 2010), fomenta actitudes de generosidad, altruismo, y mejora el comportamiento social y reduce la depresión clínica (Norenzayan y Shariff, 2008). Los individuos religiosos son más amables y rectos (Saroglou, 2010), tienen mayor capacidad de autocontrol y regulan de manera más eficiente sus actitudes y emociones con la finalidad de conseguir objetivos valiosos para ellos (McCullough, 2009), y las plegarias por otros potencian la capacidad de perdonar (Lambert, 2010).

Creer en Dios puede bloquear la ansiedad y minimizar el estrés (Michael Inzlicht, 2009). La meditación con mantras ayuda a relajar el sistema nervioso, baja la presión arterial, a mejorar la salud del corazón, a prolongar la vida, a dar felicidad y generar el sentimiento de estar más cerca de una entidad trascendente, entre otras ventajas (Herbert Benson, 2009). Por lo tanto, si la meditación y la vida espiritual favorecen las tendencias a ser generosos, amar al prójimo y desear el bien a los demás sin esperar nada a cambio; y si además propenden al bienestar físico, emocional e intelectual, es indudable que este tipo de pensamiento o filosofía puede llevar a una vida más feliz.


 
* Médica y docente universitaria (Universidad Maimónides). Doctora en psicología por la UM. Es especialista en fitomedicina y medicina indigenista. Actualmente es miembro del Capítulo Psiquiatría Espiritual de la APSA (Asociacion Argentina de Psiquiatría) e investigadora en neuroteología de la Fundación DECYR.

DIOS EN EL CUERPO: ANÁLISIS DEL APRENDIZAJE Y LA TRANSMISIÓN DE LA POSESIÓN EN CATOLICISMO CARISMÁTICO DE BUENOS AIRES

Nicolás Viotti *

xx
Nicolás Viotti
nicolas.viotti@gmail.com
Este trabajo analiza las nociones de lo dado (don) y lo aprendido (ritual) en torno a las prácticas de posesión del Espíritu Santo del catolicismo carismático en base a una etnografía sobre las llamadas nuevas religiosidades en un barrio de la zona norte de Buenos Aires. Discute la articulación entre esas concepciones en un proceso más amplio de cambio religioso que redefine los límites entre lo espiritual, lo mental y lo corporal en concepciones holísticas con un énfasis en la transformación, la calidad de vida y el confort personal. Muestra finalmente la importancia de reconocer un grado de diferencia significativa entre las concepciones eruditas sobre el bienestar personal en el contexto cosmológico diferencial en el que se inscriben las nuevas religiosidades de los sectores medios, aún cuando se manifiesten en un espacio "central" de la cultura urbana letrada.

La reconfiguración contemporánea del espectro religioso, incluso la propia redefinición de lo que se entiende por ese término, resulta un proceso significativo de cambio cultural que obliga a profundizar en los procesos de reconceptualización de identidades que excedan lo propiamente religioso. De tal modo, si buena parte de los esfuerzos contemporáneos se han abocado a mostrar como las identidades religiosas cambian en los sectores medios, resulta necesario indagar con mayor profundidad como los modos de vida, es decir tanto los valores como las formas cotidianas de relación entre humanos y no humanos, constituyen un aspecto sustancial para entender los procesos de identificación y diferenciación en torno a la noción de "clase media". Aunque sea importante considerar los procesos de adhesión al carismatismo católico o las llamadas nuevas espiritualidades alternativas, resulta necesario también entender la religiosidad en tanto un modo de vida y no solamente como un proceso de adhesión conciente y declarado a una religión instituida.

En base a dos ejemplos extraídos de mi propio trabajo de campo sobre las nuevas religiosidades en el contexto letrado, psicologizado y secularizado de algunos ámbitos de la zona norte de Buenos Aires, muestro la importancia de considerar en conjunto tanto las formas de socialidad como las formas de jerarquización que estas movilizan. Los análisis que ponen el énfasis unilateral en las relaciones de delimitación social corren el riesgo de obscurecer los mecanismos micropolíticos en que estos procesos ocurren como consecuencia de complejas formas de socialidad y de construcción de la persona que exceden las posibilidades de análisis aquí presentes. En esta ocasión adopto la perspectiva de un camino posible de diálogo y articulación entre dos redes de la llamada Nueva Era y el catolicismo carismático con las formas de jerarquización que allí se desarrollan. Considero que pensar éstas en simultáneo con el resto de las relaciones que ordenan un régimen de vínculos entre personas, cosas y entidades sagradas es una perspectiva de análisis que puede hacernos entender más y mejor esos procesos.
Prácticas de posesión del Espíritu Santo del catolicismo carismático en Buenos Aires. Esta práctica religiosa redefine los límites entre lo espiritual, lo mental y lo corporal en concepciones holísticas con un énfasis en la transformación, la calidad de vida y el confort personal.
Prácticas de posesión del Espíritu Santo del catolicismo carismático en Buenos Aires. Esta práctica religiosa redefine los límites entre lo espiritual, lo mental y lo corporal en concepciones holísticas con un énfasis en la transformación, la calidad de vida y el confort personal.

Prácticas como la imposición de manos, la oración y la "vivencia" del Espíritu Santo son habituales en un contexto de reducción de la distancia con Dios que ofertan las misas de sanación y los grupos de oración carismáticos. Por otro lado, la meditación, las prácticas centradas en la "nueva conciencia del cuerpo" y en el fluir de la Energía, acompañan un movimiento de integración holística que suele articular aspectos de la vida cotidiana con el ecologismo y la "vida sana" en una enorme diversidad de prácticas alternativas que van desde el yoga, las terapias corporales, el neoshamanismo y los heterogéneos saberes de la autoayuda.

En síntesis podríamos decir que, si el foco del análisis es un modelo de relación y de valores, y no simplemente una identidad o una serie de rasgos entendidos como religiosos, los regimenes de socialidad carismáticos y de las llamadas espiritualidades A diferencia de los recursos idealmente trascendentes que suponen un tiempo distendido y una localización indefinida, como por ejemplo el catolicismo romano o el psicoanálisis -recursos dominantes en este horizonte cultural-, el Espíritu Santo y la Energía producen transformaciones benéficas casi instantáneamente, acompañadas de vivencias intensas localizadas en el cuerpo y en el ambiente inmediato, un hecho que trae aparejado tanto relatos sobre la transformación personal radical como controversias sobre el estatuto del bienestar, percibido a veces como "mágico" y por ende como falto de "seriedad" o incluso como resultado de la "manipulación".


 
* Sociólogo (Universidad de Buenos Aires) y Doctor en Antropología Social por el Programa de Pos graduación en Antropología Social del Museu Nacional de la Universidad Federal de Rio de Janeiro (PPGAS-MN-UFRJ). Sus intereses de investigación involucran areas tales como la religiosidad en relación con la cultura moderna, las prácticas de bienestar espiritual, cambio cultural y procesos de jerarquización moral y social con énfasis en los sectores medios. Tiene experiencia de campo en el area andina (NOA) y en el área urbana de Buenos Aires en donde se ocupó de analizar el cambio religioso en la difusión del catolicismo carismático y prácticas religiosas alternativas.

Eventos

LA CONVENCION ANUAL DE LA PARAPSYCHOLOGICAL
ASSOCIATION EN CURITIBA, BRAZIL


Alejandro Parra*

Alejandro Parra
Alejandro Parra*
rapp@fibertel.com.ar
Entre los dias 18 hasta 21 agosto 2011 se celebró 54ta. Convención Anual de la Parapsychological Association (PA) en el Centro Facinter Garcez de la ciudad de Curitiba, Paraná, Brasil. La convención incluyó la presentación de 19 estudios a lo largo de 13 sesiones, cuyos participantes vinieron de Argentina, Inglaterra, Alemania, Islandia, Japón, Suecia, Estados Unidos y, por supuesto, muchas regiones de Brasil.

La convención comenzó con bienvenida de Marios Kittenis, coordinador del evento, y de David Luke, Presidente de la PA durante el período 2009-2011. Destacados científicos y otros académicos de todo el mundo se reunieron para presentar las últimas investigaciones en parapsicología y otros fenómenos y experiencias. La convención fue abierta al público, con presentaciones en inglés pero con traducción simultánea del inglés al portugués (usualmente este servicio no está disponible en otras convenciones). Además, la convención coincidió con el "Séptimo Encuentro Psi" organizado por la Universidad Espírita Becerra Menezes (UNIBEM) y la Sexta "Jornadas de Estados Alterados de Consciencia" coordinada por Fábio Eduardo da Silva y su equipo.

Se presentó una amplia variedad de temas en las sesiones, en su mayoría dentro de una de las siguientes áreas: estados alterados, mediumnidad y supervivencia, estudios clínicos, apariciones, abordaje psicológico de experiencias paranormales, y aspectos psicofisiológicos. Uno de los aspectos más destacados de este año fue el enfoque transcultural dada a la parapsicología, con énfasis en la mediumnidad. A pesar de que todos los trabajos presentados son dignos de mención, a fin de presentar una visión general de toda la convención, resumiré sólo algunos de los estudios presentados en las áreas mencionadas. La convención comenzó con la presentación de la edición portuguesa del libro Varieties of Anomalous Experience: Examining the Scientific Evidence [Variedades de la experiencia anómala: Examinando su Evidencia Científica], editado por psicólogos Etzel Cardeña, Steven Jay Lynn, y Stanley Krippner, publicado por primera vez en el año 2000 por la American Psychological Association, que próximamente tendrá su segunda edición.
Participantes de la 54ta. Convención Anual de la Parapsychological Association.
Participantes de la 54ta. Convención Anual de la Parapsychological Association.

Hubo dos sesiones sobre Estados Alterados y un panel sobre el mismo tema. Etzel Cardeña, presentó "Hipnotizabilidad, alteración de la conciencia, y otras variables como predictores del rendimiento en una prueba psi en Ganzfeld" del Centro para la Investigación de la Conciencia y la Psicología Anómala (Departamento de Psicología de la Universidad de Lund, Suecia). Los investigadores examinaron cómo la hipnotizabilidad, la disociación, las alteraciones de la conciencia, la creencia en el éxito, y las experiencias psíquicas se relacionan con las puntuaciones psi en Ganzfeld. Sus resultados pueden ser un buen indicador de la relación entre un estado alterado de la conciencia y psi, pero sólo en el grupo de individuos de alta hipnotizabilidad.

El panel de Estados Alterados, presidido por David Luke del Reino Unido (Departamento de Psicología y Orientación, Universidad de Greenwich), reunió a Ede Frecska de Hungría (Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Debrecen), Stanley Krippner (Universidad Saybrook de San Francisco, California), Luis Eduardo Luna de Florianópolis, Brasil (Centro de Investigación Wasiwaska para el Estudio Psicointegrador de las Plantas, Arte Visionario y Conciencia) y Michael Winkelman (Escuela de la Evolución Humana y Cambio Social, Universidad Estatal de Arizona, Estados Unidos) para examinar el efecto de la ayahuasca y las experiencias humanas excepcionales. Este panel discutió el uso de la cocción sacramental de la ayahuasca, y su papel en la facilitación de experiencias humanas no convencionales. Los expositores presentaron diferentes perspectivas sobre el uso de la ayahuasca y sus efectos desde una perspectiva antropológica, psicológica, psiquiátrica, neurocientífica y física, y llevaron a cabo una discusión conceptual, experiencial, fenomenológica, neurobiológica y multicultural del rol de la ayahuasca en la investigación parapsicológica.

El segundo panel fue "Orientaciones Futuras para el Estudio de la Mediumnidad Mental" presidido por Carlos S. Alvarado. Según Alvarado, las investigaciones parapsicológicas de la mediumnidad mental han sido diseñadas para evaluar la posible adquisición de información verídica del medium. Sin embargo, la mediumnidad es un fenómeno complejo en el que lo parapsicológico puede interactuar con variables, entre otras, por ejemplo, psicológicas, antropológicas, psiquiátricas o sociológicas. También se refirió al estudio de las posibles relaciones entre la mediumnidad y los sueños, psicopatología, y procesos psicosociales, bienestar y cuestiones involucradas en el desarrollo de la mediumnidad y el uso de métodos cualitativos de investigación. Alvarado analizó la mediumnidad como un área descuidada de la investigación, debido a que puede haber relaciones positivas entre la mediumnidad y los sueños. Estas relaciones sugieren un sustrato común, como el funcionamiento del subconsciente. Siguiendo el conocido sistema de análisis de contenido de los sueños de Hall-van de Castle, Alvarado sugirió que los investigadores podrían codificar los sueños de los médiums en términos de categorías, por ejemplo, personajes en sueños, interacciones sociales, actividades, y emociones, y compararlos con los sueños de personas no mediums. Incluso explorar si los sueños de los mediums que muestran más evidencia de procesos primarios del pensamiento -contenido inusual, simbolos, aspectos ilógicos de la vida onírica y la vida mental de médium- pueden afectarse recíprocamente.

El panel coordinado por Carlos S. Alvarado Orientaciones Futuras para el Estudio de la Mediumnidad Mental en el que participaron, de izq. a der., Chris Roe, Alexander Moreira-Almeida, Etzel Cardeña, y Wellington Zangari.
El panel coordinado por Carlos S. Alvarado "Orientaciones Futuras para el Estudio de la Mediumnidad Mental" en el que participaron, de izq. a der., Chris Roe, Alexander Moreira-Almeida, Etzel Cardeña, y Wellington Zangari.

Alexander Moreira-Almeida de Juiz de Fora, Brasil (Escuela de Medicina, Universidad de Juiz de Fora) exploró la relación entre la mediumnidad y la salud mental. Moreira expresó que la mediumnidad está relacionada con las experiencias anómalas y pueden ser confundidas con psicosis y síntomas disociativos. Estas experiencias presentan un desafío para el diagnóstico diferencial. A fines del siglo XX, los manuales de diagnóstico psiquiátrico comenzaron a ser más abiertos a la posibilidad no patológica de las experiencias mediúmnicas, sin embargo, ha habido una falta de directriz empírica para el diagnóstico diferencial que permita distinguir entre experiencias espirituales saludables y el trastorno mental. Moreira también revisó la investigación en psiquiatría y psicología actual que investiga la relación entre la salud mental de los mediums y el diagnóstico diferencial entre la mediumnidad y trastorno mental. Con frecuencia, la mediumnidad cursa con experiencias disociativas y psicóticas, e incluso puede causar dificultad transitoria, pero no necesariamente es parte de un trastorno mental.

Elizabeth C. Roxburgh y Chris A. Roe de Northampton, Reino Unido (Centro para el Estudio de los Procesos Psicológicos Anómalos, División de Psicología de la Universidad de Northampton) expresaron que es necesario trabajar de manera más sistemática, y emplear un abordaje mixto que combine los datos cualitativos con los cuantitativos para dar una explicación más completa al fenómeno de la comunicación mediúmnica. Si bien la investigación cuantitativa puede explorar si la mediumnidad se relaciona con bienestar o el malestar psicológico, un estudio etnográfico con observación del entrenamiento de la mediumnidad, por ejemplo, como un abordaje metodológico cualitativo, podría explorar qué prácticas son importantes y porqué, cómo se desarrolla la mediumnidad y qué técnicas se aprenden para controlarla. La combinación de este abordaje nos permitarán explorar si la función del médium a través del entrenamiento de la mediumnidad tiene algún impacto en la salud mental.

Finalmente, Wellington Zangari y Everton de Oliveira Maraldi advierten que la mediumnidad mental -a menudo negada- pudo haber afectado la comprensión de sus posibles manifestaciones paranormales (físicas o mentales), por ejemplo, haciendo caso omiso a la vida emocional, cognitiva, sexual y social del medium: Oliveira Maraldi expresó cómo el conocimiento de la vida y contexto social de los mediums pueden ser útiles para comprender la complejidad del fenómeno, y cómo el contexto social ha influido en el desarrollo de la mediumnidad. Ambos autores discutieron cómo la dimensión socio-histórica e institucional de la mediumnidad, específica para cada contexto cultural, condiciona o afecta los fenómenos de un medium y su grupo.

Wellington Zangari y su equipo de la Universidad de São Paulo (junto a Alejandro Parra) se refirió a la riqueza cultural de Brasil y los profundos contrastes sociales del país como un contexto para desarrollar investigación psi.
Wellington Zangari y su equipo de la Universidad de São Paulo (junto a Alejandro Parra) se refirió a la riqueza cultural de Brasil y los profundos contrastes sociales del país como un contexto para desarrollar investigación psi.

Carlos S. Alvarado de Virginia Beach (Atlantic University), analizó a aquellos parapsicólogos que escriben sobre aspectos de la historia de su campo. Centrado en algunos de los problemas que producen visiones incompletas o sesgadas de la evolución de la parapsicología, Alvarado encontró dos problemas: El primero es que la literatura presenta la obra de personas conocidas (por ejemplo, Myers y Gurney), sin mencionar otros actores históricos; y el segundo, es cuando el pasado es visto en términos de su relación con ideas olvidadas que ya no son populares o son indeseables actualmente, lo cual puede tener relevancia para nosotros.

El estudio de John B. Alexander, "Fenómenos psi en el mundo real", examinó aquellos estudios que sientan una base de aplicación práctica para los fenómenos psi. Desde una perspectiva secular, la aplicación de la visión remota, las experiencias cercanas a la muerte, e incluso los avistajes de OVNIs en algunos países tecnológicamente desarrollados, inhibe la aceptación general de capacidades que pueden ser de utilidad.

"La Alteración de la Conciencia es una Cosa Esplendorosa" fue la tercera de las conferencias invitadas a cargo de Etzel Cardeña, quien desafió la noción según la cual los estados alterados de conciencia, por definición, son generadoras de creencias irracionales o delirantes acerca de si mismo y del mundo, y examinó la evidencia que demuestra que la alteración de la conciencia es parte de nuestra naturaleza y puede servir para cinco propósitos: Primero, hacer pequeños ajustes para ser más eficaces en nuestras tareas cotidianas, segundo, alcanzar el mayor placer que podamos, tercero, ser más creativos, cuarta, aumentar las posibilidades de curación de enfermedades específicas y/o mejorar el significado de la vida, y quinto, permiten caminos epistemológicos alternativos para comprendernos mejor a nosotros mismos y al universo en general.

Como Presidente de la PA, David Luke presentó a Michael Winkelman, autor de varios libros sobre chamanismo, medicina psicodélica e investigación de la conciencia, en la Conferencia J.B. Rhine de la Cena de Clausura de la Convención, titulada "Psicología Evolutiva y Estructura Profunda de Psi: El paradigma chamánico". Según Winkelman, la relación entre los chamanes con la biología humana permite comprender los orígenes evolutivos de la religión y también de las capacidades psi. Este abordaje identifica tres ventajas evolutivas: coordinación grupal, habilidades informacionales de los estados alterados de conciencia, y la creencia en la existencia de los espíritus. Winkelman examina estos tres pilares del chamanismo en términos de su ventaja evolutiva y clasifica los contextos en los que las capacidades psi pudieron haber evolucionado junto a otras capacidades humanas.

Otra presentación incluyó los avances de la parapsicología en Brasil. Wellington Zangari (Universidad de São Paulo) se refirió a su riqueza cultural y los profundos contrastes sociales del país como un contexto para desarrollar investigación psi. A pesar de muchas dificultades, la investigación psi está progresando en Brasil. Zangari se centró en las conquistas académicas, especialmente el desarrollo de proyectos de investigación, tesis de maestría y tesis doctorales en algunas de las universidades más importantes, y la creación de centros universitarios para su estudio en el Instituto de Psicología de la Universidad de São Paulo. Estos avaces han ayudado a superar barreras lingüísticas y culturales, y ha generado buenas perspectivas para el futuro.

En la sesión "Supervivencia después de la muerte", Chris A. Roe presentó un estudio sobre la teoría de la resonancia mórfica con reconocimiento de los símbolos de la caligrafía china. Como muchos parapsicólogos probablemente saben, la teoría de la resonancia mórfica de Sheldrake sugiere la existencia de un medio por el cual pensamientos o comportamientos de organismos físicamente aislados pueden converger de maneras diferentes a otras formas de aprendizaje (por imitación, por ejemplo). Sheldrake también sugiere que la adquisición del lenguaje puede estar influenciada por la resonancia mórfica de agentes parlantes anteriores. Roe y sus colaboradores están llevando a cabo pruebas parapsicológicas de esta teoría que consiste en actividades de aprendizaje de un idioma desconocido para el participante a través de un canal psi.

Elizabeth C. Roxburgh examinó estudios de mediumnidad mental mediante el método de análisis fenomenológico de los mediums para demostrar si es posible explicar la mediumnidad en términos de supervivencia en lugar de explorar los significados subjetivos de las habilidades de los mediums adoptando un enfoque orientado hacia el proceso. Roxburgh mapeó las interpretaciones de los mediums, independientemente de la ontología real de la mediumnidad, y para ello aplicó una metodología cualitativa para analizar la mediumnidad desde una perspectiva fenomenológica. También administró entrevistas semi-estructuradas a diez médiums espiritistas.

Detalle del público participante durante una de las sesiones.
Detalle del público participante durante una de las sesiones.

Simon J. Sherwood (Centre for the Study of Anomalous Psychological Processes de la División de Psicología de la Universidad de Northampton) de Inglaterra, analizó el interés de las variables ambientales en casos de apariciones y poltergeist. Sherwood ha comenzado a examinar la sensibilidad del medio ambiente en ciertos individuos, y sostienen que hay personas particularmente sensibles al medio ambiente que son más propensas a tener experiencias aparicionales. De modo que es posible que estas personas respondan más a los efectos de variables ambientales que causan las experiencias, o bien es posible que estas personas tengan más probabilidades de detectar su presencia, asumiendo que las apariciones son objetivamente reales. Algunas dimensiones de personalidad que podrían diferenciar entre estos ambos grupos incluyen la propensión a la fantasía y la transliminalidad. Aunque Sherwood no tiene aun resultados, su hipótesis es que quienes han tenido experiencias aparicionales puntúan significativamente más alto en transliminalidad y sensibilidad ambiental en comparación con un grupo control (sin experiencias).

Hideyuki Kokubo de Tokio, Japón, presentó los resultados de experimentos realizados en el Institute for Living Body Measurements (International Research Institute Chiba de la Universidad de Meiji) basado en las prácticas de curación utilizando un método de medición mediante gas en el que se emplearon trozos de Cucumis sativus (pepino chino). Sanadores practicantes de técnicas de Qi-gong intentaron influir a los pepino como bio-sensores. Cada sanador realizó dos ensayos de sanación sin contacto en un lapso de 30 minutos con el objetivo de aumentar el olor de los pepinos, mientras que las muestras de control (sin influencia) estaban en otra habitación. Después de las pruebas, todas las muestras se colocaron en contenedores separados a 24oC. Los resultados mostraron una tendencia favorable al sanador, en comparación con el grupo control.

Annalisa Ventola, David Luke, Marios Kitenis, y Fábio Eduardo da Silva, junto a sus asistentes Mary-Jane Anderson, Julieta Amabile Pianaro, Sibele Pilato, Pontes Estevão y Marcia Presezeniak, hicieron enormes esfuerzos en la organización y la organización de esta convención agradable e informativa. A partir de esta convención, Alejandro Parra asumió la presidencia de la PA, cuyo próximo encuentro en 2012 tendrá lugar en Durham, Carolina del Norte, auspiciado por el Rhine Research Center.



Revista de libros
De Pablos, Fernando (2011). El Cerebro en la Noche: Fundamentos científicos de los sueños precognitivos. Murcia: Diego Marin Editor. ISBN: 978-84-8425-914-5. Pp. 383.

Fernando de Pablos, médico e investigador español, enseña psicofisiología y de psicopatología en la Facultad de Psicología de la Universidad de Murcia, y ha ejercido como neuropsiquiatra, tanto en Murcia como en la Universidad Estatal de Nueva York. El Cerebro en la Noche es producto de un autoanálisis de sus propias experiencias precognitivas, parte de lo cual ha publicado originalmente en inglés en Precognitive Memory (2006) y varios artículos en el Journal of the Society for Psychical Research. De Pablos dedica once capítulos a analizar los sueños precognitivos, y su posible verificación experimental y un modelo teórico coherente para ponerlos a prueba. El autor describe la historia de la experiencias premonitoria en sueños, desde las experiencias de Aristander de Telmesius en Licia hasta el enfoque de Sigmund Freud, la taxonomía de L.E.Rhine y las teorías de W.D.Dunne. Examina también el estudio de las premoniciones en sueños a partir de los primeros estudios del sueño REM usando EEG, y clasifica los sueños premonitorios a nivel neuronal y sistémico. Otros capítulos evalúan la formación de los sueños precognitivos (realista, analógica/realista, simbólicos, y analógico simbólico), el problema del tiempo y su relación con los neurobiología del dormir/soñar. De Pablos concluye diciendo que los sueños son transformaciones analógicas complejas porque "la actividad de soñar no es un proceso de síntesis pobremente encadenado, o un proceso figurativo aleatorio. Los sueños responden a las mismas leyes que el complejo proceso analógico del pensar durante el estado de vigilía." El soñar -dice De Pablos- es un proceso cognitivo cuyo propósito es recuperar memorias del futuro, es decir, transferir información en la cual existe también ruido, y la cantidad de ruido puede ser considerable. Supongamos que nos vemos en la necesidad de identificar exactamente el nombre y actividad de una persona que hemos visto en una sola ocasión y nos sentimos totalmente inseguros. La estrategia será la de producir nombres análogos, o actividades análogas, porque el cerebro almacena la médula de certidumbre rodeándola de una madeja de analogías que pondrá en funcionamiento cuando sea necesario. La obra abunda en especulaciones teóricas que requerirán mayor contrastación empírica, no obstante, De Pablos es un investigador sistemático que ha iniciado una tarea titánica por determinar posibles patrones neurofisiólogicos de esta peculiar categoría de sueños paranormales.



Goldacre, Ben (2011). Mala Ciencia: Distinguir lo verdadero de lo falso. Madrid: Paidós. Pp. 400. ISBN: 9788449324963.

Bajo el subtitulo de "No te dejes engañar por curanderos charlatanes y otros farsantes", uno de los objetivos de esta obra es -obviamente- desenmascarar las afirmaciones charlatanescas, no sólo de las asi llamadas "pseudo-medicinas", como Goldacre califica a la acupuntura y la homeopatía, sino también de las excentricidades del nutricionismo, la sexología, las prácticas naturistas, la escasa formación científica de médicos y de otros profesionales, y la seducción que los medios de comunicación producen en la venta de productos, ideas y propuestas extrañas que, de alguna manera, han ganado una credibilidad incuestionable en la población en general. No obstante ello, paradójicamente, estos productos han generado gran desconfianza en la medicina clásica, algunos de cuyos representantes comienza a tomar seriamente en cuenta. También describe ejemplos de cómo distinguir entre divulgadores populares responsables de la ciencia de los alarmistas o mentirosos y responde en todo un capítulo a una gran pregunta: ¿por qué hay personas inteligentes que dan crédito a cosas estúpidas?

Desde 2003, Ben Goldacre, médico, investigador en medicina y periodista científico británico, denuncia y desenmascara a curanderos, prácticas pseudo-estadísticas, periodistas poco neutrales o extremistas, y a industrias farmacéuticas, en su columna del periódico The Guardian. Goldacre revela las mentiras detrás de las asi llamadas "medicinas alternativas". Su estilo literario es ácido, pero ameno e incluso humorístico; en ultima instancia alarmante por lo que el autor -uno de los pocos periodistas científicos con una clara comprensión de la ciencia y su método- califica como "mala ciencia", promovida por toda suerte de chantas y charlatanes.

Aunque el libro es muy recomendado para periodistas y estudiantes de periodismo, también es una buena lectura para científicos sociales, médicos y cualquier persona que decida poner a amigos y familiares en manos de procedimientos de dudosa eficacia y escasa credibilidad, pero sobretodo poderosamente rentables para sus promotores. ¿Su relación con la parapsicología? En ninguna parte del texto se ocupa de ella. Sus páginas absorben toda la tinta a prácticas pseudocientíficas en medicina clínica, corporaciones farmacéuticas, píldoras milagrosas, problemas éticos, efecto placebo, nutricionismo y otros campos. Pero su lectura dispara todos los posibles puentes para interpretar y resignificar el debate charalatanismo / parapsicología. Desde una pespectiva crítica, merece la pena su lectura para entender, al menos, que las barbaridades que ocurren en parapsicología, o incluso en áreas más sensibles, como la psicoterapia y la salud mental, no son tal alarmantes cuando se las compara con otros campos dotados de mayor hegemonía, dominio y solidez, como en tecnología y medicina.



Rutter Gordon (2011). Ghosts Caught on Film 3: Photographs of ghostly phenomena. Newton Abbot, UK: David & Charles Publishers. Pp. 160 pages. ISBN-10: 0715339036

Esta obra es un compendio de imágenes paranormales capturados por una cámara fotográfica, que sigue una exitosa secuela de libros ilustrados con fotografias a todo color de presuntas apariciones (los dos anteriores fueron escritos por Jim Eaton y Melvyn Willin, respectivamente) y bajo la forma de una intrigante colección que incluye figuras entre sombras, extrañas nieblas y apariciones fantasmales. Las imágenes incluyen una amplia gama de efectos: Orbes / luces y las imágenes obtenidas de los teléfonos móviles tienen un capítulo aparte; hay figuras fantasmales y caras que aparecen como extras. Gordon Rutter es uno de los fundadores de la Edinburgh Fortean Society, director del Instituto Charles Fort, y organizador de La Ciencia de los Fantasmas en Edinburgo, desde 2009, una exitosa seria de conferencias sobre apariciones y sitios encantados. Tal como podemos confirmarlo por el gran número de imágenes que llegan a través del sitio web del Instituto de Psicología Parnormal en Buenos Aires, muchas personas parecen ser bastante optimistas en su interpretación paranormalistas de las imágenes que captura.

A pesar de que estas imágenes suelen ser luces esferoides, condensación de aire, correas o u otros colgantes de la cámara o los dedos del operador, la velocidad lenta del obturador de la cámara, pixelado, efectos pareidólicos, efectos de flash en partículas de polvo (usualmente confundidas por orbs), e incluso la "ceguera" del fotógrafo, que puede sorprender aun al más experto profesional, el autor repasa estas y otras potenciales explicaciones y advierte que su libro puede ayudar a educar a los fotógrafos para que puedan descartar las imágenes normales de las presuntamente paranormales antes de afirmar, sin sentido crítico alguno, que tienen evidencia confiable de lo paranormal. El autor sostiene que gracias a dos factores de rápida evolución -la naturaleza de internet y la fotografía digital, sobretodo en telefonía celular- fue posible coleccionar en poco tiempo varias miles de imágenes anómalas, la mayoría de las cuales tenían fácil explicación, pero un pequeño porcentaje justificaba más investigación.

Antes de publicar las imágenes, el autor mismo estableció un sistema de votación, como algunos clubes de ghosthunters practican, basado en cuatro potenciales opciones para cada imagen exhibida on-line: (1) Imagen genuina, explicación normal pero sin fraude (efectos físicos o psicológicos), fraude liso y llano, e imagen dudosa. Se obtuvieron 300.000 votos en total. Luego, se eligieron las cinco imágenes que los votantes encontraron más convincentes, y que aparecen en la parte final del libro.



Rock, Adam J. & Krippner, Stanley (2011). Demystifying Shamans and their World: A multidisciplinary study. Charlottesville, VA: Imprint Academic. Pp. 250. ISBN-10: 1845402227.

Según Rock y Krippner, el chamanismo puede describirse como una técnica espiritual; un conjunto de técnicas y prácticas que permite a sus practicantes obtener un tipo de información que no suele ser accesible a los miembros de su comunidad. Los chamanes utilizan esta información para satisfacer las necesidades espirituales de los miembros de su comunidad y la obtienen mediante cambios en sus formas de percibir, pensar y sentir. En otras palabras, son capaces de autorregular sus estados mentales con prácticas que resultan en estados alterados de conciencia. Las técnicas y actividades empleadas por los chamanes para modificar su estado de conciencia incluyen, entre otras, la percusión, la danza, las drogas y los sueños lúcidos. A menudo estas técnicas y actividades forman parte de rituales espirituales.

Sus viajes al "mundo de los espíritus" dependen de la imaginación, y de la capacidad de éstos para autorregularse, y les ayudan a obtener información con que favorecer y curar a los miembros de su comunidad. Las formas de conocimiento de un chamán obedecen a su habilidad para alterar sus estados de conciencia. En la época imprevisible que nos ha tocado vivir, habría que reconsiderar la epistemología chamánica. Deberíamos examinar sus fuentes en la imaginación, la intuición, las visiones, los sueños y el cuerpo humanos. Tal vez las formas de conocimiento de estas personas puedan tener un uso práctico en un mundo donde se suceden cambios a toda velocidad, cambios que destruyen el medio natural, que contaminan el aire y las aguas y que ignoran el equilibrio ecológico. La epistemología chamánica hizo posible en su momento la supervivencia de la especie humana. A pesar de un resurgimiento del interés por el chamanismo y los estados de conciencia chamánico, estos fenómenos no son ni bien definidos ni entendido suficientemente. Los autores de este estudio multi-disciplinario se basan en la psicología, la filosofía y la antropología, con el objeto de desmitificar al chamanismo. Los autores analizan los puntos de vista en conflicto en relación con el chamanismo, la epistemología de los estados de conciencia chamánico y la naturaleza de las imágenes mentales encontrado durante estos estados.


 

* Jorge Villanueva fue redactor en Jefe de la Revista Argentina de Psicología Paranormal (1990-2004), Secretario del Instituto de Psicología Paranormal, Asoc. Civil, y becario de la Fundación BIAL. Es autor y traductor de artículos sobre historia de la parapsicología, investigación ganzfeld, y psychomanteum publicados en la RAPP y Journal of the Society for Psychical Research. Ha sido expositor en varias conferencias de parapsicología en Buenos Aires. Es miembro de la Asociación Iberoamericana de Parapsicología. Tiene particular interés en el estudio de los psíquicos y sus estrategias para estimular psi bajo condiciones de laboratorio, y la biografía de psíquicos e investigadores. Actualmente colabora en el proyecto SIPSI para crear la más completa base de datos en parapsicología en español.
Jorge Villanueva.
Comentado por
Jorge Villanueva*.
jovillanu@yahoo.com.ar
El Cerebro en la Noche: Fundamentos científicos de los sueños precognitivos.
El Cerebro en la Noche: Fundamentos científicos de los sueños precognitivos.
El Cerebro en la Noche: Fundamentos científicos de los sueños precognitivos.
El Cerebro en la Noche: Fundamentos científicos de los sueños precognitivos.
Ghosts Caught on Film 3: Photographs of ghostly phenomena.
Ghosts Caught on Film 3: Photographs of ghostly phenomena.
Demystifying Shamans and their World: A multidisciplinary study.
Demystifying Shamans and their World: A multidisciplinary study.
Noticias
QUINTO CURSO DE EXTENSION UNIVERSITARIO EN PSICOLOGIA PARANORMAL 2012

Organizado por el Departamento de Extensión Universitaria de la Universidad Abierta Interamericana, el Prof. Dr. Alejandro Parra y profesores invitados iniciarán la tercera versión del curso titulado "Psicología Paranormal 2012: ¿Cómo aconsejar a personas que tienen experiencias anómalas?" El propósito del curso es -entre otros- evaluar las variedades de la psicología paranormal e integrar sus hallazgos en teoría, investigación, educación y práctica clínica, analizar los descubrimientos y las interpretaciones de la psicología paranormal en el cuerpo de la psicología clásica, presentar una diversidad de experiencias que pueden aparecer en individuos sin que estén acompañados de indicadores de disfunción psicológica o médica, enseñar estrategias generales para interactuar con los pacientes que describen experiencias anómalas, y desarrollar métodos de exploración e investigación apropiados para areas de interés. Algunos de los temas del programa son: Coincidencias y diferencias entre psicoterapia y la practicas espirituales, cómo enfrentar experiencias paranormales, reacciones emocionales ante las experiencias anómalo/paranormales, psicología de las creencias paranormales, Experiencias anómalas y psicopatología: ¿alucinaciones, visiones o síntomas psicóticos?, y experiencias paranormales, sanación mental y transformación, entre otros. El curso comienza el día Sábado 14 de Abril (un módulo por Sábado), y continuará durante ocho encuentros hasta el Sábado 10 de Noviembre. El curso se dictará en Piedras 1046 (Subte Línea "C", Est. San Juan), en el rango horario de 10 a 18hs. (con intervalo para almuerzo). Para inscripciones completar el formulario on-line: http://www.alipsi.com.ar/cursos.asp?id_curso=13


 

CURSO-TALLER "SABERES ALTERNATIVOS 2012": CONOCIMIENTOS MAS ALLA DE LA RAZON

A cargo de Prof. Dr. Alejandro Parra el Instituto de Psicología Paranormal comenzará el curso anual "Saberes Alternativos 2012: Conocimientos más allá de la razón" cuyo eje central girará en torno a la psicología y la psiquiatría transpersonal, teorías actuales acerca de la consciencia, y el abordaje de prácticas espirituales tales como el chamanismo, el yoga, el budismo, entre otras, desde la perspectiva de la psiquiatría transcultural, y otros modelos de Oriente y Occidente. Entre otros temas, se abordarán también la meditación, los estados hipnagógicos (por ejemplo, ganzfeld y psicomanteum), hipnosis, experiencias fuera del cuerpo, experiencias místicas, y la potencial aplicación terapéutica de las experiencias espirituales. El curso-taller está destinado a nuclear personas interesadas en trabajar en estas sabidurías y técnicas, revisar aspectos teóricos y conceptuales -por la mañana- y además tomar parte de un grupo de personas interesadas en diseñar y llevar a cabo ejercicios vivenciales basados en estas operaciones mentales -por la tarde. El inicio de la actividad será a partir del dia Sábado 7 de Abril de 10 a 18hs. Para mayor información ver: http://www.alipsi.com.ar/cursos.asp?id_curso=17


 

ARTE Y PARAPSICOLOGIA EN EUROPA: DOS EXHIBICIONES

La relación entre el arte y lo paranormal ha tomado interés de parte de muchos curadores en varios museos en esta última década. Prueba de ello fueron las exhibiciones "The Perfect Medium" en el Museo Metropolitano de Arte en New York en 2005, que inspiró muchas otras en diversos paises, e incluso en Argentina con "Imágenes de lo Oculto" (2006) y "El Espiritismo en la Voz de los Espiritistas" (2010), ambas organizadas por el Instituto de Psicología Paranormal en el Museo Roca -Instituto de Investigaciones Históricas. Ahora, el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Estrasburgo, Francia, presenta la exhibición de "Europe and the Spirit World or the Fascination with the Occult, 1750-1950" [Europa y el Mundo de los Espíritus, o la Fascinación por lo Oculto, 1750-1950] entre los dias 8 de Octubre, 2010 al 12 de Febrero, 2011, que en palabras de sus curadores se presenta "como una exhibición transdisciplinaria que explora la influencia de lo oculto en artistas, pensadores, escritores y académicos de toda Europa." La exhibición se divide en tres áreas: obras de arte (pinturas, dibujos, esculturas, y fotografías y libros sobre temas inexplicables y tradición esotérica, con una extensa cronología de manuscritos y obras raras y únicas, y la relación entre los fenómenos del ocultismo y el mundo científico, sus experimentos e instrumentos científicos. Los curadores Serge Fauchereau y Joëlle Pijaudier-Cabot, ambos historiadores de arte y un gran equipo de expertos museólogos y arquitectos, pertenecientes a Bibliothèque Nationale et Universitaire de Strasbourg, Cabinet des Estampes et Dessins de Strasbourg, y Musée Zoologique de Strasbourg, están exhibiendo más de 500 trabajos, 150 artefactos científicos y 1000 documentos traídos de varios paises de Europa en un espacio de más de 2500 mts2 del Museo Arte Moderno y Contemporáneo de Estrasburgo (ver http://www.musees.strasbourg.eu/sites_expos/europe-des-esprits/en/index.php?page=editions). La segunda exhibición es Milagros: Arte, Ciencia y Religión: Desde el siglo IV hasta la actualidad (23 de Septiembre, 2011 al 5 de Febrero , 2012) en el Museo de Arte Contemporáneo de Hamburgo, Alemania, una exhibición sobre los límites de la racionalidad occidental y sus fronteras internas y externas. Centrado en el arte contemporáneo, la exhibición interdisciplinaria explora lo extraordinario, las sanaciones misteriosas, fenómenos sobranaturales, innovaciones técnicas increíbles, e ideas creativas extraordinarias. La exhibición está organizada por el Deichtorhallen Hamburg y Siemens Stiftung de Hamburgo (ver www.wunder-ausstellung.de).
Revistas recibidas
Australian Journal of Parapychology. Vol.11, No.1, 2011.
Parapsykologiske Notiser. No.72, 2011.
Luce e Ombra. Vol. 111, No.3, Julio 2011.
Journal of the Society for Psychical Research. Vol.75.4, No.904, Julio 2011.
Journal of the Society for Psychical Research. Vol.75.1, No.905, October 2011.
Proceedings of the Society for Psychical Research. Vol. 59, Part 223, Octubre 2011.
Quaderni di Parapsicologia. Vol.43, No.1, Septiembre 2011.
Journal of the American Society for Psychical Research. Vol.98, No.3-4, Julio-Octubre 2004.
The Journal of Spirituality and Paranormal Studies. Vol.35, No.1, Enero 2012.
The AIPR News. Vol.5, No.2, Septiembre 2011.
MindField: The Bulletin of the Parapsychological Association. Vol.3, No.2, Primavera 2011.
MindField: The Bulletin of the Parapsychological Association. Vol.3, No.3, Otoño 2011.
Edge Science. No.9, Octubre-Diciembre 2011.
Parapsykologi: Forskning och Nyheter. No.57, Abril 2011.
Parapsykologi: Forskning och Nyheter. No.58, Septiembre 2011.
Parapsykologi: Forskning och Nyheter. No.59, Noviembre 2011.
Journal of International Society of Life Information Science. Vol.29, No.2, Septiembre 2011.
Tijdschrift voor Parapsychologie. Vol.78, No.2(390), 2011.
Paranormal Review. No.59, Julio 2011.
Query: La Scienza Indaga i Misteri. Vol.2, No.6, Verano 2011.
Query: La Scienza Indaga i Misteri. Vol.2, No.7, Otoño 2011.
Skeptical Inquirer. Vol.35, No.5, Septiembre 2011.
Skeptical Inquirer. Vol.35, No.6, Noviembre 2011.
The Searchlight. Vol.20, No.4, Diciembre 2011.
Paranthropology: Journal of Anthropological Approaches of the Paranormal. Vol.2, No.1, Enero 2011.
Paranthropology: Journal of Anthropological Approaches of the Paranormal. Vol.2, No.2, Abril 2011.
Paranthropology: Journal of Anthropological Approaches of the Paranormal. Vol.2, No.3, Julio 2011.



E-BOLETÍN PSI. Vol.7, No.1, Enero 2012

Publicación Oficial del INSTITUTO DE PSICOLOGIA PARANORMAL (IPP), Asoc. Civil
Reconocido con Personería Jurídica Resolución No. 1167/04 de fecha 17 de Septiembre de 2004.

E-Boletín Psi ® es un producto del Departamento de Publicaciones del IPP diseñado por Sergio Matteucci y editado por Alejandro Parra. Todos los derechos reservados. Los artículos de esta publicación están protegidos bajo la Ley Nacional (Argentina) de Propiedad Intelectual No. 11.723. El E-Boletin Psi ® es una publicación inscripta en la Dirección Nacional de Derecho de Autor bajo el 713462. La reproducción total o parcial, venta, distorsión dolosa o falsificación del contenido intelectual del presente boletín está penado por ley (art. 172 del Código Penal).

E-Boletín Psi ® aparece tres veces por año (Enero, Mayo y Septiembre) y su distribución es gratuita. Las fechas límite para presentar artículos breves, libros para revisar, eventos de próxima organización, y noticias serán el 2 de Diciembre (Enero), 2 de Abril (Mayo) y 2 de Agosto (Septiembre) correspondiente a cada número.

Toda correspondencia debe ser dirigida directamente a su Editor Alejandro Parra. (rapp@fibertel.com.ar)

STAFF

Editor
Alejandro Parra

Compaginación & Diseño
Sergio Matteucci

Asesor Legal
Héctor I.B. del Valle

Revisión de Libros
Jorge Villanueva

Colaboran en este número
Patricia Arca Mena, Juan Carlos Argibay, Gustavo A. Ludueña, Alejandro Parra, Marcello Truzzi, Jorge Villanueva, y Nicolás Viotti.
Reenvíe este Boletín a un amigo/colega interesado.
Si desea suscribirse a esta publicación en el futuro, envíe un mail a rapp@fibertel.com.ar
Para no recibir más el Boletín, envíar un mail a esa dirección y en el "asunto" escriba "Remover".
INSTITUTO DE PSICOLOGIA PARANORMAL
Salta 2015 (C1137ACQ) - Bs. As. Argentina - Telfax: (+5411) 4305-6724 - (15) 6161-1376 - rapp@fibertel.com.ar